La multa que te puede caer por llevar así las bolsas de la compra en el coche

¿Quién no ha dejado dejado alguna vez las bolsas de la compra de cualquiera de los supermercados de Ceuta en el asiento trasero del coche por las prisas? Aunque es una práctica común, pocos conocen los riesgos que esto conlleva para los conductores y pasajeros. Además, según la normativa española actual, esta acción puede acarrear multas, dependiendo del tipo de infracción cometida. La Dirección General de Tráfico (DGT) advierte de que transportar la compra suelta dentro del vehículo, así como cualquier otro objeto que pueda caer o moverse de manera peligrosa, poniendo en riesgo la integridad de quienes viajan, puede acabar en sanción.

Peligro para la seguridad vial

El artículo 14 del Reglamento General de Circulación establece que la carga dentro de un vehículo debe estar dispuesta de manera que no pueda arrastrarse, caer parcial o totalmente, o desplazarse peligrosamente, comprometiendo la estabilidad del vehículo o causando molestias evitables como ruido o polvo. Aunque pueda parecer una práctica inofensiva, dejar las bolsas en el asiento trasero puede causar accidentes en carretera con consecuencias graves, como lesiones a personas o daños al vehículo. Esto se debe a posibles golpes causados por objetos proyectados en caso de frenazos bruscos, obstrucciones en la vía o pérdida de control del automóvil.

Cuáles son las multas por llevar la compra suelta

Incumplir esta normativa puede resultar en diversas sanciones de tráfico, clasificadas por la DGT según su gravedad, que detalla la empresa Renting Finders en su página web. Transportar paquetes sueltos: según el artículo 14 del Reglamento General de Circulación, llevar paquetes sueltos en los asientos del automóvil puede conllevar una multa de 200 euros para el conductor. Esto se aplica a bolsas de la compra u otros objetos que puedan proyectarse en caso de accidente y deben estar debidamente asegurados. Comprometer la estabilidad del vehículo: si la carga transportada compromete la estabilidad del vehículo, se puede imponer una sanción de 200 euros. Aunque es poco probable con las bolsas de la compra, es importante tener en cuenta este aspecto, especialmente al transportar objetos pesados que podrían afectar el equilibrio del vehículo. Manipular objetos mientras se conduce: Aunque no esté especificado en el Reglamento General de Circulación, manipular objetos mientras se conduce se considera peligroso y puede resultar en una multa de 80 euros. La distracción al volante aumenta el riesgo de accidentes. Obstaculizar la visión y la movilidad: El artículo 18 del Reglamento General de Circulación establece que los conductores deben mantener la libertad de movimiento y el campo de visión mientras conducen. Si los objetos sueltos dificultan estas condiciones, la sanción puede ascender a 200 euros. Superar la masa autorizada del vehículo: Aunque poco probable con la compra, superar la masa autorizada puede resultar en multas que van desde 300 hasta 4.000 euros, dependiendo del exceso de carga. Obstaculizar la vía: Dejar objetos sueltos en la vía puede resultar en una sanción de 500 euros, considerada como muy grave según la Ley sobre Tráfico, Circulación de Vehículos a Motor y Seguridad Vial. Dejar la compra en el suelo: Dejar las bolsas en el suelo cerca del automóvil después de salir del supermercado se considera una obstrucción en la vía y puede resultar en una multa de 80 euros. Aunque estas sanciones no restan puntos del carnet, es importante evitar infringir las normas de tráfico para garantizar la seguridad en las carreteras.

Los riesgos de llevar las bolsas en el asiento trasero

Aunque se busca evitar multas, es esencial evitar estas prácticas para mantener la seguridad en las carreteras. Aunque parezca inofensivo, transportar las bolsas en el asiento trasero puede representar peligros: Efecto elefante: un objeto suelto puede aumentar su masa durante el movimiento. Por ejemplo, un litro de leche puede convertirse en un proyectil de 50 kilogramos durante un frenazo a 50 kilómetros por hora. Atasco de los pedales: objetos pequeños pueden llegar a los pedales, afectando el control del vehículo. Cambios en el comportamiento del coche: el exceso de carga puede afectar la aceleración, distancia de frenado y tracción de los neumáticos.