Compromís lleva al Senado “la cesión del espacio aéreo del Sáhara a Marruecos”. Así lo ha indicado el portavoz de la coalición política en la Cámara Alta, Carles Mulet, quien ha hecho una serie de preguntas al respecto. Refiriéndose a la información de la que se han hecho eco varios medios de comunicación, planteando que el Polisario rechaza los contactos entre Rabat y Madrid para que Marruecos gestione el espacio aéreo del Sáhara a cargo de ENAIRE y que el Gobierno habría reconocido que negocia con Marruecos la gestión del espacio aéreo del Sáhara, desde Compromís con expertos controladores aéreos del gestor de navegación aérea en Canarias. “Tras la ocupación por Marruecos del Sahara Occidental, la OACI mantiene la asignación a España del espacio aéreo que sobre dicho territorio tenía como responsabilidad”, ha recordado Mulet. De acuerdo con lo explicado por los expertos al portavoz de Compromís, “al iniciarse en dicho territorio las misiones de la ONU, la OACI, como miembro de esta, decidió, manteniendo la mencionada asignación y la responsabilidad del control de la navegación aérea como FIR/UIR Canarias, ubicar los aeródromos de la zona, El Aaiún y Villa Cisneros, fuera de los estados de España y de Marruecos y agruparlos bajo el epígrafe de Western Sahara”. Por otra parte, han detallado que “ya en el AFI Ran Meeting de 1997, la delegación de Marruecos presentó una solicitud para revisar el ANP AFI agrupando a dichos aeródromos bajo el epígrafe de Marruecos. Ante la protesta de la delegación española, la OACI tomó cartas en el asunto ratificando su decisión de mantenerlos bajo el Western Sahara”.
"Marruecos había cambiado los designadores y nombres de dichos aeródromos"
A lo que han agregado que “ya para ese entonces, Marruecos había cambiado los designadores y nombres de dichos aeródromos de GSAI/ El Aaiún a GMML/Laayoune y de GSVO/Villa Cisneros a GMMH/Dakhla y había eliminado la conexión directa de las torres de control de dichos aeródromos, con el Centro de Control de Canarias (AENA-ENAIRE), responsable del tráfico aéreo en la zona”. Los expertos controladores aéreos de ENAIRE le ha detallado a Mulet que “en posteriores reuniones de la zona AFI, principalmente en las reuniones APIRG y del subgrupo COM, dentro de las deficiencias e incumplimientos de la normativa y requerimientos OACI, se incluye, entre otras, la de la falta de comunicación directa de las torres de GSAI y GSVO con el Centro de Control de Canarias (AENA-ENAIRE)”. Al respecto han indicado igualmente que los intentos de restablecimiento de la comunicación en reuniones bilaterales y del grupo SAT con Marruecos, “no dieron resultado, a pesar de haberse desarrollado en la zona, impulsado por Canarias, una red de comunicaciones satelitales a la que actualmente, entre otros, está enganchado Marruecos”. En este sentido, han explicado al portavoz de Compromís que “en el ANP AFI, hasta su última versión de principios de 2000, continúa apareciendo, como incumplimiento/deficiencia la mencionada falta de comunicación. En el report del COM/SG de finales de 2000, sin saber cómo, aparece este requisito de comunicación como operativo, lo que es completamente falso”.
"En la actualidad se sigue sin tener comunicación directa entre el ACC Canarias"
Sobre el panorama, han dejado claro que “la situación actual es que España, a través del Centro de Control de Canarias (AENA-ENAIRE), como responsable del espacio aéreo sobre el Western Sahara, ha seguido llevando, a pesar de las dificultades, el control del tránsito aéreo sobre la zona, así como las arribadas y despegues a los mencionados aeropuertos”. De manera que “en la actualidad se sigue sin tener comunicación directa entre el ACC Canarias (AENA-ENAIRE), y las mencionadas torres bajo su jurisdicción, agravándose aún más las deficiencias e incumplimientos de requisitos, al no existir tampoco carta de acuerdo alguna, cuestión obligatoria, entre el ACC y dichas torres”. Por otra parte, los expertos han añadido que en cuanto al control de la zona se refiere, “hay que añadir la falta de información sobre el estado tanto de los aeródromos como de las radioayudas. Información de la que ni siquiera dispone el AIP España”. De acuerdo con lo que indica Mulet, tras la conversación con los expertos de ENAIRE, “incidiendo más en la problemática, Marruecos tiene establecidas y publicadas cinco áreas restringidas y peligrosas que, al estar ubicadas en un espacio aéreo responsabilidad de España pero manejadas por Marruecos, originan un serio peligro añadido a la navegación aérea de la zona. Estas áreas, a pesar de estar en espacio aéreo asignado a España, no aparecen en el AIP España y hay que acudir al AIP Marruecos, cosa inédita en normativas OACI”.
"Son varias las incidencias operativas que se han producido en la zona"
Igualmente, ha destacado que “en este espacio aéreo de responsabilidad del ACC Canarias, el servicio de búsqueda y Salvamento (SAR) de España, teóricamente responsable del área, no garantiza dicho servicio, teniéndolo así publicado en el AIP”. Para finalizar la exposición de motivos, ha comentado que “son varias las incidencias operativas que se han producido en la zona, especialmente en lo que se refiere a coordinación de arribadas y despegues a los aeródromos citados”, debido a las “múltiples circunstancias de la mencionada zona del Western Sahara que hacen que, mientras las mismas perduren y no sean corregidas, no se pueda garantizar la seguridad de las operaciones por parte del ACC Canarias (AENA-ENAIRE)”. Argumentando que se trata de un problema político que afecta plenamente a la seguridad de España y a zonas de Canarias, el portavoz de la coalición política en la Cámara Alta, Carles Mulet, pregunta al Gobierno sobre las medidas que se piensan tomar para resolver la problemática. Asimismo, ha planteado las siguientes interrogantes: ¿Qué reuniones se han producido entre España-Marruecos- OACI con el objeto de darle solución a este asunto? ¿Cómo es posible que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el ministro de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, José Manuel Albares, actúen de modo premeditado a espaldas de las cortes españolas, de la sociedad civil española y del pueblo saharaui? Mulet también quiere que le respondan, ¿cómo es posible que la gestión del espacio aéreo del Sáhara Occidental que pertenece al pueblo saharaui y corresponde en última instancia a España a través de ENAIRE la gestión del mismo por ser la potencia administradora del territorio se ceda a Marruecos sin pudor? y ¿en qué consiste la mayor seguridad en las conexiones y cooperación técnica que se da según el Gobierno de España con esta vergonzosa gestión y cesión de ENAIRE?