Mustafa Ramid, ministro de Estado de Derechos Humanos de
Marruecos, anunció el viernes, aunque horas después, según publica el medio marroquí Le360 se habría retractado de su solicitud de ser relevado de sus funciones ministeriales. Al-Ramid envió la carta de renuncia del gobierno al primer ministro Saad al-Din al-Othmani el pasado viernes por la noche, y solicitó que se la enviara al
rey Mohammed VI para marcarla, que todavía no ha respondido a la renuncia de Ramid. El ministro de Estado de Derechos Humanos esgrimió en su carta de renuncia motivos personales relacionados con su estado de salud para su decisión. Concretamente, en el escrito se refería a que no puede seguir soportando el peso de las responsabilidades que se le han confiado."En vista de mi estado de salud y de mi incapacidad para seguir asumiendo la carga de las responsabilidades que se me han confiado, presento mi dimisión como miembro del gobierno, con la esperanza de que la presente a Su Majestad el Rey, que Dios le proteja", podía leerse en la carta de presentación dirigida al primer ministro. Según publica, Le360, Mustafa Ramid renunció a su cargo por no haber sido informado de la decisión tomada por decreto y en consejo de gobierno de convocar una sesión extraordinaria del Parlamento a partir del martes, 2 de marzo. Mustafa Ramid habría retrocedido la noche del viernes 26 de febrero después de la disculpa que le presentó el director ejecutivo. Esta dimisión, que todavía no se ha formalizado por completo, se produce a pocos meses de las elecciones parlamentarias de septiembre, que en varios aspectos serán cruciales para el futuro del país. El Partido de la Justicia y el Desarrollo de Marruecos, al que pertenece Ramid, pierde una baza importante en su próxima campaña electoral. Cabe recordar que Mustafá Ramid ya presentó su dimisión en 2017, durante las tensiones en el seno de la coalición gubernamental. Dimisión rechazada por el Jefe de Gobierno, Saad Eddine El Otmani, que mantuvo un valioso activo en el equipo de gobierno del PJD.