“Mi vida y la de mi familia corren peligro”

{jaimage crop="ML" /}Abdelmalik Mohamed tiene miedo. Dice que tanto él como su familia se “sienten amenazados” y que, ahora, tras el asesinato de Tarek en la barriada del Príncipe hace hoy una semana, temen ser los próximos de la lista. “La propia Policía me ha advertido de que tanto mi vida como la de mi familia corre peligro”, afirma Mohamed que reconoce que su único delito es el de ser padre de Abdelmunin, uno de los tres detenidos por la UDYCO por su presunta relación con la muerte del que fuera miembro de las brigadas cívicas, Karim Mohamed.
“Me siento indefenso”, señala, tras dar el paso, por voluntad propia, de entrevistarse con ‘El Faro’ para dejar constancia de la situación en la que se encuentra su familia. “Que la propia Policía sea la que me diga que mi vida corre peligro es para tener miedo. Al principio tenía mis reservas sobre esto, no quería tomármelo en serio  pero después del asesinato de Tarek todo ha cambiado. ¿A nosotros quién nos protege? Si la propia Policía sabe que nuestras vidas corren peligro... ¿cómo vamos a seguir así? Están preguntando por dónde nos movemos, dónde nos sentamos y la gente se acerca y te dice que tengamos cuidado. Así no podemos vivir”, señala.
Abdelmalik Mohamed ha aplicado el silogismo de la calle: si a Tarek le mataron por ser cuñado del ‘Pajarito’, a él le puede sobrevenir la misma amenaza por ser padre de Abdelmunin, del que, lamenta, se ha distribuido una fotografía para tener señalada a la familia. “Nos sentimos acosados y tememos que quieran hacer con nosotros lo que hicieron con Tarek. Dios es el que te dice cuál es el día de tu muerte, sea por tiroteo sea por un accidente... pero duele esa incertidumbre, el estar señalado y el no saber  quién es el que te puede venir a tirotear. Si ser cuñado del ‘Pajarito’ es malo, también lo será el ser padre de Abdelmunin ¿no?”.
El secretismo que debería rodear cualquier investigación policial en torno a la espiral de violencia que sacude el Príncipe desde el año 2009 queda por los suelos. Abdelmalik confirma sin tapujos que, además de confiar plenamente en la inocencia de su hijo, sabe a la perfección que la Policía le ha estado investigando para intentar implicarlo en lo que él abiertamente denomina “trama”.
“Tengo pruebas, que se sabrán cuando deban saberse, de que mi hijo es inocente”, señala Abdelmalik. “Aquí no interesa absolutamente nada la verdad. La Policía sabe perfectamente que cuando hubo un tiroteo en la Pantera” -se refiere al ataque a un carpintero de la barriada- “la pistola estaba escondida allí, en la propia Pantera. Esa misma arma se subió después al Príncipe y se ocultó”, sentencia. “Esto lo saben todos y se sabe qué está pasando: que hay bandos que se están enfrentando y que esa lucha está salpicando a otras familias que nada tienen que ver con esto. Tarek era una bellísima persona y le han matado, o el otro chico: Karim, lo mismo. A mi hijo también le está salpicando todo esto sin tener nada que ver”, añade, aprovechando para mostrar sus condolencias a las familias de los dos asesinados.
Mohamed, que quiere publicar su historia en ‘El Faro’ para dejar constancia de lo que le está sucediendo a su entorno, lamenta el tipo de investigaciones policiales que se están llevando a cabo, y apunta directamente a la UDYCO. “Aquí se ha hecho una investigación rápida, de cinco minutos, para detener a mi hijo cuando la mitad de la barriada decía que los que mataron a Karim iban encapuchados. Quién se atreve a ir al Príncipe sin capucha, a disparar y matar... sólo los suicidas que quieren ser detenidos”, apunta.
Mohamed cree en la existencia de una trama y pone los dos últimos asesinatos sobre la misma balanza. En el caso de la muerte de Karim a las pocas horas se dieron nombres de presuntos criminales, y, días después, se organizó una manifestación. Por contra en el caso de la muerte de Tarek el silencio es el que ha prevalecido. “Aquí no ha habido testigos rápidos, nadie ha visto qué ha pasado, no hay manifestaciones... ¿motivo?, bien sencillo, nadie ha pagado a testigos y la gente no se va a manifestar en la calle porque no hay testigos falsos. Aquí no estamos en Marruecos pero parece que se está actuando de esa manera... muy rápido se está haciendo todo. Suceden los asesinatos, los políticos tienen miedo porque llegan las elecciones y tiene que haber detenidos pronto”, añade, encuadrando en este tipo de detenciones la de su propio hijo, localizado en Alicante un mes después del crimen. Con Abdelmunin entre rejas, su padre lo tiene claro. “Yo nunca pondría la mano en el fuego por uno de mis hijos si pensara que estaba implicado en algo como un asesinato, pero al averiguar cosas y recoger prueba... sé que mi hijo es imposible que haya cometido ese crimen. Contra él hay testigos falsos”, añade. “Aquí ha habido una trama bien trabajada contra Abdelmunin, si supiera que es culpable yo sería el primero que le diría al juez que le condenara más tiempo porque yo no crío pistoleros, delincuentes que matan a sangre fría a padres de familia. No tengo confianza en la UDYCO, en concreto en este grupo no en el resto de la Policía, y no la tengo porque hay mucha gente inocente que está presa. Quienes han tiroteado a Karim todavía están sueltos. Segurísimo. Los asesinos están en la calle, son pistoleros con sangre fría que trabajan a sueldo y que son capaces de entrar en un cafetín y matar a un padre como hicieron con Tarek, eso es muy duro. Lo que hay que hacer es una buena investigación antes que detenciones rápidas”.
Según mantiene Abdelmalik, horas antes de que asesinaran a Karim, quisieron matar a su propio hijo en Poblado Regulares. “Vinieron a buscar a mi hijo, vino un hombre encapuchado, con una cazadora en pleno verano y preguntando a la gente dónde estaba mi hijo. ¿Qué pistolero llega a una barriada preguntando por la persona a la que va a matar? A Karim y Tarek les mataron directamente, ¿a mi hijo por qué preguntaban por él? Es curioso, esa fue la trampa porque tras esto fue cuando empezó a comentarse que mi hijo subió al Príncipe a vengarse... Mi hijo no conocía a Karim, ahí se estaba preparando la trampa para buscar una excusa”.
Abdelmalik confiesa, sorpresivamente, conocer datos que le han convertido a él también en sospechoso, dejando en evidencia hasta el mismo secreto de sumario de las actuaciones. “Sé que han pedido dos órdenes de entrada en mi casa porque la propia Policía ha pensado que yo soy el que trae las armas de la península, cuando nada sé de esto. Me quieren involucrar en esta trama, se ha querido pedir dos órdenes de entrada en mi casa y se han denegado, acusándome de traer a Ceuta las armas. ¿Por qué me quieren involucrar? No tengo problemas: no hace falta que tengan orden cuando ellos quieran pueden venir a casa y registrar lo que quieran, pueden venir por sorpresa porque nada vamos a ocultar. Ellos deben saber de dónde han venido las armas, cómo han llegado a Ceuta empaquetadas, quién está dando las órdenes para las muertes... ellos son los que tienen que investigar y detener y acudir a la fuente, a la raíz en donde está el polvorín de Ceuta”, denuncia.