La sociedad pública Obimasa, de la Consejería de Medio Ambiente y Sostenibilidad, ha iniciado esta semana el desbroce y retirada de los residuos en el talud de Juan XXIII, una obra que realiza la empresa Tragsa mediante una encomienda de gestión y que tiene un presupuesto de 28.661 euros. Con esta actuación se da cumplimiento además a un acuerdo adoptado por el Pleno de la Asamblea el pasado mes de abril. Los trabajos en la zona conocida también como la Loma del Morro, que se prolongarán durante los meses de octubre y noviembre, consistirán en la creación de un margen de seguridad en el límite de la zona edificada, a modo de cortafuegos en el talud forestal, de 360 metros de largo por 10 metros de ancho. En esa franja se eliminará la masa arbórea mediante la tala fundamentalmente de eucaliptos, que tienen entre 4 y 7 metros de altura, y se aplicará en el tocón resultante un producto fitocida o herbicida con el objetivo de evitar el rebrote de estos árboles. Además, se ha colocado un mallado de seguridad en el límite del tramo que quedará despejado de vegetación para impedir la caída de objetos y piedras a la calzada de la carretera nacional 352, y también para asegurar a los operarios que están realizando trabajos verticales en esta ladera, de muy difícil acceso. Completa la actuación la retirada de la basura doméstica y residuos sólidos urbanos acumulada en la zona. Se trata de una actuación que entraña una gran dificultad debido a la elevada pendiente del talud y a la propia composición del suelo, lo que obliga a trabajar con medios específicos en un terreno de roca muy inestable y disgregada. Para la ejecución del desbroce se emplearán herramientas mecánicas y manuales, mientras que la limpieza de residuos se realizará a mano.