Medallas, en el Día de Ceuta, para reconocer a todos los caballas

Con la interpretación del mítico A mi manera por parte de la Asociación Coral de Ceuta Andrés del Río Abaurrea ha dado comienzo el acto oficial del Día de Ceuta, desarrollado en las Murallas Reales y que ha venido marcado por la pandemia, tanto en el aforo permitido como en el sentido de las propias medallas.

Así, el sector sanitario ha recogido la primera de las medallas por el cuidado dado a los pacientes de covid sin desatender también a los afectados por otras patologías. La medalla la ha recogido la doctora Susana Ascaso en representación de todos, quien ha mostrado su honor por haber sido designada para la recogida de este premio. Agradecida por el reconocimiento, ha aludido a la “mayor crisis sanitaria de Ceuta” que ha venido a marcar un estilo de vida pero también ha venido a aflorar la necesaria solidaridad para atender a los afectados por coronavirus.

Sanitarios y servicio de Oncología, una labor reconocida

“Esto ha hecho esforzarnos para luchar todos juntos. Rendirse no ha sido nunca una opción”, ha recordado Ascaso, quien ha aprovechado para recalcar que un “buen sistema sanitario proporciona estabilidad” por lo que “es necesario el apoyo a nuestra sanidad con el fin de mejorar la salud de los ceutíes”. Ascaso ha querido agradecer a sanitarios y no sanitarios que luchan por superar esta crisis y, de manera especial, se ha referido a compañeros fallecidos como Enrique Ostalé, personas que dedicaron su vida a cuidar a los demás. “Jamás os vamos a olvidar”.

El doctor Mohamed Hassan Benis, jefe del servicio de Oncología, ha recogido la segunda de las medallas en atención a todos los pacientes oncológicos que, siendo de riesgo, han hecho frente a la pandemia, así como los profesionales dedicados a la lucha contra esta enfermedad. Hassan ha tenido palabras para los pacientes que no han podido superar el cáncer, así como para los profesionales de Oncología, de Servicios de Cuidados Paliativos o el área de Mujeres Mastectomizadas… por su compromiso en el trabajo para cuidar a los enfermos. Ha reclamado que no se baje el esfuerzo en dotar todas las herramientas para tratar el cáncer en Ceuta, en igualdad con el resto de España.

La importancia del transporte público

El transporte público también ha sido reconocido: taxistas, helicópteros, autobuses, navieras y transportistas, que han sido representados por José Reyes, Antonio Barranco, José Blanco, Manuel Rejano y Manuel Sánchez. Ha sido Barranco quien ha recibido en representación de todos ellos la medalla destacando el trabajo llevado a cabo por todos estos trabajadores.

Barranco ha destacado lo clave que fue el sector del transporte en época de pandemia, sobre todo en el estado alarma, en unos momentos muy duros para los que nadie estaba preparado. Ha recordado ese marzo de 2020, para que ahora se pueda comprender mejor la situación vivida “que vamos superando poco a poco”. Fue una época en la que “el miedo se apoderó de muchos, eran momentos muy tristes, en los que hubo rescisión de derechos y libertades” y en los que se perdieron vidas humanas. Tiempos, ha recordado Barranco, en los que poder tener una mascarilla o unos guantes era como “tener un botín”. Tiempos en los que no había test de antígenos, ni se hablaba de vacunas, en los que la “angustia era enorme” y Ceuta vivía más aislada que nunca con una frontera cerrada.

“El confinamiento fue mucho mas duro aquí. Tuvimos que mantenernos activos asumiendo pérdidas”, ha recordado Barranco, recordando a cómo los taxistas salieron a la calle a cumplir con sus servicios y haciendo posibles los trasladados aunque “no facturaron ni para pipas”. No había mascarillas ni mamparas de separación, pero estuvieron en la calle.

También los autobuses uniendo barriadas con el centro, padeciendo dificultades para cobrar, pero “se la jugaron y se mantuvieron, cuando lo fácil hubiera sido abandonar el servicio”. Fue esencial también el transporte de mercancías en un periodo de pocas rotaciones de barco, en el que los profesionales estaban muchas horas esperando, con todo cerrado en Algeciras, en el que se gastaba mucho y no se ingresaba. El transporte marítimo fue el único nexo de unión con la Península y gracias a ello Ceuta no estuvo desabastecida, apostándose por mantener la plantilla a pesar de las consecuencias económicas desastrosas. Y por último el transporte aéreo también estuvo manteniendo a todo el personal en activo, facilitando el traslado de los enfermos y del material sanitario, en una clara “vocación al servicio de Ceuta”. Barranco ha recordado que “tenemos que vivir con el virus y vencerlo, encarar de forma eficiente es la clave”.

Colectivos profesionales claves en pandemia

Todos los colectivos y profesionales, entre ellos Protección Civil, las farmacias, los medios de comunicación, supermercados, el ejército o el sector de la limpieza han sido reconocidos, siendo la medalla recogida por Juan Moreno.

Se la ha dedicado a los voluntarios de Ceuta, porque “lo damos todo a cambio de nada, gracias por todos los momentos vividos. Estamos siempre que nos necesitan y estaremos al servicio de la ciudad. Los voluntarios nacen no se hacen”.

Reconocimiento a todos los ceutíes

Antes de que todo el pueblo de Ceuta haya sido reconocido con la medalla, la Coral ha entonado el conocido ‘Reloj no marques las horas’. Después, reconociendo no solo la labor de los sanitarios, sino el ejercicio social de todos los ceutíes durante la pandemia y en los críticos momentos vividos en mayo, se ha entregado el galardón a toda la sociedad. En representación de todos han subido al escenario Arjan Bhagwandas, Turia Abderrahaman, Salvador Bentolila y Manuel Gestal, así como las tres alumnas con mejor nota en la última prueba de acceso a la universidad, María Dolores Merino, Patricia Valeria Ruiz y Lucía Señor. Por ser la persona de más edad, ha recogido la distinción colectiva Arjan Bhagwandas.

Una de las alumnas ha agradecido el trabajo hecho por sanitarios, por docentes, por toda la sociedad en sí, recalcando la importancia de aprender de los mayores. Ha hecho hincapié en las situaciones desagradables, contagios, muertes que nos arrebataban esperanzas, pero poniendo la esperanza en que ya “vemos la luz al final del túnel”.

Las profesoras del Conservatorio María del Carmen León y Mónica Martos han entonado la pieza musical con la que ha terminado el acto propio de entrega de las medallas.