El Movimiento por la Dignidad y la Ciudadanía ha denunciado a través de una nota de prensa la situación que se presenta para aquellos pacientes que reciben tratamiento de hemodiálisis y que son trasladados en ambulancia desde sus domicilios hasta el centro. Según la agrupación política, se les ha comunicado a estas familias que ese servicio de transporte dejará de estar disponible a finales de este mes de octubre, debiendo desplazarse desde su domicilio al centro con sus propios medios. En este sentido, han acusado “un nuevo recorte” hacia los servicios que presta el
INGESA en la ciudad viéndose afectados “los menos favorecidos, ya sean enfermos, pensionistas o trabajadores”. Tal y como expresan a través de la nota, los enfermos renales deben acudir tres veces por semana al centro para recibir el tratamiento de hemodiálisis, con una duración de cuatro horas, tras lo cual estas personas sienten un malestar generalizado quedando sin apenas fuerzas para acometer la vuelta a casa en transporte público. Desde el MDyC reivindican que estas personas “necesitan que se adapten a sus necesidades las condiciones del transporte”, debiendo tener en cuenta que el centro de hemodiálisis está ubicado en una zona en la que el autobús hace ese recorrido cada hora. Y a esto, añaden que se sumaría la distancia a la que se encuentra el domicilio del paciente, pues en la mayoría de los casos debe tomar dos líneas de autobús, la inexistencia de una parada en la puerta del centro, las condiciones climatológicas, etc. La agrupación de Fatima Hamed exige al responsable del Área de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad que se preocupe por estos pacientes, abandonados por la sanidad pública y cubra estos desplazamientos mediante medios de transporte que puedan adecuarse a las especiales necesidades y características de los pacientes, estableciendo un convenio con
Cruz Roja para la utilización del transporte o cualquier otra empresa.
INGESA desmiente la anulación del transporte
En vista del comunicado de MDyC, el Instituto Nacional de Gestión Sanitaria ha anunciado que en "ningún momento se va a poner fin al transporte" y que las ambulancias "no son un transporte ordinario". Desde INGESA han querido transmitir que aquellos pacientes que no se encuentren en condiciones de poder asistir al centro sanitario por sus propios medios continuarán recibiendo una ambulancia en su domicilio a fin de llevarles para que reciban su tratamiento. Sin embargo, han indicado que "hay algunos pacientes" que irán por su propio pie ya que "hay informes médicos que lo corroboran". No obstante, han asegurado que se van a revisar todos los casos especialmente los de personas de avanzada edad o que tengan su domicilio más alejado del centro de salud.