Más del 60% del gasto en la obra de La Marina se hará por orden judicial

l portavoz del Ejecutivo, Emilio Carreira, puso ayer números a la obra de La Marina, que ha terminado convirtiéndose en el objeto de los últimos enfrentamientos de corte político. Puso números para clarificar qué parte del global que se va a gastar en esta actuación se corresponde con lo ordenado por sentencia judicial: en total 3,3 millones. Esa es la cifra que hasta ahora no se conocía y es la que se corresponde con el fallo judicial que tiene que acatar la Ciudad tras ser condenada a impermeabilizar todo el Paseo evitando así las filtraciones a los subterráneos. El gasto completo supera los cinco millones, así que el ordenado por los tribunales absorbe más del 60 por ciento del total.
Para Carreira, las críticas que se están conociendo contra el proyecto que abandera la Ciudad son ilógicas, puesto que no obedecen a un “interés general” sino a un prisma puramente particular de los partidos que están liderando la campaña. Carreira sentenció que, a juicio del Gobierno, resulta lógico que tras tener que gastar esos más de tres millones en La Marina, se aproveche para hacer algo más, reordenando así la zona para mejorar el tráfico rodado o el impacto comercial, amén de ganar más espacio en las aceras y solventar la nula accesibilidad existente hoy en día para comunicar la zona con, por ejemplo, el Parque Marítimo. “Esto no es ningún disparate”, puntualizó la cara visible del Gobierno, que compareció en rueda de prensa al término del Consejo adelantado al día de ayer.
Para el portavoz, la oposición solo pretende, con su crítica, “chafar una obra emblemática”, puntualizó, tan solo hora y media antes de que Caballas anunciara la interposición de un recurso (ver página 4). “Esto está poniendo nervioso a mucha gente”, añadió.
El Ejecutivo apoya, en bloque, la actuación en La Marina; una obra que comenzará el año próximo y que terminará en 2015, de acuerdo a los plazos establecidos, pero que cuenta ya con la oposición de los dos partidos que llegaron a abordar en la pasada sesión plenaria este asunto por urgencia.
Carreira puso cifras a la condena, pero también a la pasarela que tanta crítica ha suscitado y que quiere unir el Paseo con la zona del Casino y el Parque Marítimo: un 7% de la obra, es decir, en torno a 350.000 euros. “Los que critican, que les pregunten a los minusválidos por la pasarela, ¿es esto un despilfarro?”, se preguntó, recordando los muchos problemas que las personas con movilidad reducida tienen para acceder a zonas que son utilizadas por todos los ceutíes.
El portavoz arremetió contra el discurso de quienes ven esta obra como la absoluta implicación del Gobierno por el centro y la dejación de la periferia. “La Marina es un barrio de todos”, criticó, detallando que esa comparativa es “interesada” y que en el discurso del Gobierno no entra la diferenciación entre centro y barriadas.
“El centro no es sólo para los vecinos que viven allí, como el Alfonso Murube no es únicamente para los residentes en Hadú o el Centro Asesor de la Mujer exclusivamente para quienes tienen su vivienda alrededor”, dijo, recordando que la explanada de la Marina o el propio Parque son zonas de la ciudad a las que acuden vecinos de todos los puntos, así que las consecuencias inmediatas de esta obra tendrán repercusiones que afectarán a todos los ceutíes. Respecto al cambio de las losetas, Carreira señaló que se alterarán por otras de material más moderno porque hay que hacerlo, ya que al ser levantada toda la Marina las actuales quedarán destrozadas. “Nada es accesorio en esta actuación”, dijo.

Los objetivos del proyecto del Paseo en pleno centro

La remodelación del Paseo de La Marina servirá, de entrada, para impermeabilizar la cubierta del aparcamiento que tiene debajo, y después reordenar el tráfico tanto de vehículos como de peatones. El presupuesto de licitación de estas obras es de 5,4 millones de euros y el plazo de ejecución previsto, 13 meses, siguiéndose un proyecto que ha sido redactado por el arquitecto Jorge Chaves y el ingeniero Pedro Sierra, ambos de la Gerencia de Infraestructuras y Urbanismo (GIUCE). De entrada, el colectivo de arquitectos ya ha mostrado, de forma velada, su malestar aunque todavía no han hecho oficial esta denuncia a través de los medios pero sí por medio de las redes sociales. Además de la reparación del sistema de impermeabilización de la cubierta del aparcamiento y la reorganización del tráfico rodado y peatonal, el proyecto contempla la ampliación de acerado en la zona edificada y la continuidad del paseo, la implantación de nuevas estructuras para la mejora de accesos, de pavimentos y de mobiliario así como la mejora de la estructura básica. La entidad que adjudicará la ejecución de estos trabajos es la GIUCE, el expediente lo tramita la Sociedad de Fomento PROCESA y el procedimiento es ordinario y abierto.

Rotondas, nuevos accesos y aceras amplias

L. M. A. CEUTA
La reforma de La Marina supondrá, en este ejercicio, un gasto de 800.000 euros, mientras que las partidas siguientes se repartirán hasta 2015, periodo en el que se quiere tener terminada la actuación, que incluye la mejora de los accesos al Parque Marítimo del Mediterráneo, de manera que se consigue una mayor integración así como la posibilidad de eliminar puntos negros de suciedad y de seguridad en los actuales accesos entre la Marina y el Parque, que son escaleras de anchura reducida y largos recorridos. La solución que se encuentra es la pasarela atirantada que iría desde el cruce de Millán Astray hasta la misma entrada del Parque Marítimo. Esa estructura cruzaría sobre la carretera actual y sobre sendos paseos situados en ambos márgenes.
Con esta reforma se logra dar continuidad en el paseo principal con el de las Palmeras mediante una losa que comunica ambas por encima de la escalera actual de acceso al Poblado Marinero. La misma queda apoyada en la muralla de la fortificación y en dos pilares, una intermedia situada justo delante del cerramiento del aparcamiento.
Otro de los objetivos marcados es, precisamente, realizar labores de conservación y mantenimiento en la losa antigua, lo cual permite aumentar la anchura de la acera existente en la actualidad en la alineación de la edificación.
El tráfico se mejorará con actuaciones significativas en sus intersecciones más importantes como son las calles Méndez Núñez, Millán Astray o Teniente Arrabal. Igualmente se mejora la seguridad de la vía haciendo una circulación con calzadas separadas mediante una mediana de 1,2 metros de anchura.
Habrá un nivel de ruido menor y por tanto un mayor confort para el potencial usuario del mismo.