Las causas
Una vez que terminó de contar todo el proceso analizó las causas que habían llevado a esta situación y dijo de manera muy clara por un lado había sido por la caída de los ingresos en los últimos años y las propias estimaciones erróneas por parte del Gobierno de la Nación a la hora de establecer el crecimiento económico y que provoca como es lógico errores luego en los capítulos de ingresos.
Y sentenció que la deuda se había debido de manera principal a la falta de tesorería, porque se trataba en su gran mayoría de facturas que tenían su consignación presupuestaria.
Hizo una análisis completo de donde provenían gran parte de estas facturas pero por centrarse en las relacionadas con el tema de inversiones nos encontramos que quince millones son, precisamente del Plan Aparca y que debido al método alemán eran certificaciones que debían pagarse a lo largo de los próximos tres años.
Algunas son liquidaciones de obras de trabajos terminados como la Manzana del Revellín, el nuevo Centro Asesor de la Mujer, el albergue de la barriada de San José, entre otros. Igualmente, reflejó el consejero de Economía y Hacienda que otras responden a emergencias y además demoliciones inminentes que debían ejecutarse ya de manera urgente.
Un 18% de las facturas no incluídas se van a pagar
Durante todos estos días se ha producido cierta polémica por la relación de facturas que se habían presentado en la segunda fase abierta de reclamación y donde la mayor parte de las mismas no han sido incluídas por parte de los servicios técnicos dentro del plan.
El mismo consejero, tal y como se había comprometido en la sesión plenaria del pasado lunes, después de una moción de urgencia presentada por Caballas, trajo en el día de ayer la relación completa en tantos por cientos del conjunto de las citadas facturas. Pues bien, un dieciseis por ciento de las mismas, que era un dato que había ofrecido ya el pasado lunes, eran de facturas que o bien habían sido pagadas con anterioridad y que se encontraban repetidas, tal y como habían podido comprobar los propios servicios de Intervención.
Un dieciocho por ciento se van a incluir en el circuito normal de pago y se abonarán en las próximas semanas.
Una cifra parecida, es decir, un diecineve por ciento son de facturas que han prescrito o que no son exigibles. Sobre este particular dijo el portavoz del Partido Popular que algunas de las que se habían presentado correspondían a los años noventa.
Una cantidad igual, otro diecinueve por ciento son facturas que no han sido registradas antes del treinta y uno de diciembre del año pasado que era la fecha tope que establecía el Real Decreto del Gobierno y por último, casi un treinta por ciento, es decir, un veintiocho, son facturas que no han sido conformadas por parte de los servicios técnicos de la Consejería de Economía, Hacienda y Recursos Humanos.
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