La empresa manifiesta que la temporada estival ha sido “muy positiva “
Además ha ampliado dos años más su acuerdo con la ciudad autónoma
La época estival llega a su fin, ya lo está anunciando la climatología durante los últimos días que trae los primeros halos del otoño. Sin embargo la temporada de playas no finaliza oficialmente hasta el 10 de septiembre e, incluso, la Ciudad y Marsave estudian prorrogarla hasta mediados de mes. Dos semanas que probablemente se mantengan en la tendencia establecida durante estos últimos dos meses y de la que la empresa de socorrismo dice que ha sido más dura que la de 2016. “Este verano nuestros socorristas en Ceuta han trabajado mucho más en lo que se refiere a realizar asistencias sanitarias en las playas. Tenemos contabilizadas cuatro veces más en lo que vamos de 2017 que durante toda la temporada del 2016”.
La temporada ha estado marcada por dos hechos que han conllevado este aumento de asistencias: las picaduras de medusas y los rescates de inmigrantes. Con respecto a la primera, el coordinador de Marsave, Ion Mundín apunta que la única explicación que encuentran es que se debe a ciclos y fenómenos marinos y naturales “contra lo que poco podemos hacer”. A lo que añade que podría haber sido peor de no contar con las redes. Con respecto al tema de la inmigración, destaca el coordinador que la labor de los socorristas ha sido la de mero apoyo al de las unidades especializadas pero que, evidentemente, al tratarse en algunos casos de sucesos en el mar, se ha precisado de su ayuda o colaboración. “Llevamos multitud de rescates estos últimos diez días derivados del problema de la inmigración. Nuestra labor recae solamente en salvar las vidas de las personas arrojadas al mar, normalmente desde motos de agua, cercanas a las playas y dar aviso al 112 para que active a las fuerzas y cuerpos de seguridad necesarios en cada caso”, explica. Gracias a sus medios específicos (motos de agua de rescate) en algunas ocasiones han sido de gran ayuda para otras entidades como Salvamento Marítimo y la Guardia Civil. “El otro día fuimos de gran utilidad a la Guardia Civil. Con la ayuda de nuestras dos motos de agua se pudo rescatar el cuerpo de una persona fallecida en las rocas de Sarchal, lugar al que era imposible acceder con las embarcaciones de ellos”, expone. Un trabajo de coordinación entre todos los entes implicados que ha sido esencial tanto para el rescate como para la atención a estas personas.
No obstante Marsave hace una valoración “muy positiva” de este 2017. “Hemos conseguido nuestro objetivo de afianzarnos en Ceuta y prorrogar nuestro contrato para los próximos dos años”, manifiesta Mundín. “Trabajamos en multitud de localidades de la península y Baleares; y las ganas en mejorar la calidad, las ganas en tener mejor servicio cada año y la inversión para ello que se hace desde el Gobierno en Ceuta, no la hemos encontrado en casi ningún otro lugar. Y por ello, nuestra satisfacción y orgullo por la confianza depositada con la prórroga de este contrato por otros dos años”, señala Mundín. Además este año la empresa ha conseguido tener gran parte de la plantilla formada por Marsave en la propia ciudad durante el invierno. “Con ello hemos conseguido inculcar nuestros protocolos de funcionamiento y manera de trabajar específica, más aún si cabe que la temporada pasada. Contar con gente formada desde un primer momento con nosotros ha sido un punto muy importante”.
Por otra parte, fruto de ese acuerdo de ampliar el contrato con la Ciudad surge la tentativa de ampliar su margen de actuación en otras zonas costeras. “Estamos trabajando mano a mano con la Consejería de Medio Ambiente de cara a mejorar la calidad del servicio en la ciudad. Trabajamos para ver la opción más objetiva y eficaz de dotar con socorristas a playas de la bahía norte donde ahora no hay vigilancia constante”.