Unos 300 médicos de la región de Tánger se han unido para protestar por el deterioro de las condiciones de los hospitales públicos, anunciando sus renuncias en protesta contra las malas condiciones profesionales y materiales. Se han dirigido al director regional del Ministerio de Salud en la región de Tánger-Tetuán-Alhucemas, a quien han trasladado sus quejas.
La petición contempla “las condiciones catastróficas experimentadas por el sector de la salud, que no cumple las condiciones científicas vigentes a nivel internacional y no está a la altura de las aspiraciones de los ciudadanos para garantizar su derecho al tratamiento como un derecho constitucional garantizado por todos los convenios internacionales oficiales”, exponen.
El sindicato independiente de médicos del sector público ha estado anunciando huelgas durante algún tiempo para exigir mejores condiciones de trabajo y salarios más altos. Los médicos del sector público en Marruecos reciben salarios de unos 7.000 dirhams al mes, con salarios altos para sus contrapartes del sector privado.