La lucha contra el tráfico de drogas que se produce a ambos lados del Tarajal no cesa. Ceuta y Marruecos buscan vetar los movimientos de sustancias narcóticas, preferentemente hachís y pastillas.
Así, los servicios de seguridad marroquíes interceptaron este martes más de 11.000 pastillas de droga en el paso fronterizo y arrestaron a tres personas. Las pastillas son introducidas desde Ceuta a Marruecos mientras que a la inversa se pasa hachís, alimentando un negocio que arroja importantes frutos económicos.
El primer detenido fue arrestado a bordo del vehículo que transportaba la droga a su llegada al territorio marroquí, mientras que los otros dos fueron arrestados poco tiempo después en otro coche que se encontraba cerca del paso fronterizo.
Las fuerzas actuantes consideran que entre ellos había conexión por eso procedieron al arresto de todos ellos.
Los tres detenidos, de entre 29 y 47 años, son de nacionalidad marroquí y pasaron a disposición judicial, bajo la supervisión de la fiscalía competente, según los datos manejados por la agencia Efe de Marruecos.
El pasado noviembre, las autoridades marroquíes se incautaron de dos millones de pastillas del estimulante sintético 'captagón' en el puerto de Tánger Med, en el norte del país, que iban dentro de un contenedor en un buque proveniente del Líbano.
En la pandemia, con motivo del cierre de la frontera, fueron detectados varios pases de pastillas a través de vía marítima o en drones para ser introducidos en Marruecos. Si mezcla es clave para elaborar karkubi, la llamada droga de los pobres.
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