Siguen las intervenciones enmarcadas en la lucha contra el tráfico de hachís procedente de Marruecos que intenta ser introducido en Ceuta para su posterior embarque hacia la Península. En pleno desarrollo de la fase de retorno aumenta el tránsito de vehículos y también los intentos de tráfico de sustancias estupefacientes.
Así, en el transcurso de un registro llevado a cabo por aduaneros marroquíes se procedió a la detención de un marroquí residente en el vecino país que escondía casi 18 kilos de hachís en el depósito de combustible del vehículo Mercedes Benz 2020 que conducía.
Registros constantes
El registro fue llevado a cabo entre las autoridades aduaneras y de seguridad, hallándose la droga repartida en distintos bloques escondidos en el tanque de gasolina. De inmediato se arrestó al conductor acusado de un delito de tráfico de drogas, siendo entregado a la Policía Judicial para la posterior investigación de estos hechos.
La droga quedó intervenida además del coche. Los agentes indagan ahora en los puntos de carga utilizados por los conductores que cruzan Bab Sebta, el lado marroquí del Tarajal, precisamente con ánimo de delinquir.
En este pasado mes de agosto se ha procedido a la detención de varias personas con droga, elevándose los decomisos conocidos a unos 300 kilos.
Además los agentes marroquíes están extremando los controles sobre las motocicletas ante la sospecha de que se estarían empleando para el tráfico de pequeñas cantidades no solo de drogas sino también de mercancía de contrabando.
De igual manera la Guardia Civil también ha intervenido pequeños alijos de hachís en el puerto, todos cargados por súbditos marroquíes residentes en diferentes puntos de Europa dándose la casualidad de varios con destino al mismo lugar: Bélgica.
El suceso más llamativo fue el de dos familias con hijos menores que fueron sorprendidos con 200 kilos en dos coches.