Noticias

Marlaska, en la frontera de Ceuta manda Marruecos

El mismo día en el que el ministro de Interior, Fernando Grande-Marlaska, ha mostrado público agradecimiento a su homólogo marroquí, Abdelouafi Laftit, por la colaboración prestada por Marruecos, la frontera de Ceuta sigue siendo el escenario de la improvisación. El papel de la Guardia Civil queda supeditado a las directrices marcadas por el otro lado, es Marruecos quien manda en la frontera, es Marruecos también quien decide los tiempos de espera de los hombres, mujeres y niños que se ven obligados a guardar cola en el Tarajal solo para regresar a sus viviendas. La amplia mayoría trabajadores transfronterizos, pero también hay españoles que tienen residencia al otro lado de la frontera. Los agentes del Instituto Armado deben controlar en grupos a todos ellos para evitar la generación de avalanchas en el lado español pero también acumulaciones infrahumanas en el tubo. El tiempo de espera viene marcado por el reloj de Marruecos y se mide según las directrices de unas autoridades que han extremado el celo hasta límites insospechados.

Los aduaneros siguen con su política de decomisos masivos sin expedir acta de aprehensión. La Policía revisa pasaportes. Eso para los peatones, en la explanada los vehículos se ven sometidos a las mismas esperas y aunque la carretera nacional esté 'limpia' de coches, no pueden salir de la explanada porque Marruecos no los acepta. Dejarlos salir supondría el bloqueo, como antaño, de la N352.

Marlaska ha agradecido a Marruecos su colaboración a pie de valla, su lucha contra el terrorismo y el tráfico de drogas. Ni una línea para la frontera con Ceuta, ni una sola mención a lo que sucede a pie de paso fronterizo, ni una alusión a lo que está ocurriendo en una frontera en la que nunca se sabe qué va a pasar porque los criterios se marcan desde el otro lado.

Hay personas que tras una jornada de trabajo en Ceuta llegan al Tarajal a las 18:00 horas y no consiguen salir hasta dos o tres horas después. No hay porteadores, tampoco bultos con mercancía, ni mujeres forradas de alcohol o mantas. Pero la ralentización es un hecho lo que obliga a que la Guardia Civil, marcada por una sangrante falta de efectivos, se vea obligada a reforzar la presencia de agentes ante el temor de cualquier incidente debido a la acumulación en el entorno fronterizo. Lo que está pasando en Ceuta es el vivo reflejo de una crisis fronteriza que ya no se esconde, en donde todo funciona de manera aleatoria, bajo sorpresas y sin atisbo de una solución. Marlaska y Laftit tenían cosas más importantes que abordar. La sombra del Tarajal no es lo suficientemente alargada como para que en los despachos de Madrid y Rabat generen la preocupación que queda atrapada en este lado del Estrecho. Como si nada.

Entradas recientes

Buscan a Jawad, joven desaparecido en la ruta del espigón

Se llama Jawad Amine Sedan. Tiene 19 años y su familia lleva sin saber de…

15/08/2024

El hermano del futbolista Akhrif llega a Argelia para las pruebas de ADN

El hermano del jugador de la Unión de Tánger, Abdellatif Akhrif, que sufrió un accidente…

15/08/2024

Intenta cruzar a Ceuta con 44.000 euros escondidos

Las autoridades aduaneras destinadas en el paso fronterizo de Bab Sebta, que una Marruecos con…

15/08/2024

Ceuta, cerca de alcanzar la mayor ocupación de menores marroquíes

Ceuta está cerca de alcanzar el mayor nivel de ocupación de sus centros de menores…

15/08/2024

Una familia pide justicia tras sufrir su hija una agresión en la feria

Justicia. Eso es lo que pide una familia de Ceuta después de que su hija…

15/08/2024

Julieta: una perrita modelo de vacaciones por Ceuta

Paseando por las calles de Ceuta todos miraban a un punto, era porque estaba pasando…

15/08/2024