“Los tenemos apiñados, ¿podemos abrir la puerta y los rechazamos? Sí, para fuera”

La madrugada del 29 de septiembre de 2005, cientos de subsaharianos intentaron su entrada en bloque a través de distintos puntos de la valla.

Era el primer asalto masivo que terminaría de forma dramática, con cuatro fallecidos (dos en el lado español y otros dos en el marroquí) tras ser disparados por la espalda mientras huían de unas inhumanas batidas en los campamentos de Beliones.
Las cuatro muertes fueron las que se correspondieron con los cadáveres hallados. No obstante los subsaharianos siempre dijeron que hubo más, entre ellos el de un bebé que perdió su madre cuando trepaba a la desesperada por las viejas escaleras de madera.
Esa madrugada el caos dominó la frontera. Los heridos se acumulaban en distintos puntos del perímetro. Las ambulancias, escasas, no llegaban a tiempo a las zonas en las que los guardias civiles mantenían a subsaharianos completamente rajados por las concertinas. Algo más de 600 hombres y mujeres iban siendo retenidos en distintos puntos del vallado. Al delegado del Gobierno, el socialista Jerónimo Nieto,  le sorprendió aquella crisis migratoria fuera de Ceuta. No obstante, las órdenes de la Delegación de favorecer rechazos de inmigrantes –estuvieran incluso heridos– llegaron al momento. Aquellas fueron también devoluciones en caliente, rechazos inmediatos abriendo las puertas para echar a decenas de subsaharianos o cargándolos en furgonetas porque así le convenía mejor a las fuerzas fronterizas marroquíes.
No se preguntó si había menores, refugiados, víctimas de trata o solicitantes de asilo. Fueron rechazados en caliente con el beneplácito de una Delegación del Gobierno y un Ejecutivo nacional del PSOE que no dudó en defenderlas e incluso mandar a Ceuta a su número 2, María Teresa Fernández de la Vega.
Las grabaciones del sistema de comunicaciones del COS de aquella época dejan buena muestra de cómo fueron esos rechazos y de cómo esos guardias civiles, superados por las circunstancias, recibían órdenes de la cúpula del momento, con el  que fuera teniente coronel, Carlos Alberto Guitard, al frente.
“Aquí la situación está controlada... los tenemos a todos apiñados entre la valla y el muro... en la ITV. Están revolucionados y los estamos intentando tranquilizar poco a poco. ¿Podemos abrir la puerta por la valla y rechazarlos o nos quedamos con ellos?”, preguntaba a las 5.58 horas un agente por telecomunicación tal y como queda recogido en uno de los audios internos de la época a los que tuvo acceso El Faro.
“Si se encuentran entre vallas, para afuera”, responde el mando, autorizando ese rechazo.
“Entiendo que si se puede abrir la valla y nos siguen... porque no quieren y los estamos llevando poco a poco...”, insiste, el agente.
“Afirmativo, si se pueden rechazar que se rechacen”, replica el mando.
En otra franja horaria, otro de los agentes consulta a los mandos que se va “a intentar a estos individuos meterlos entre vallas y rechazarlos por la puerta de Grada 3”, explica.
En otro audio se indica por parte de uno de los efectivos que “me dice la mejanía que no se los metamos por la puerta, que de forma regular se los llevemos en furgonetas”.
“Hagámoslo así”, autoriza el mando, proponiendo contar con apoyo de un celular del CNP.
Durante toda la madrugada, mientras los muertos eran recogidos del espacio fronterizo y los heridos más graves trasladados al Hospital, se producía sobre la marcha rechazos continuados de grupos entre las vallas, quedando todos ellos recogidos en las grabaciones internas que muestran cuál fue esa realidad.
La expulsión a través de la valla nunca fue negada; los guardias civiles cumplieron órdenes superiores de una Delegación que a su vez aplicaba la forma de actuar del Ministerio de Interior. El destino que les esperó a aquellos inmigrantes fue el abandono en el desierto y la muerte de varios de ellos en la segunda expulsión sin condiciones ejecutada en esa época.
Tras el 6-F y los continuados asaltos a la valla, vuelve a reabrirse el tema de las devoluciones en caliente (guste más o menos este término). Devoluciones que quieren ser blindadas jurídicamente por un PP que, estando en 2005 en la oposición, arremetía contra ello, al ser prácticas ejercidas por los socialistas.
Hoy la tortilla da la vuelta y es el mismo PSOE que avaló y permitió los rechazos en una madrugada caótica el que propone medidas contrarias a este tipo de prácticas. Sin ir más lejos, esta misma semana el Grupo Socialista en la Asamblea apoyaba sin fisuras la propuesta de Caballas de proponer un rechazo a las devoluciones, extendiendo así un discurso del que ya ha hecho gala en otras comparecencias. ¿Conocen en el actual GPS las medidas que se adoptaron hace tan solo 9 años? Las órdenes de esa época fueron tajantes: los inmigrantes debían ser expulsados al lado marroquí, no acogidos en el español estando en el espacio entre vallas. El ciclo se repite.

En detalles

La misma historia, otra época

1 - Entradas por varios puntos. Las hubo por distintos puntos del perímetro. La ITV fue uno de los más afectados, quedándose decenas de subsaharianos en la zona entre valla y muro. Hubo accesos por el paso del Biutz, como sucede en la actualidad.

2 - ¿Y la coordinación? Faltaban ambulancias, los guardias se quejaban a través de las transmisiones internas que tenían inmigrantes heridos graves y no eran atendidos. No hubo identificaciones sobre la marcha. 
3 - Expulsiones. El Gobierno de por aquel entonces avaló la decisión adoptada y tuvo que reconocer como cierto lo recogido en los audios de los guardias civiles. Fueron expulsiones en grupo, cientos de inmigrantes salieron por la puerta de atrás sin ser siquiera examinados.

Un debate con varios frentes

1 - Petición al CGPJ para que informe

La Asociación Libre de Abogados se encuentra entre las 130 asociaciones y entidades sociales del Estado español que han pedido al Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) que reclame emitir informe sobre la enmienda presentada por el Grupo Parlamentario Popular que pretende modificar la Ley de Extranjería legalizando las devoluciones en caliente desde Ceuta y Melilla.

2 - Al Consejo de Estado

Ese escrito al CGPJ se enmarca dentro de la campaña ¿Hasta donde están dispuestos a llegar?: por los derechos humanos en la Frontera Sur que se inició con la entrega el pasado 20 de noviembre de un escrito a los grupos parlamentarios en el Congreso de los Diputados solicitando que paren la reforma. En los próximos días, las organizaciones tienen previsto dirigirse al Consejo de Estado para que ejerza también su competencia y reclame emitir informe sobre la pretendida reforma. De igual manera se ha elevado la misma queja a las instituciones europeas para que protesten por las expulsiones que quieren blindarse jurídicamente en grupos numerosos.

3 - El PP y su defensa

En una de sus últimas intervenciones, el ministro de Interior, Jorge Fernández Díaz, ha defendido que su partido pretende “hacer una enmienda, modificar la ley de extranjería que modifica los derechos y los deberes de los inmigrantes. Ceuta y Melilla es una problemática específica no hay ninguna frontera exterior que sea como Ceuta y Melilla. Hay miles de inmigrantes ilegales en Marruecos que quieren llegar a España y nosotros tenemos el derecho y el deber de defender nuestras fronteras. Si alguien es capaz de plantearnos una solución mejor, que nos la plantee. La Guardia Civil está cumpliendo un mandato legal, proteger nuestras fronteras”.

4 - Las oenegé y la Iglesia

Las oenegé se han unido en contra de las devoluciones en caliente y en ese mismo camino se ha posicionado la Iglesia que además de mostrarse contraria a esos rechazos en cadena también ha defendido la retirada de las cuchillas a lo largo de todo el perímetro fronterizo. Ese posicionamiento ha sido muy criticado por el Gobierno actual por pura intromisión.

5 - La oposición

Es contraria a estas medidas e incluso se apoya en las críticas que al respecto ha vertido Europa. Entre los partidos destaca la postura del PSOE, que no apoya las devoluciones en caliente aunque las mismas fueron apoyadas en momentos de gobierno bajo su signo político.