La CECE se muestra prudente ante algunos datos positivos, que aún no influyen en la actividad empresarial
“Es verdad que en Ceuta tenemos constancia de aquellas mejoras que parece que está habiendo en el resto del país, pero aquí, en nuestra ciudad, no las estamos viendo. Al menos ésa es la información que nos trasmiten nuestros asociados”, asegura Antonio Ramírez, el nuevo secretario general de la Confederación de Empresarios de Ceuta (CECE). Fue nombrado para esa responsabilidad en la reunión que mantuvo la institución el pasado jueves, donde se acordó que Antonio Ramírez sustituyera en ese cargo a Alejandro Ramírez Hurtado, que en noviembre lo abandonó para ejercer como asesor económico de la Presidencia del Gobierno local.
El empresariado local continúa por lo tanto a la espera de señales evidentes de recuperación. No obstante, el actual secretario general de la CECE recuerda que la evolución de la economía ceutí habitualmente no marcha en paralelo a la del resto del país. “Esos ciclos de crisis y recuperación suelen llegar a nuestra ciudad un poco más tarde. Por eso nos mostramos prudentes. Esperemos que con el tiempo, con las mejoras y propuestas de la Ciudad y con las actuaciones que se vayan haciendo la situación mejore y vaya más en consonancia con el crecimiento económico, por decirlo del algún modo, que se está viviendo, al menos eso dicen, en el resto del país”, señala con cautela Antonio Ramírez.
Por otra parte, la CECE considera que los últimos datos de desempleo por sí solos no son indicativos de una mejora en la situación económica. Y por otro lado, su secretario general piensa que el descenso del paro en casi 300 trabajadores en relación a la situación de hace un año apenas tiene influencia en el consumo. En este sentido, comerciantes y hosteleros continúan con la vista puesta en los clientes que vienen del otro lado de la frontera. “Como Confederación, sí que vemos la importancia que sigue teniendo el turista marroquí en el comercio”, señala Antonio Ramírez. El secretario de la CECE también opta por la moderación a la hora de valorar el resultado de la puesta en funcionamiento del Tarajal II. “Nuestra postura es de prudencia. En todo caso, por lo menos se están llevando a cabo algunas actuaciones para tratar de solucionar el problema de la frontera”, señala.
De momento, afirma Antonio Ramírez, la CECE no tiene constancia de que se haya producido un aumento en el consumo local a raíz de la evolución de la economía de nuestra ciudad. Previsión de ligera desaceleración y leve caída del paro Los datos que arroja la economía local resultan un tanto desconcertantes. Apuntan hacia un panorama que da pie tanto al optimismo como a visiones más pesimistas. Por ello, la cautela parece la posición más sensata. Así, con precaución y reserva, es aconsejable valorar los datos del paro referidos al último mes. Según la información del Ministerio de Empleo, aumenta el número de desocupados en nuestra ciudad en relación a enero (78 parado más), pero desciende la cifra respecto a la de hace un año (299 parados menos). Además, a la hora de comparar estos datos, es necesario tener en cuenta la influencia de los planes de empleo en los mismos.
Al mismo tiempo, la evolución de la economía local se mantiene en cifras positivas. El Centro de Predicción Económica estima que el aumento del PIB en Ceuta y Melilla será del 1,8% en 2017. Sin embargo, ese informe señala que en las ciudades autónomas será donde se produzca el menor crecimiento económico del país. Además, ese 1,8% indica una desaceleración en el aumento del PIB.