La instrucción de las diligencias judiciales por el abordaje que protagonizaron el ‘Milenium II’ de Acciona y el mercante ‘New Glory’ a cinco millas al norte de Ceuta a mediados de enero del año pasado avanza sin pausa. Tras recibir la declaración, durante los últimos cuatro meses, del secretario de la Comisión Permanente de Investigación de Accidentes e Incidentes Marítimos (CIAIM) del Ministerio de Fomento, el ingeniero naval Francisco Mata Álvarez-Santullano; los responsables del ferry (citados como imputados) y un tripulante del ‘Jaume I’ de Baleària que navegaba por la zona en el momento del choque, los representantes legales de las navieras responsables de los buques colisionados (Acciona-Trasmediterránea y Transmar Shipping Co. SA) y de los pasajeros personados comenzaron a escuchar ayer las primeras grabaciones de las ‘cajas negras’ de los barcos, los Registradores de Datos de la Travesía (RDT).
La sesión arrancó, según informaron fuentes judiciales a este periódico, oyendo las secuencias sonoras del RDT del ‘New Glory’. A tal efecto, en la escucha participó una intérprete de tagalo, lengua autóctona de las partes central y sur de la isla de Luzón (Filipinas), donde se encuentra su capital, Manila, y de la que eran oriundos los marineros que tripulaban el ‘New Glory’ en el momento de los hechos.
La titular del Juzgado de Instrucción número 6 de la ciudad autónoma ha requerido también la declaración de éstos (en concreto, del primer oficial, Ulises C. de la Cruz, y del marinero que supuestamente hizo señales luminosas al ferry, Franco Lausa), aunque la naviera ha asegurado desconocer su paradero al no permanecer contratados por ellos actualmente.
Diferentes letrados involucrados en la causa solicitaron ayer, ante las dificultades existentes para escuchar con claridad las grabaciones, que se proceda a elaborar una transcripción de las mismas.
La instrucción aún está pendiente de que tanto el Ministerio Fiscal como el Juzgado se pronuncien y califiquen los hechos para atisbar el futuro que puede tener el proceso y saber si es factible que conduzca a un acuerdo extrajudicial o no. De momento, la naviera del ‘New Glory’ ya ha reclamado que Acciona le abone más de 580.000 euros en concepto de reparación y lucro cesante tras el abordaje.
Según la CIAIM, el siniestro tuvo como causa “primordial” la “falta de vigilancia eficaz” con la que operaron los oficiales del puente del buque de pasajeros, que no detectaron la situación de cruce “hasta quince segundos antes de que se produjera el abordaje” por “un exceso de confianza” y porque “su atención estaba focalizada entre una conversación ajena a la navegación y el cruce con el ferry ‘Jaume I”.
El capitán del barco de Acciona ha declarado en sede judicial como imputado por un presunto delito o falta de lesiones por imprudencia que el choque pudo producirse debido a la “contaminación lumínica” existente en aquel momento en el Estrecho o a los “ángulos muertos” del barco que comandaba, desde el que nunca vio nunca al carguero.
Las claves
Informes forenses
El médico forense del Juzgado ya ha emitido “aproximadamente la mitad” del total de los informes que se le requirieron sobre pasajeros que iban en el buque de Acciona cuando colisionó, aunque tras el abordaje solamente seis pasajeros precisaron atención médica.
Declaración
CIAIM y tripulantes. Tras la recepción del informe de la Comisión de Investigación de Incidentes y Accidentes Marítimos (CIAIM), por el Juzgado han pasado ya un representante de este organismo de Fomento y los tripulantes del barco de Acciona como principales testificales.
¿Qué son los RDT de un barco y qué registran?
El Convenio Internacional para la Seguridad de la Vida Humana en el Mar de la Organización Marítima Internacional obliga a todos los barcos a llevar un Registrador de Datos de la Travesía (RDT), un sistema de grabación y almacenamiento de datos para embarcaciones capaz de coleccionar datos de sus distintos sensores. Es obligatorio disponer de uno en todos los buques de pasaje y en aquellos de arqueo bruto igual o superior a 3.000 toneladas. Como las ‘cajas negras’ de las aeronaves, graban y almacenan, de manera segura y recuperable, todos los parámetros de navegación: información relativa a la posición, movimiento, comunicaciones en puente, megafonía, alarmas antiincendios e incluso la imagen radar. Su función es reforzar la seguridad de los barcos, mejorar su construcción y prevenir y solucionar accidentes en el medio marino.