Hoy, con eso de que es sábado y a buen seguro que más de un cargo estará de descanso, nada mejor que proponerle un juego a mi apreciado Aquilino Melgar. Imagínese que vive en el Príncipe, que tiene dos o tres hijos (voy a tirar por lo bajo), que ahora empieza la temida vuelta al cole con la sangría económica de todos los años y que le avisan de que se puede pedir ayudas (las famosas becas) por internet. Ya no le dicen más y usted, incauto, se piensa que será lo más fácil del mundo y que podrá pedir ayuda al Ministerio para que sus churumbeles puedan ir, como el resto, con todo el material a clase. Ahora viene la pesadilla, amigo Aquilino. Empieza a comprobar el mecanismo que debe seguir para rellenar la petición y ya le entran los sudores. Esto no hay quien lo entienda, pero lo peor es que ni lo entiende usted ni lo entiende la madre de familia, con carrera, a la que recurre para que le eche una mano. ¿Parece que el Ministerio quiere poner trabas para no soltar la pasta? Con eso de la crisis... a saber. Los sudores dan paso a la desesperación, ya que cuando piensa que ha hecho todos los pasos bien... toma sorpresa: aparece la palabra mágica: error. No le quiero ni contar cómo estará la vecina que no tiene internet en casa y que acude al bareto de al lado que encima le cobra 8 euros por cada uso que hace del ordenador. Vamos, que está haciendo el agosto gracias al Ministerio.
Ahora viene la buena noticia para el candidato a senador: ni usted, Aquilino, necesita becas, ni vive en el Príncipe. Pero muchos padres de familia residen en la barriada y están como desesperados buscando quien les ayude a cumplir con los trámites. La FAMPA ha puesto voluntarios y hay vecinos que se prestan a colaborar. ¿Pero hay que llegar a esta situación? Esto es ridículo. Seguro que me dirá que se van a poner medios, que no se quedará ningún padre sin su beca... y tarará tarará. Pero el hecho es que este año se han columpiado o han querido rizar el rizo desesperando a padres de familia que ven, con angustia, como llega el nuevo curso con sus exigencias, sus nuevos libros y los consiguientes gastos.
Antes de prometer las soluciones quizá podría haber sido más realista ¿no? No estaría mal.
Los trabajadores de empresas de Ceuta que pertenecen al sector de la limpieza viaria como…
El sindicato Comisiones Obreras, con representación en Ceuta, ha reclamado al ministro Óscar López un…
“Ceuta es luz”. Así es como describe un extremeño de Don Benito nuestra ciudad desde…
El Museo del Revellín acoge en Ceuta, desde esta tarde y hasta el día 3…
La Gala del Deporte de este año sigue adelante y el jurado ha dado a…
El Servicio de Extinción de Incendios y Salvamento (SEIS) de Ceuta ha tenido que intervenir…