Aróstegui acusó al Gobierno de haber intentado desprestigiar al antiguo alcalde l Caballas quiere que conste cómo murió
Después de muchos minutos de debate en el pleno resulta que la placa que se ha encontrado en la estatua del alcalde republicano Sánchez Prado nunca hizo referencia a que había sido fusilado. Caballas había presentado una interpelación, que fue defendida por Juan Luis Aróstegui, donde venia una ‘mano negra’ por parte del Ejecutivo al haber sustituido la placa original y haber colocado una que hacía referencia a que había sido un buen médico. Comentó que todos los partidos políticos de la Asamblea aprobaron en su día el realizar un homenaje a Sánchez Prado y que por esta razón se erigió una estatua justo enfrente del Ayuntamiento. Además, desde el año pasado, cada cinco de septiembre, se realizará un homenaje ante este monolito, justo en la fecha en que resultó pasado por las armas.
Las explicaciones que ofreció el consejero de Educación y Cultura, Javier Celaya, fueron en el sentido de que cuando estuvieron en Ceuta los integrantes de los Colegios Médicos de toda España se decidió rendirle un recuerdo a Sánchez Prado y que por esa razón se había encargado una placa que también se ha colocado junto a la estatua. La original se encontraba en mal estado, fue retirada y ha sido sustituida por una idéntica y en la misma, en ningún momento, se hace mención a que fuera fusilado, sino que viene su nombre, su profesión y que fue alcalde de Ceuta, además de la fecha de nacimiento y fecha de fallecimiento.
Ante las explicaciones, el propio Juan Luis Aróstegui aceptó la invitación que le hizo Celaya y comentó que presentarían una propuesta para que se incluya la palabra de que fue fusilado por defender la democracia.
Por tanto, al final se demostró que el equipo de Gobierno no había tenido nada que ver con la retirada de la placa, sino que la misma estaba en mal estado.