El Ministerio de Fomento ha previsto una inversión de 5 millones de euros en los arreglos que ya se están llevando a cabo en la N-362, la carretera del perímetro fronterizo. Las últimas lluvias causaron graves desperfectos en la zona, hasta el punto de que la carretera está gravemente dañada habiendo quedado algunos puntos al aire, es decir, sin cimiento que los sostengan. El riesgo de desprendimiento es tan evidente que hubo que aprobar de forma urgente el inicio de los arreglos de estos desperfectos causados por los desplazamientos de tierras. La empresa Tragsa, a través de una encomienda de gestión, es la responsable de estas actuaciones que llevan desarrollándose desde finales de febrero y principios de este mes. Está previsto que la obra de refuerzo y mantenimiento termine en junio. La actuación está afectando únicamente a la carretera, ya que la zona del vallado no se ha visto afectada en ningún momento. Se pretende arreglar todos los desperfectos que se han ido detectando con motivo de las lluvias y que afectaron de manera grave a la carretera, existiendo riesgo de desprendimientos mayores. La labor que se está llevando a cabo está consistiendo tanto en el refuerzo de la zona como en la colocación del mallado, evitando de esta manera que el deterioro sea mayor y entonces sí que sucedan complicaciones para el sistema de vigilancia existente en la zona perimetral. La obra, iniciada hace unas semanas, venía en el paquete de compromisos que anunció la ministra de Fomento, Ana Pastor, en su visita a Ceuta el pasado 14 de enero. De hecho, tras la firma de un protocolo en materia de vivienda con la Ciudad, Pastor ya avanzó el compromiso de inversión en la zona, que venía recogido en los Presupuestos Generales del Estado, garantizándose de esta manera la reparación de todos los muros de la carretera del perímetro fronterizo, que une el Tarajal con el puesto de Benzú y cuya denominación oficial es la N-362. Actuaciones como la que ahora se está desarrollando no son nuevas en una zona afectada gravemente por las lluvias debido a lo complicado de la orografía del terreno lo que provoca riesgos de desprendimiento.
El ministro conoció in situ los trabajos Durante la visita girada por el ministro de Interior, Jorge Fernández Díaz, al perímetro fronterizo éste pudo comprobar in situ el desarrollo de los trabajos que se están llevando a cabo. La ida y venida de camiones cargados de material era una constante dado que los trabajos deben finalizar en el plazo de cuatro meses, debiendo quedar todo el terreno reforzado y reparado. El propio delegado del Gobierno, Francisco Antonio González, mostró la memoria de actuaciones urbanísticas al ministro de Interior. Unas actuaciones complicadas porque se refieren a una zona cuyo orografía provoca ya de por sí mucha inestabilidad.