La mayoría de los críticos del PSOE no tiene interés en volver al partido

Parte de los críticos expulsados del PSOE en 2008 ha hablado. Y lo ha hecho después de que el Partido se haya planteado readmitir a los que salieron de esta formación justo antes de la Asamblea Constituyente en la que José Antonio Carracao fue elegido para llevar las riendas de la Federación Ceutí.

Para algunos esta noticia no ha hecho más que recordarles un momento que no quieren volver a vivir, para otros la oportunidad de continuar detrás de las siglas que siempre han llevado en el corazón. Hay opiniones varias.
Entre las personas que fueron expulsadas del Partido hay algunas de importancia en la actualidad ceutí, como por ejemplo el secretario general de la Unión General de Trabajadores (UGT), Antonio Gil. El sindicalista entiende que esta intención va en consonancia con la “línea en que el secretario general entiende que se tenga que producir una reactivación del Partido, que ese es el camino que se debe iniciar para hacerlo crecer, me imagino  que también en afiliación”.
Para Gil, Carracao ha elegido un momento que considera “oportuno” tras la “euforia” de los resultados electorales que le han permitido aumentar en un diputado más.
No obstante, el sindicalista quiso dejar claro que no tiene intención de volver al Partido, al menos hasta que se celebre un congreso en el que todos los militantes se puedan expresar. “En todo caso seré el último que vuelva si se dan las condiciones que se tienen que dar. Yo me plantearé la vuelta al PSOE, solicitaría que me admitieran, nunca antes de la celebración de un congreso, y dependiendo en qué condiciones se celebre”, manifestó el máximo responsable de los ugetistas ceutíes. Y Gil dice esto “para que el Partido funcione como una organización democrática”, no con el ánimo de participar “ni en el congreso ni en ningún comité. Nunca he tenido voz en ninguno de estos en el PSOE”.
En esta línea, Gil explicó sus condiciones en pocas palabras: “El PSOE se tendrá que someter a un congreso y este estará precedido por una apertura al Partido, sin ninguna reserva, de todos aquellos que quieran incorporarse. Cuando esto se produzca y yo entienda que las condiciones han sido plenamente democráticas y conforme a los estatutos me plantearé incorporarme”.
Otra de las personas que salieron del PSOE fue Basilio Fernández, presidente del Consejo Económico y Social (CES), aunque recuerda que él no solicitó volver al Partido después de ser disuelto para celebrar la posterior Asamblea Constituyente.
No obstante, aunque ahora desde el PSOE se está planteando abrir el partido a aquellos que echaron en su momento, Fernández asegura que no se ha planteado volver a esta formación. “Yo ahora mismo no tengo ninguna decisión sobre este tema, ni me la planteo, ni en este ni en ningún otro. Estoy ahora muy tranquilo y así quiero seguir”, manifestó.
Otro de los críticos es Javier Martínez quien entiende que a él lo etiquetaron como “una de las personas que habían simpatizado con otras opciones”. Sin embargo, en declaraciones a este medio quiso dejar claro que aunque participara en un acto de Caballas y le diera su apoyo es “independiente”. No obstante, dijo no tener “el más mínimo interés” de volver al PSOE. “Ni al PSOE ni a ningún otro partido. Mi vida política ya tuvo su punto y final”, afirmó. En esta línea, dijo estar a favor de la reforma electoral y de que no haya “ni políticos imputados ni que quieran vivir exclusivamente de la política”, y así ser simpatizante del movimiento 15-M.  Así, se mostró en contra de que Carracao vaya a cobrar por el  escaño y por su puesto de asesor en Delegación del Gobierno.
Gonzalo Sanz es uno de los críticos que estarían dispuestos a volver al partido, pero eso sí “si los que están ahora quieren que vuelva”, tendrá “los mismos criterios que  tuvo en su momento”. Y es que Sanz recuerda que ha “echado los dientes” en el Partido ya que entró con 17 años.

Carracao defiende que los miembros del Gobierno no cobren por ir a plenos

El secretario general del PSOE, José Antonio Carracao, recogió ayer la propuesta de Yolanda Bel quien, en anterior consejo de Gobierno, le instó a abandonar su puesto de asesor de la Delegación para dar ejemplo de austeridad. Pues bien, ayer el también diputado por el PSOE le aclaró que “a no ser que me lo pida el delegado” no se marchará de la plaza de los Reyes. Además, le aclaró a Bel, “mi marcha no supondría un recorte de gasto, pues otro asesor entraría en mi lugar. Creo que esta solicitud de Yolanda Bel es desviar la atención y no responde a nuestra solicitud de rebajar en un 50 por ciento el gasto en cargos dentro de la Asamblea”, aclaró.
Para el cabeza visible del PSOE lo que ha hecho el Gobierno es desviar la atención respecto de sus propuestas de reducción, cayendo en la “falta de rigor en lugar de debatir nuestra propuesta de recortar estos gastos. Lamentablemente se niega a oir a la oposición y se niega a debatir las cuestiones que planteamos desde la responsabilidad que nos encomendó la ciudadanía y además demuestran que es mera retórica los discursos que utilizan, pues hace escamente unos días dijo que iba a existir diálogo con la oposición y hemos visto que la respuesta es demagogia, falta de rigor y desviar la atención que parece que es lo que sabe hacer el gobierno y como alumna aventajada la señora Bel”, espetó. “Si la propuesta de Yolanda Bel de reducir el actual organigrama de gobierno en un 50% es decirme a mí que me vaya de la Delegación de Gobierno, creo que muchos de los que le dieron su confianza a este Ejecutivo se lo estarán replanteando. Si dice que tres asesores para la Delegación son excesivos que lo plantee desde su responsabilidad desde el gobierno, que sea valiente ella y aquellos que siguen sus tesis. No es una medida de ahorro que me vaya, pues no puedo obligarle al delegado que no cubra mi plaza si me voy. Hay otros responsables de la Ciudad como el señor Márquez, que también tiene dos cargos u otros miembros de este partido”, avanzó, en clara referencia, también histórica, a la figura de Vivas cuando combinaba su trabajo en el gabinete de Luis Moro con su labor en la Ciudad como diputado.
Abierto el debate sobre la reducción de gasto, Carracao dio más datos sobre su propuesta. Así, por ejemplo, indicó que el PSOE solicitará “que se retire la indemnización por asistencia a pleno del presidente de la Ciudad, de los consejeros y viceconsejeros, pues entiendo y entiende la ciudadanía que dentro de sus retribuciones está la de acudir a los plenos una vez al mes. Que se le pague más por ir al pleno nos parece desorbitado. No entiendo que se le pague 1.300 euros más por eso”, avanzó. El PSOE mantiene que los demás diputados en la oposición sí que deben cobrar esas dietas porque es un trabajo extra el que están realizando como labor fiscalizadora en la oposición. Otra medida que solicitó para contribuir en la calidad democrática de la Asamblea fue “que se separe la figura del presidente de la mesa del presidente de la Ciudad. Debemos ser capaces de conseguir este objetivo, pues estamos cansados de cómo el presidente de la Ciudad en calidad de su otro cargo usa y abusa de ambas funciones para influir en los debates. Debe separarse esta figura. ¿Mayor gasto?. No, pues estaríamos ahorrando en la reducción del organigrama. Sólo por un tema personal y partidista se puede explicar que no se haga esta separación”, dijo.

Carracao: “Va a existir una revisión de su situación”

El secretario general del PSOE, José Antonio Carracao, dejó ayer claro que “va a existir una revisión de la situación de cada uno de los demandantes de afiliación que quieren seguir manteniendo esta postura de pertenecer al partido. Es una decisión individual y el que tenga voluntad de militar en el partido deberá mandar su petición con un informe del secretario general del partido. Este será el procedimiento a seguir. Cuando fui elegido por los compañeros y compañeras como secretario general tras la refundación del partido me marqué como objetivo revitalizar el PSOE, tener mejores resultados en las elecciones como ha ocurrido y buscar una solución a este tema de la afiliación. He hablado con el secretario de organización y el punto acordado es que cada una de esas peticiones sean estudiadas por la comisión de la ejecutiva federal”, señaló en rueda de prensa, desvinculándose de la criba socialista que se llevó a cabo en su día, antes de la asamblea del 13-D. Carracao apunta que ya “han existido conversaciones con ex militantes reconociendo que quieren volver. No voy a dar nombres, pues esto es íntimo y no debo hablar sobre la militancia de nadie. Independientemente de la situación podríamos replantearnos esa vuelta al partido, aunque hay personas que por sus propios actos durante estos años seguro que no van a solicitar su vuelta porque se han posicionado en otros proyectos políticos o bien porque no han dejado de criticar. En coherencia por sus propios actos no deberían presentar su solicitud de volver al partido. Quien quiera volver tiene que presentar su afiliación y en función a su comportamiento a lo largo de este tiempo encontrará el respaldo del secretario general y será el partido el que tome la decisión”, aclaró a los periodistas. Así las cosas el futuro de los llamados críticos pasa por un peculiar ejercicio de ‘este es bueno, este es malo’ en un momento en que se reabre el debate, ya perdido en las conciencias de muchos, de abrir las puertas del partido a todos. La asamblea del 13 de diciembre dejó en el camino enfrentamientos claves entre ambos sectores que incluso llegaron al juzgado.