La libre designación del jefe de Policía Local, “la mejor forma”

El Gobierno defiende esta vía como la más adecuada a la hora de que se puedan ordenar destituciones l Hachuel recomienda a UGT que no intente marcar las pautas de control.

Al consejero de Gobierno, Jacob Hachuel, no le gusta en nada el tipo de estrategia aplicada por el sindicato UGT y que ha plasmado en sus últimas notas de prensa críticas con las gestiones llevadas a cabo en el área de Gobernación. Tras aconsejar al sindicato que, si quieren, “pueden ir a los tribunales” a denunciar las supuestas irregularidades que denuncian, Hachuel ha defendido el modo de proceder que se va a seguir a la hora de elegir a quien será el próximo superintendente de la Policía Local. La libre elección de dicho mando es, a juicio del Gobierno, la mejor de las opciones, aunque hasta el momento se había optado por el concurso oposición.
El portavoz del Ejecutivo aclaró que dicho método funciona en otras comunidades autónomas y que, de hecho, es “la mejor manera”  a la hora de controlar que dicho mando cumple correctamente con su trabajo. De optarse por la vía de la oposición “si no estamos satisfechos, es imposible mover” del puesto a dicho mando, aclaró Hachuel; opción que no cabe en las libres designaciones que se agotan en el momento en que el trabajo no se desempeña correctamente.
El portavoz insistió en que la opción de libre designación nada tiene que ver con la “colocación a dedo” denunciada por UGT, ya que “se tiene que cumplir con un perfil muy exigente”, ya que habrá que ser licenciado universitario y tener el nivel A1.
Visiblemente molesto, Hachuel lanzó una advertencia a los ugetistas que ya se había escuchado en anteriores comparecencias oficiales: ellos no van a ser los que marquen las líneas de gobierno. “Es la segunda vez que les digo que cuando hagan una lista, se presenten y ganen las elecciones, sean consejeros, que gobiernen. Mientras tanto, no pueden marcar las pautas de los consejeros”, advirtió.
El Gobierno insiste en que su decisión de elegir al relevo de Ángel Gómez se hará eligiendo al mejor candidato de los que se presente, siendo ésta una decisión que incluso está avalada por los informes jurídicos del propio Gobierno.
Ironizando precisamente sobre el tipo de mandato anterior, Hachuel recordó que habiendo sido Gómez elegido por oposición era duramente criticado por este sindicato precisamente por esto, el mismo que ahora considera que aquel método debiera ser ahora el elegido. “Las cosas no pueden ser blancas y negras a la vez”, advirtió el consejero.
El mismo método de libre designación se seguirá para el jefe de la Policía Local y también del SEIS, pero no, por ejemplo, para el del Parque Móvil. Los primeros, recalcó el portavoz del Ejecutivo, son “colectivos especiales” a cuyos máximos responsables se les exige incluso tener vocación para afrontar unas áreas muy sensibles en las que no existen horarios. “Se podrán presentar todas las personas que cumplan con el perfil. No será elegido a dedo”, aclaró. “Intentamos hacer las cosas con el mejor acierto y razonablemente bien”, concretó.
A las críticas por la selección del futuro jefe del Cuerpo Local se añaden las que también ha vertido UGT por los cascos que debían haber sido entregados hace tiempo a los agentes de la Unidad de Tráfico, lo que ha llevado a algunos policías a negarse a patrullar en moto y hacerlo a pie, algo tildado por Hachuel de “poco ético”.
A este respecto el portavoz del Ejecutivo fue duro al entender que la denuncia firmada por el sindicato venía predeterminada con anterioridad, porque el sindicato ya sabía de la firma de un segundo decreto para facilitar la entrega de los cascos por parte de otra empresa. Hachuel, también consejero de Gobernación, que este problema ha venido motivado por una “cadena” de “mala suerte e inconvenientes”. La empresa que resultó adjudicataria entregó los cascos que recibieron el visto bueno de alguien, sin identificar, de la Policía Local. Después se comprobó que los cascos presentaban deficiencias. Para posibilitar que otra empresa entregara otro lote de cascos distinto había que anular el decreto inicial y hacer un segundo, “algo que en la Administración” no funciona de manera rápida porque hay que cumplir con una serie de procesos “garantistas” que provocaron una  ralentización en el tiempo.
Hace unos días, dijo Hachuel, se llamó a todos los policías de Tráfico para efectuar las medidas ya que se había firmado el segundo decreto. “Esto lo sabía UGT”, explicó molesto Hachuel, considerando que esa denuncia en presta podría estar motivada por el afán del sindicato de, a sabiendas de que los cascos se entregarían en breve, “salir diciendo” que se había conseguido porque “ahora nos hemos puesto las pilas” y “no, no es así”, aclaró.
Los servicios jurídicos de la Ciudad serán los que determinen si cabe adoptar algún tipo de medida con la empresa inicialmente adjudicataria.