Los nacionalismos son epidemias dictatoriales que se incrustan en el organismo de las democracias, el caldo de cultivo para que nazcan generaciones llenas de odio
Aún relativizando la intención verdadera que tuvieran las palabras pronunciadas por el presidente Aznar la semana pasada en la entrevista concedida a Gloria Lomana en Antena 3, en las que dejaba abierta una posibilidad, la de volver, que ni él mismo se cree y estima, pues sabe que su tiempo concluyó, su intervención ha servido para, una vez más y ya van mil y una noches, verificar el calamitoso estado en el que se halla este país, desde las más altas esferas hasta los más viles estratos, pasando por esa clase media baja sumida en un profundo letargo existencial que parece no tener visos de recibir una sacudida a tiempo de sobrevivir.
Fue hablar Aznar y las luces de la verbena se encendieron al instante. Politicuchos nacionalistas, sindicalistas de estómagos saciados a base de jerez y jamón Cinco Jota, dinosaurios que aún permanecen ahí cuando nos despertamos, juventudes comunistas, populares de voz temblorosa, todos, sin excepción alguna, han levantado el dedo amenazador, han calentado el pico y han esquinado al presidente Aznar cual ser vil y bestial del que nada se puede aprender.
El revuelo ocasionado y la tormenta de reacciones no responden a una verdadera preocupación por la hipótesis, deslizada de mentirijilla por el propio Aznar, de que su regreso pudiera sumir al país en un estado de estancamiento, como algunos contrarios a su estilo de hacer política pudieran argumentar; no se debe tampoco a elevar un incondicional apoyo a Rajoy y su obra; ni siquiera se trata de una reacción natural de miedo hacia una vuelta atrás como metáfora de retroceder en el tiempo, maldito tiempo que mata el verdadero progreso, no, no se debe el aluvión de insultos y críticas sin explicación a ninguno de los escenarios dibujados sino que se trata simple y llanamente del triste e infame hecho de que la libertad de opinión se estila hoy en día a cuentagotas y siempre tomada con pinzas.
Sólo desde el axioma (verdadero) que situaría un malestar social porque una persona (Aznar en este caso) hable con total libertad, se puede afirmar sin vacilación alguna (o quién sabe) que nos hallamos dentro de un país en que uno de los principios básicos y capitales que ha de constituir todo Estado de Derecho está bien cercenado, bien ensuciado, bien en estado de putrefacción o bien cortado, manchado y podrido a la misma vez.
En ciertos sectores de la izquierda española sienta mal que opine en libertad un militante de derecha y viceversa; en un pub progre miran mal a quien osa añorar un natural de Chenel; en una tasca franquista se denigra a quien rompa una lanza en favor de la inmigración subsahariana; en el Camp Nou al blanco de la camiseta del Real Madrid le salen rojos lamparones de tomate lanzado como en Buñol por un mero rechazo a lo contrario. Ejemplos que no hacen sino nutrir de argumentos la teoría de que la libertad de opinión, y no digamos de obra, está más que dañada en España, prueba sintomática y explicativa de la animalización que sufre un país devorado por sus propios habitantes.
Semejante caldo de cultivo, la escasez de dinero y la falta de cultura dañan la convivencia de las personas y conforman los escenarios óptimos para que los nacionalismos, epidemias dictatoriales que se incrustan en el organismo de las democracias, nazcan, florezcan entre generaciones cobijadas en el odio y contagien al prójimo ya en la vida adulta.
De ahí que deje de ser una anécdota el hecho de que cada vez que hablen los presidentes Aznar, Zapatero o González en España, de norte a sur, de este a oeste, se monte un guirigay mediático e insensato pues se trata en realidad del peor cariz que puede mostrar la sociedad de un país que presume ser del Primer Mundo pero que va camino de ser una nación en la que apenas brillen las luces de la libertad.
Mañana, día 16 de octubre, la ministra de Vivienda y Agenda Urbana, Isabel Rodríguez, el…
Con motivo de la conmemoración de Santa Teresa, Patrona del Cuerpo de Intendencia del Ejército…
El ciclismo tiene una cita este fin de semana en Ceuta con motivo de la…
La federación de tenis de Ceuta ha convocado, por primera vez en la ciudad, un…
El Centro Universitario UNED Ceuta ha inaugurado este martes las II Jornadas de Criminología desarrolladas…
Entre las tasas más altas de paro en España se registraron lugares como Ceuta (41,8%),…