Comienzo por donde debería finalizar, por llevar la contraria a la lógica que tantos años me llamaba al orden, por lo tanto he de decir y digo, ahora que casi nadie me ve, que el trato entre la Ciudad Autónoma (para mí autóctona por ser algo raro y no una verdadera Autonomía), y Air Nostrum para abaratar el billete en una buen cantidad, me parece positivo para el bolsillo de la ciudadanía melillense, en la que me incluyo, aunque haya sido pensando cada una de las dos partes en la proyección económica por parte de Air Nostrum y en la rentabilidad política para el Gobierno de la Ciudad, el caso es que la baja del precio del billete es grande.
En cambio, las gilitonterías institucionales del ilustrísimo alcalde del excelentísimo Ayuntamiento de Melilla, o sea, también mi Ayuntamiento, o las mismas gilitonterías en el mismo día y a la misma hora de nuestro Excelentísimo presidente de la no menos Excelentísima Ciudad Autónoma, a mí, una vez más, me pone los pelos del entrecejo de punta roma. Mira que decir éste, ése, nuestro alcalde presidente, referente al también excelentísimo delegado del Gobierno de la Nación principal española, la que están en Madrid, aunque él esté aquí, comentando “que está frito llamando a Madrid” por lo de Air Nostrum y, acto seguido, como siempre, con esa humildad que es característica principal de nuestro presidente alcalde senador, “que el gobierno local ha metido un gol por la escuadra”.
En verdad en verdad que con las goleadas después de cada elección en las urnas y ahora lo del gol por la escuadra, y subvencionando como lo hacemos a nuestra Unión Deportiva Melilla, ¿Por qué no lo nombran presidente de la misma? Sólo queda por decirle que si el delegado del Gobierno está frito con las llamadas, lo tendrán metido en la nevera y ya no será el habitante problema para nuestra presidente… Hasta que venga otro, siempre y cuando sea de la misma cuerda, aunque difícil está eso.
Termino por donde debía empezar, por la guardería infantil que el viceconsejero de Medio Ambiente tiene ya diseñada para la célebre lapa, la Patella Ferruginea, al lado mismo de la gran piedra donde está la colonia, y además, una Escuela de vela, otra de esquí, una plaza multifuncional, dos rotondas y un nuevo edificio para turismo; aunque el presidente Zapatero no tiene el horno presidencial como para mandar dinero para la ampliación del puerto, lo que de seguro se da por hecho que la colonia de la Patella Ferruginea votará en las próximas elecciones por el mismo gobierno que gobierna gobernadamente Melilla, sobre todo por la instalación de una guardería infantil municipal, donde ya han solicitado que instale el Gobierno local una hornacina con la foto del viceconsejero que tanto bien hace por ellas.
Por Air Nostrum, por la Ciudad Autóctona y ante todo por nuestra colonia de lapas melillenses, la Patella Ferruginea y la ampliación del puerto, su futuro… ¡Yo también quiero la ampliación del puerto!