La incidencia de la huelga en Ceuta solo se nota en limpieza y transporte

El 29M pasó por Ceuta sin pena ni gloria. La primera huelga general al Gobierno de Mariano Rajoy apenas si tuvo incidencia en Ceuta. Así lo atestigua el hecho de que la ciudad no paró en ningún momento su actividad diaria y que la calle apenas notó el paro convocado por los sindicatos UGT y CCOO, salvo por los piquetes informativos que recorrieron el centro y la zona portuaria, y por el paro generalizado en la construcción, que fue junto al transporte y la limpieza el sector donde la convocatoria alcanzó un seguimiento casi absoluto.
Los servicios municipales abrieron sin excepción y nueve de cada diez empleados públicos acudieron puntualmente a su puesto de trabajo, según los datos globales ofrecidos por y Ciudad Autónoma y la Delegación, que dio como dato global de la incidencia de la jornada de huelga un seguimiento del 10%.
Pero a pesar de la evidencia de que la huelga en Ceuta no ha sido un éxito, ya que los líderes de las dos centrales convocantes han expresado públicamente su preocupación porque el seguimiento fue menor de lo esperado, (entre un 40 y un 50% para el sector privado y el 20% en el sector público), siguió habiendo disparidad de cifras en cuanto a la participación.
En lo que a datos oficiales respecta, la Delegación  consideró a última hora de la tarde que, si bien todos los segmentos de la actividad económica se habían mantenido en Ceuta dentro del percentil considerado ‘nulo’ (De 0 a10% de incidencia), los menos afectados por la huelga han sido los sectores esenciales como la energía, las telecomunicaciones y los medios de comunicación social. De igual modo, se mantuvieron en estos niveles las categorías de Sanidad y Educación, Banca, Taxi o Transporte Aéreo.

Sólo en el ámbito de la Autoridad Portuaria y el transporte marítimo, “damnificado además por las inclemencias meteorológicas”, recuerda el ente gubernativo, se ha llegado al porcentaje de entre el 40 y el 60%, considerado como de impacto ‘medio’, mientras que ha sido en el sector de la recogida de residuos donde más ha incidido la huelga, al superarse el 70% de impacto y alcanzar el parámetro de ‘alto’
Tanto en la Administración General del Estado como en la Ciudad Autónoma, el número de trabajadores que ha secundado la jornada de paro fue muy escaso, cumpliéndose al 100% los servicios mínimos.
El portavoz del Ejecutivo local, Guillermo Martínez, aseguró por la mañana, durante su comparecencia tras el Consejo de Gobierno, que sólo el 2,55% de los trabajadores municipales, funcionarios o laborales se había ausentado ayer de su puesto. No obstante, el porcentaje aumentó por la tarde.
Finalmente, la participación de los trabajadores de la Ciudad Autónoma, de sus sociedades municipales y organismos autónomos y de los servicios dependientes de esta Administración en la huelga general convocada se ha situado finalmente en un 9,8 por ciento, según los datos facilitados por la Dirección General de Recursos Humanos correspondientes al cierre de la jornada. Este grado de participación se ve elevado por la incidencia que el paro ha tenido en servicios como la limpieza y recogida de residuos y el transporte urbano (taxis y autobuses).
Si a estos servicios se le une la totalidad de sociedades municipales y los organismos autónomos y entidades dependientes de esta Administración (incluyendo, por tanto, no solo a empresas públicas, sino también a entidades como la UNED o el Instituto de Idiomas), la incidencia se sitúa en el 16,67 por ciento, mientras que entre los trabajadores de la Ciudad Autónoma la participación cae hasta el 3,45 por ciento.
“Este bajo seguimiento en la huelga general ha permitido que todas las dependencias y servicios de la Ciudad Autónoma funcionen con normalidad”, remarcó en nota de prensa. Por la mañana la incidencia fue del 2,55 por ciento en la Ciudad y del 17,19% en las empresas municipales, organismos autónomos y servicios adscritos, lo que arrojó una participación global del 9,59%, que finalmente se ha elevado dos décimas hasta alcanzar ese 9,8%.
En el ámbito de la Administración General del Estado, el porcentaje de seguimiento de la huelga tampoco llegó al 10%. De 1.900 trabajadores públicos de los servicios no integrados de la AGE, esto es por ejemplo, Ingesa o educación, solo 145 se declararon en huelga. En cuanto a los laborales, de 362, acudieron a la huelga 46 y en los servicios integrados en la Delegación del Gobierno, de un centenar de trabajadores tan solo 2 la secundaron.
Con estas cifras en la mano, la Delegación del Gobierno consideró ayer que el “impacto” de la convocatoria en la ciudad había sido “ninguno”, al situar su seguimiento “por debajo del 10% de los convocados”. Destacó la Delegación que el ambiente reinante ayer en la ciudad fue de “absoluta normalidad”.
En el capítulo de incidencias afirmó el ente gubernativo que las “escasas” que se han producido a primera hora de la mañana no revistieron “mayor entidad” y que la ciudad asistió en la jornada de huelga a una situación “de normalidad generalizada”.
Fuentes de la Guardia Civil informaron a El Faro de que los efectivos desplazados en la zona portuaria tan solo debieron actuar, para controlar el tráfico, a la altura del acceso al supermercado Lidl, donde los piquetes informativos, sin llegar a cortar el tráfico, transitaron de un lado a otro de la avenida Cañonero Dato cruzando en reiteradas ocasiones un paso de peatones.
Igualmente, la Delegación puso de manifiesto que tampoco se produjeron incidentes en la frontera con Marruecos y que el ambiente en la ciudad fue “de plena normalidad” en el ejercicio del derecho constitucional de huelga.
Otro de los elementos considerados relevantes para  medir el impacto del paro lo muestra el consumo de energía eléctrica. En este sentido, la Delegación indicó que,  durante la jornada y hasta las 18.00 horas de ayer en el que la demanda en Ceuta llegó a alcanzar los 25,6 MWH, la misma que se produjo, en el mismo tramo horario, durante el día anterior, si bien es de destacar que en Ceuta, al no contar con un sector industrial potente, este parámetro para medir una jornada de huelga no sería de utilidad.