La enorme presión migratoria, los últimos apuñalamientos a menores y la inseguridad creciente han llevado a que la Benemérita active un dispositivo especial de control en la zona portuaria. Ocho agentes controlarán a diario los accesos y vigilarán el recinto portuario
El puerto se le había ido de las manos a las autoridades. Se contó en múltiples reportajes, se grabó en monográficos emitidos en FAROTV. El último, este mismo sábado, demoledor: con menores drogándose, patrullas de las fuerzas de seguridad correteadas, intento de entrada ‘a las bravas’ en los barcos como sucedió con el buque ‘Transporter’ en la madrugada del viernes... Y a todo esto se le habían sumado episodios delincuenciales que hacían temer lo peor: con dos menores apuñalados en un espacio de 24 horas.
Esta situación de auténtica presión ha llevado a que la Guardia Civil ponga en marcha un dispositivo especial que comenzó el sábado con la batida extraordinaria en las escolleras, en la que se consiguió desmantelar campamentos de marroquíes. Entre los casi 40 localizados había 12 menores, de los que solo 1 era MENA ya que los demás no estaban siquiera tutelados por la Ciudad. Se trataba de niños que recién colados por la frontera se habían asentado ya en zona portuaria. Esta situación de descontrol absoluto ha llevado a que la Guardia Civil haya ‘tomado’ el puerto desplegando de forma permanente a ocho guardias en cinco puntos fijos. Se encargan de controlar el acceso y vigilancia del recinto portuario al objeto de recuperar el terreno perdido para que regrese la normalidad en una zona de la ciudad que estaba completamente abandonada y afectada por repuntes continuados de inseguridad. La incógnita radica en el tiempo en que podrá mantenerse este dispositivo, ya que esas patrullas se han retirado de otros servicios. De momento es prioritario que se recupere ciertos niveles de normalidad en un puerto que estaba tomando un cariz demasiado peligroso.
Por cierto, que el adulto que apuñaló la semana pasada a un menor ha ingresado en prisión después de ser reconocido por éste en una rueda judicial.