La liberalización progresiva del tipo de cambio de la moneda marroquí, el dirham, "está funcionando bien" seis meses después de su puesta en marcha, aseguró hoy el gobernador del banco central Bank al Maghrib (BAM), Abdelatif Juahri.
Marruecos introdujo el pasado enero una mayor flexibilidad en el tipo de cambio del dirham con bandas de fluctuación cuyo valor podrá bajar y subir un máximo de 2,5 % en ambas direcciones, en lugar del 0,3 % anterior.
"Queremos un mercado interbancario de divisas que se desarrolla. Lo estamos consiguiendo, y el mercado interbancario funciona bien", subrayó Juahri en una rueda de prensa posterior a la reunión trimestral de la entidad emisora.
El gobernador del BAM dijo que no se ha producido adquisición de divisas por parte de las entidades ante el banco central, lo que, según él, significa que las reglas del mercado (de oferta y demanda) comienzan a implantarse.
La banda de fluctuación del dirham está situada actualmente en un 0,15 %, indicó Juahri, quien descartó fuertes fluctuaciones de la moneda nacional a corto plazo
El banco central marroquí establece el valor del dirham mediante una cesta compuesta en un 60 % por euros y en un 40 % por dólares, un reparto que refleja la importancia de sus intercambios comerciales internacionales.
Por otra parte, el gobernador habló de la situación de las finanzas islámicas o participativas, como se denominan en Marruecos.
Un total de 71 agencias bancarias que ofrecen productos conformes a la sharia (ley islámica) están operativas en el país un año después del lanzamiento de este tipo de banca en el país.
Juahri destacó que están desplegando esfuerzos para desarrollar este mercado y apuntó, en este sentido, que Marruecos lanzará los primeros sukuk (bonos islámicos conformes a la sharia) a partir del mes de julio con un valor de 1.000 millones de dirhams (90 millones de euros).
Los sukuk son instrumentos de deuda conformes a la ley islámica en la medida en que son bonos que no implican el pago de intereses, sino más bien de un rendimiento o lo equivalente a una renta.
En cuanto a los indicadores macroeconómicos, el banco central prevé un crecimiento de la economía marroquí del 3,6 % en 2018 y un déficit público del 3,4 % este año.
Además, el banco central detectó una aceleración de la inflación que se situará en 2,4 % en 2018, entre otras razones debido al aumento de los precios de productos alimentarios.
No obstante, precisó que la inflación volverá a unos niveles moderados a partir de 2019.