Más de tres cuartas partes de la población española, el 75,3 por ciento, percibe su estado de salud como bueno o muy bueno. Así lo revela la última Encuesta Nacional de Salud 2011-2012, que presentó ayer el Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad y el Instituto Nacional de Estadística -INE-. Se trata del valor más elevado desde que se elabora este estudio y supone un aumento de 5,3 puntos en relación a la última Encuesta, correspondiente a 2006-2007, comunicó el Ejecutivo central.
La Encuesta revela también un descenso en el uso de la mayoría de los servicios de salud. En este sentido, cambia la tendencia creciente registrada hasta 2003 para consultas y hospitalización y hasta 2006 para la atención urgente. El 82,3 por ciento de la población declara haber consultado al médico en el último año, mientras que el 28,3 por ciento ha acudido a los servicios de urgencias y el 7,9 por ciento ha estado ingresado. El único servicio cuyo uso aumenta es el hospital de día, pasando de un 6,3 por ciento hace cinco años a un 6,9 por ciento. La explicación es que “han aumentado los procesos clínicos que, si bien hace años exigían hospitalización, hoy se realizan de manera ambulatoria”.
Al mismo tiempo que se produjo este descenso, ha bajado también la percepción de “inaccesibilidad” a la asistencia médica: sólo un 2,2 por ciento de las mujeres y un 1,8 por ciento de los hombres han declarado que han necesitado asistencia y no han podido acceder a ella.