La ciudad tiene más trampas que Daniel Boone

Daniel Boone fue uno de esos colonizadores de Estados Unidos que fueron abriendo caminos y comiéndole terreno a los indígenas americanos, no se si porque ponía trampas contra sus supuestos enemigos o porque motivo desde siempre he escuchado esa frase “tiene más trampas que Daniel Boone” y en ocasiones, imagino que por una ‘mutación’ del lenguaje o por darle otra connotación al significado de la palabra, he escuchado aquello de “está más endeudado que Daniel Boone”
Sea de una forma o de otra el Ayuntamiento de nuestra ciudad tiene más trampas o está más endeudado que Daniel Boone.  En 3 años ha pasado de deber a los bancos 77 millones de euros (31-12-2008) a 201 millones de euros (31-12-2010), más del doble que la Ciudad hermana de Melilla. Esa deuda, la más grande de la historia democrática de nuestra ciudad, supone más de 2.500 euros por habitante, pero la deuda no está completa, falta por saber lo que se le debe a proveedores, probablemente esa cantidad este entre los 30 y los 50 millones de euros.
Además de vergonzosa, esa cantidad es insultante, y difícil de asumir puesto que supone el 80% del presupuesto total de la Ciudad para 2011, y la práctica de este gobierno es seguir y seguir pidiendo créditos, por tanto aumentando la deuda. ¿cuánto pueden estirar el endeudamiento de este pueblo en los próximos 4 años? NI ellos lo saben. He leído en algún medio que fuentes autorizadas del Gobierno decían que en esos 201 millones se encontraban incluidos el método Alemán del Plan Aparca y del Campus. Eso es falso. Verán esos 201 millones de euros que debe la Ciudad a los bancos, por tanto usted, yo y todos los ciudadanos de Ceuta es una cifra ofrecida por el Banco de España y son deudas de créditos concedidos a la Ciudad por las distintas entidades bancarias, con estas cifras sólo los intereses de los préstamos nos salen a todos los ceutíes por encima de los 6 millones de euros anuales, vergonzoso.
El método Alemán, al que algunos nos opusimos abiertamente en su momento (algún que otro escrito dedique al tema) es un ‘engañabobos’ que hace que la inversión financiada de esa forma eleve considerablemente el valor.  Pondré un ejemplo con cifras más o menos redondas para que quede claro. En ese sistema el que paga la obra es la empresa que la construye mediante un crédito. Si construir x plazas de garaje cuestan 100 millones de euros, la constructora pide un crédito por ese valor, pongamos que al final la empresa tenga que pagar 105 millones al banco al incluir los intereses.
La constructora, como empresa privada que es, tiene que obtener beneficios, pongamos que el 20% que suele ser lo habitual, al final  126 millones de euros. La administración en este caso el Ayuntamiento, no empieza a pagar la obra hasta recepcionarla (hasta que está terminada y pasa a ser de su propiedad) y tiene un plazo de tiempo para ir pagándosela a la constructora. Si el método alemán se incluyese en las deudas bancarias sería que se estaría pidiendo un crédito para pagar esa obra, en el computo total se pagaría con intereses incluidos 133 millones de euros por una obra que costaba 100 o 120 si incluimos el beneficio de la constructora. El método Alemán provoca poder realizar obras sin saber si se es capaz de pagarlas, y al final se pagan muy por encima del precio que se pagaría si la construyera uno mismo, es un método que se puede utilizar de forma muy pero que muy excepcional y que el Gobierno de Ceuta está utilizando de forma habitual, lo que a mi parecer es una auténtica negligencia por las consecuencias que puede traer a medio y largo plazo. Es una actuación negligente porque algunos avisamos de las consecuencias y  por tanto las sabían, pero repito, esas consecuencias todavía no están cuantificadas en la deuda actual.
En el caso del Plan Aparca, finalizado hace unos meses, es imposible que ninguna deuda de esa inversión este contemplada en los 201 millones de deudas a bancos porque esos datos son de 31 de diciembre de 2010 y en ese momento y utilizando el método Alemán el que debe dinero al banco es el constructor, tal y como también ocurre con la construcción del Campus Universitario.
De seguir la deriva económica del ayuntamiento en una clara y nefasta gestión del dinero público, si podría ocurrir que en próximos años la Ciudad necesite solicitar más créditos para pagar las inversiones que se han hecho con el método Alemán, terminando por pagar las obras bastante más por encima del coste real, debido a los intereses bancarios y aumentando la deuda de la Ciudad, dejando esos 201 millones como una cifra irrisoria. Y todo esto pese a que en los últimos años el Gobierno de Ceuta ha protagonizado el mayor aumento fiscal de la historia democrática.
Pero eso si… y lo bonita que está Ceuta.