La Ciudad “respalda” las gestiones realizadas por Zapatero con Marruecos

La Ciudad se posicionó ayer públicamente en torno al conflicto sufrido con Marruecos recalcando el “total apoyo y respaldo” que se da a “todas las acciones emprendidas y a todo lo realizado por el Gobierno de la Nación, el Ministerio de Asuntos Exteriores, la vía diplomática y el Rey”.

Así lo explicó, a preguntas de los periodistas, la portavoz del Ejecutivo, Yolanda Bel, que, al término del Consejo de Gobierno avanzó que “nuestra postura ha sido clara desde el principio porque entendemos que en este caso la mejor posición es la colaboración”. Bel insistió en que “todos los españoles, pero especialmente los ceutíes y los melillenses, lo que siempre hemos querido es unas muy buenas relaciones con Marruecos”. Por otro lado y a través de un comunicado de prensa la Agencia para el Desarrollo Económico y Social de Ceuta (ADESC) aseguró que las autoridades marroquíes le han trasladado en los contactos establecidos “a fin de que se restablezca el buen clima de vecindad” un “moderado optimismo en referencia a la escasa repercusión que el activismo que se produce en el paso fronterizo de Melilla pueda tener en la frontera ceutí del Tarajal”. ADESC ha pedido “un esfuerzo” a ambos países para que “puedan encauzarse vías de colaboración que redunden en beneficio de los ciudadanos ceutíes, melillenses y marroquíes. La actual situación geográfica de ambas ciudades debe ser una ventaja y no un punto de desencuentro dentro de las fluidas relaciones entre España y Marruecos”, reclamó.
Por su parte y siguiendo la escalada de reacciones que se están suscitando tras este nuevo conflicto diplomático, la portavoz de UPyD en el Congreso, Rosa Díez, ha exigido al Gobierno que defienda ante Marruecos la profesionalidad de los agentes policiales que trabajan en la frontera de Melilla, así como la “españolidad” de esta ciudad autónoma y de Ceuta, ante la “escalada de tensión” que está impulsando el país vecino y que incluye, asegura, “actos de hostilidad contra la soberanía nacional”. Díez acusó al Ejecutivo socialista de “seguidismo ante la prepotencia del Gobierno de Mohamed VI” y le exigió una nueva política “con carácter de urgencia”, tal y como recoge la agencia Europa Press. UPyD, que anuncia una iniciativa parlamentaria con varias propuestas, exige una protesta verbal de Exteriores ante Marruecos, así como que el Gobierno inste a la Unión Europea a congelar el Estatuto Avanzado Marruecos-UE “en tanto no cese la hostilidad del Gobierno de Rabat”. Además, quiere que se plantee la exclusión de las aguas territoriales del Sáhara Occidental del ámbito de aplicación de la futura renovación del Acuerdo Pesquero Marruecos-UE.
Por último, la formación que lidera Díez exige que se intensifiquen los controles policiales en los pasos fronterizos con Marruecos para evitar la posible entrada en España de “activistas marroquíes que pretendan llevar a cabo en territorio nacional acciones en contra de la soberanía española”.

Reacciones:

AUGC, más medios
El Secretario General de la Asociación Unificada de la Guardia Civil (AUGC), Alberto Moya, ha pedido al Gobierno "firmeza" para defender el trabajo de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado en la frontera marroquí, y respaldo con "más medios y más personal", así como "contra las actitudes machistas". Moya ha asegurado que "para este tipo de sensibilidades en Marruecos, van a lo más débil. Para ellos una mujer policía es algo débil y la están atacando. Nosotros tenemos que ser mucho más firmes y rechazar estas posturas", ha añadido. El representante de la AUGC ha denunciado igualmente que los medios y el personal desplegados en la frontera "no son suficientes" y ha pedido al Gobierno un mayor respaldo en este sentido.
Bono y la presión
Por su parte el presidente del Congreso, José Bono, ha dicho que no tiene "la más mínima duda" de que el Gobierno está haciendo "lo que se debe hacer" en los incidentes en la frontera de Melilla y las críticas a Ceuta y ha señalado que "la presión" contra un territorio soberano no debe prosperar "de ningún modo". Según el presidente del Congreso, no debe sorprender a nadie que un territorio español y unas plazas de soberanía como son Ceuta y Melilla "sean defendidas como podrían serlo Valencia o Bilbao", enfatizó.