Román llevará a Pleno la próxima semana la nueva Tasa para paliar los sobrecostes que genera el Tarajal. La consejera de Economía, Hacienda y Administración Pública del Gobierno de Ceuta, Susana Román, someterá a la consideración del Pleno la próxima semana la creación de una Tasa por la prestación del servicio de racionalización, ordenación, control del transporte continuado de determinadas mercancías y gestión de ciertos plásticos que conllevará la obligación de pagar 15 céntimos por cada kilogramo de "prendas y complementos de vestir y sus partes, mantas, ropa de cama, mesa, tocador o cocina, artículos de tapicerías, calzado, sombreros y demás tocados" que entren en la ciudad empacados en fardos o similares.
Con la tasa a imponer sobre la prendería que termina en el Tarajal y, posteriormente, en el país vecino, el Gobierno de Vivas pretende "financiar parcialmente" la prestación de servicios "de diversa índole" que lleva aparejado "el transporte de determinadas mercancías en régimen de viajeros a través de los espacios aledaños a la frontera con el Reino de Marruecos".
El encaje legal de la Tasa se encuentra, según el informe técnico que respaldará la propuesta de la consejera, que hoy pasa por Comisión Informativa, en el artículo 39 del Estatuto de Autonomía ('Se regularán necesariamente mediante acuerdo plenario de la Asamblea, el establecimiento, modificación, supresión y ordenación de los tributos y de las exenciones y bonificaciones que les afecten') y en el Texto Refundido de la Ley Reguladora de las Haciendas Locales.
Vivas ya anunció a finales del mes pasado que trabajaba en modificaciones normativas para que los bultos o fardos "de determinado tamaño" pasasen a tener la consideración de "expediciones comerciales" a efectos de la aplicación de la normativa fiscal y consiguiente intervención de los Servicios de Inspección, así como en la elaboración de un censo de motocarros por ser una actividad vinculada a la del fardo.
Las autoridades calculaban hace un año que cada doce meses llegan a Ceuta al menos 10.000 toneladas de ropa con destino a Marruecos.
Por otro lado, en la misma norma se gravará la prestación del servicio de gestión como residuo de bolsas de plástico no desechables y no biodegradables a razón de 2,5 euros por kilogramo este año y el próximo, cuatro euros en 2018 y cinco el ejercicio siguiente.
En este caso la misma se justifica la que la Ciudad "se ha visto compelida a prestar servicios y realizar actividades conducentes a mitigar los impactos ambientales negativos asociados al empleo de bolsas de plástico de un solo uso no biodegradables, actividad que habilita su inclusión en el marco de la Tasa como actividad y servicio propios de ésta". Una Directiva europea exige la adopción de medidas que garanticen que el nivel de consumo anual no supere las 90 bolsas de plástico ligeras por persona a más tardar el 31 de diciembre de 2OL9 y 40 en la misma fecha de 2025.
LOS NÚMEROS PrenderíaHecho imponible. Se gravará “la prestación del servicio consistente en la ordenación, verificación y control del volumen, cantidad y/o peso” de “prendas y complementos de vestir y sus partes, mantas, ropa de cama, mesa, tocador o cocina, artículos de tapicerías, calzado, sombreros y demás tocados, que cumplan alguna de las condiciones siguientes: tener señales apreciables de uso o presentarse a granel, balas, sacos, bolsas, fardos o acondicionamientos similares”.
SujetoPasivo. Tendrá la consideración de sujeto pasivo de esta Tasa, que no contempla ninguna exención, “el importador o productor de las citadas mercancías”.
DevengoImportación o producción. Se devenga la Tasa y nacerá “la obligación de contribuir” cuando se realicen las operaciones de importación o producción de los repetidos bienes en la ciudad autónoma.