La Ciudad analizará y atenderá, “dentro de las posibilidades presupuestarias”, las peticiones del Servicio de Extinción de Incendios y Salvamento (SEIS) para renovar equipos y dotarse de nuevo material. El portavoz del Ejecutivo, Emilio Carreira, respondía así ayer a las críticas de la Federación de Servicios Públicos de UGT, que el día 30
denunciaba que los recortes impuestos “están llevando al Parque de Bomberos a sufrir disfunciones que ponen en grave riesgo la integridad y seguridad de sus funcionarios”. El sindicato citaba casos de “camiones averiados durante meses esperando consignación presupuestaria” o “botellas de aire comprimido sin pasar la revisión legal preceptiva”.
Carreira no dudó de la base de las protestas, ya que “son los profesionales los que entienden de estas cosas”, pero recordó que las dificultades económicas derivadas de la crisis obligaron a ajustar al máximo los Presupuestos de la Ciudad y a reducir, por tanto, el crecimiento del gasto corriente a niveles “casi planos”.