La Ciudad dará de comer y merendar a mil niños en 7 colegios todo el verano

Aunque llegó un momento en el que pareció “imposible” organizar la logística necesaria, finalmente será realidad: la Ciudad Autónoma mantendrá abiertos desde  la próxima semana y hasta el 30 de septiembre los comedores escolares de siete centros educativos para garantizar que hasta un millar de niños con escasos recursos

reciban un almuerzo y una merienda en condiciones. El proyecto se completará con actividades extraescolares en horario matutino para no “estigmatizar” a los beneficiarios del programa y para ofrecer una alternativa de ocio formativo al resto del alumnado.
Tras “semanas” trabajando en la idea, después de haberla casi desechado hasta el próximo año académico por la magnitud del reto logístico y económico, el Consejo de Gobierno de Ceuta que preside Juan Vivas aprobó ayer definitivamente en una reunión extraordinaria el plan que facilitará la apertura durante todo el verano de los CEIP ‘Federico García Lorca’, ‘Ortega y Gasset’, ‘Andrés Manjón’, ‘Príncipe Felipe’, ‘Reina Sofía’, ‘Pablo Ruiz Picasso’ y ‘Ramón y Cajal’.
Las consejeras de Educación y Asuntos Sociales, Mabel Deu y Rabea Mohamed, comparecieron ayer a última hora de la mañana, recién cerrados los últimos flecos con Ministerio de Educación y sindicatos, para concretar que el coste del programa ascenderá a 540.000 euros (cerca de 300.000 en sueldos, el resto en alimentos y otro gastos) que serán financiados en parte con fondos propios y en parte con los 1,3 millones que se recibirán del Estado como aportación del Fondo especial de Atención a la Pobreza Infantil.
La Administración local prevé disponer de las “6 ó 7 personas” de su bolsa de trabajo de cocineros y llegar a 21 profesionales de restauración ofreciendo al personal fijo-discontinuo del Ministerio de Educación que trabaja en las cocinas de los siete colegios afectados (“los que mejor conocen los menús y las características del alumnado, que nos consta que está muy contento con su servicio”) prorrogar sus contratos, que expiraron anteayer, desde la semana que viene hasta el 30 de septiembre.
Además, la Consejería de Educación pondrá en marcha actividades extraescolares relacionadas con Informática y Biblioteca en esos mismos centros para que todo su alumnado pueda participar en ellas durante el periodo vacacional y contribuir, de paso, a no “estigmatizar” a los estudiantes que sean beneficiarios del servicio de comedor escolar, que podrán almorzar en los siete colegios y llevarse una merienda a casa.
Deu y Mohamed explicaron que en una primera fase se atenderá a los niños que ya han venido comiendo en los colegios durante el curso. Posteriormente la asistencia se ampliará a sus compañeros de colegio que los trabajadores sociales hayan identificado como más necesitados y después a alumnos de otros centros que sean derivados por la misma razón. Lo que no se hará es “mezclar” a adultos en situación o riesgo de pobreza o exclusión social con los escolares. Para los primeros se reforzarán los programas de entrega de tarjetas-vale y el resto de ayudas sociales que la Consejería de Asuntos Sociales ya ofrece. Ambas políticas agradecieron a Cruz Roja y a Cruz Blanca, en las que en principio se pensó para montar un servicio de cátering, su disposición a involucrarse, y al Ministerio de Educación y a las centrales sindicales su complicidad para hacer realidad “una aspiración unánime de toda la Asamblea y creemos que de toda la ciudadanía de Ceuta”.

Deu espera contar con al menos seis trabajadores en cada centro

El programa de apertura de comedores escolares durante el verano prevé contar con al menos seis trabajadores en cada uno de los siete colegios implicados de forma permanente, coordinadores de los servicios de alimentación y de actividades extraescolares incluidos. Para las cocinas se recurrirá a la bolsa de trabajo de la Ciudad, que aportará un tercio de los 21 profesionales que se estiman necesarios, y se ofrecerán contratos a los trabajadores fijos-discontinuos del Ministerio de Educación que se ocupan de esa labor durante el año escolar. Además, se contará también con aquellos de los 84 trabajadores del Convenio MECyD-Ciudad, que irían al paro temporalmente desde mediados de julio, la misma alternativa. La Consejería de Educación espera conocer durante los próximos días a cuántos empleados de este colectivo les interesaría la oferta para organizar los turnos de forma que todos ellos se puedan repartir las horas de trabajo disponibles, que serían en horario matutino y hasta el próximo 30 de septiembre, según avanzaron las consejeras en rueda de prensa.

La ayuda pública básica llega, directa o indirectamente, a unos 7.000 ceutíes

La red social de la Administración social sostiene cada vez a más ceutíes con problemas debido a la crisis económica, a la falta de oportunidades de empleo... Según los datos aportados ayer por la consejera de Asuntos Sociales en rueda de prensa, actualmente con fondos municipales se cubren carencias alimenticias y de otros suministros básicos de aproximadamente 7.000 ceutíes.  
El Gobierno de Ceuta ya atiende directamente a más de 330 familias (unas 1.300 personas) que reciben alimentos o vales-tarjetas para adquirirlos en los supermercados. En colaboración con otras oenegés como Cruz Roja (otras 350 familias al mes), Cruz Blanca (397 más) y Cáritas (839). En paralelo, al Ingreso Mínimo de Inserción Social (IMIS) se destinan 400.000 euros y al programa de ayudas al alquiler para familias en riesgo de exclusión, 1,4 millones.
Con números actualizados a fecha 6 de junio, el viernes de la semana pasada, Asuntos Sociales facilita alimentos a 330 familias de la ciudad autónoma, el equivalente a 1.300 personas y 620 menores de edad. Más de 200 familias reciben atención para niños con hasta 3 años.
Con Cruz Roja, a la que se destinan este año 200.000 euros para este mismo servicio, se cubren las necesidades de 350 unidades familiares al mes y se distribuyen tarjetas para la adquisición de comida (su importe varía en función del número de integrantes de cada unidad familiar) que benefician a 250 niños.
Cruz Blanca también asiste, por su lado, a “más de 397 familias, unas 1.450 personas en total, casi 400 de ellas con menos de 18 años”.
Finalmente, Cáritas Diocesana, con la que en breve se firmará un convenio desde la Administración local por 170.000 euros anuales, ayuda a 839 familias, casi 4.000 personas, 819 menores y 175 lactantes.
El Gobierno de Ceuta aprobó en febrero un convenio con los Hermanos Franciscanos de la Cruz Blanca para contribuir con 145.000 euros a la puesta en marcha del Economato Social del Príncipe, que ha recibido 850.000 euros del Estado.
Con esta partida las aportaciones de la administración a distintas organizaciones no gubernamentales para facilitar comida a las familias más necesitadas de Ceuta rozarán los 700.000 euros este año: Cruz Roja (200.000 euros), Cruz Blanca (150.000), Cáritas (170.000), Luna Blanca (50.000) y el Banco de Alimentos (30.000).

Sanidad renueva el acuerdo con Cruz Roja para que sigan operando UTIME y ‘RULE’

El Consejo de Gobierno dio ayer luz verde a la renovación del convenio que mantiene con la Cruz Roja para el desarrollo de varios programas de prevención del consumo de drogas y la promoción de hábitos de vida saludables como la Unidad de Tratamiento Itinerante de Metadona (UTIME) o la unidad móvil ‘RULE’. En total, estos proyectos mantienen diez empleos.
La segunda materializa un programa que favorece la estrategia de acercabilidad de los recursos del Plan Sobre Drogas y el Plan Sobre Drogas SIDA de la Consejería de Sanidad y Consumo a nivel comunitario a colectivos que por las características de consumo, edad, horario de reunión, etcétera, les impide o dificultan el acceso a la red de dispositivos fijos.
En concreto la RULE realizó cerca de 2.200 asistencias durante al año pasado en sus servicios, viernes y sábados por la  noche, en zonas de ocio juvenil como la Plaza de África y el entorno del Poblado Marinero.
La UTIME, por otro lado, es un recurso itinerante enmarcado dentro del programa de reducción de daños y riesgos asociados al consumo de drogas que comenzó a funcionar en enero de 2003. Consiste en una furgoneta equipada de personal especializado en drogodependencias y del material técnico específico que trabaja los 365 días del año  y que durante el ejercicio pasado realizó casi 20.000 atenciones en diferente puntos de la ciudad.