La celebración del Día de Ceuta queda relegada al acto institucional

Ceuta celebró ayer el Día de la Autonomía, por cuarto año consecutivo, sin ser festivo. Una circunstancia que ha relegado la celebración a un  simple acto institucional, que, como en las últimas ediciones, se celebró en el Auditorio del Revellín , donde se dieron cita los representantes institucionales, parlamentarios, comunidades religiosas o del movimiento vecinal, para asistir a la imposición de las Medallas de Oro a los hermanos Olivencia y la de la Autonomía, al CERMI.

La entrada al acto era libre, aunque no llegó a completarse el aforo del teatro.
Pero  también en el acto hubo notables ausencias, entre ellas, la de Caballas, cuya postura había sido ya anticipada públicamente por los diputados de la coalición, y también la de los tres diputados del Movimiento por la Dignidad y la Ciudadanía (MDyC), que sin aludir ni excusar  directamente su falta de participación en la celebración, también  dejó entrever desde las redes sociales que le parecía una celebración “elitista” y de  discursos “con  palabras vacías de autocomplacencia”.
Esta actitud no la secundaron los otros dos grupos políticos de la oposición, ya que en el acto hubo presencia tanto del PSOE como de Ciudadanos. En el caso de los socialistas, sí quedó patente de nuevo el distanciamiento en el seno del grupo parlamentario, tras conocerse la renuncia de la vicepresidenta segunda de la Asamblea, Mayda Daoud, a continuar en la Ejecutiva de Manuel Hernández Peinado.
Destacó además la presencia en el auditorio de numerosos usuarios del centro de día y personal de la Fundación Eduardo Gallardo Salguero, que fue la entidad que propuso la Medalla de Oro para Francisco y Manuel Olivencia.

Desarrollo del acto
El acto se inició, puntual, a las 20.30 horas, para concluir hora y media después. En esta ocasión se contó con  la actuación de la Masa Coral Andrés del Río, que interpretó al comenzar una pieza del musical ‘El Mago de Oz’ y ‘Reloj no marques las horas’, de Los Panchos.
Los homenajeados, Manuel y Francisco Olivencia y Mercedes Medina, en representación del CERMI como su vicepresidenta, se ubicaron en uno de los laterales del escenario, en el que tan solo se encontraba además la mesa presidencial,  flanqueada por policías locales de gala, con el presidente Vivas y el secretario accidental de la Ciudad, Manuel Verdejo, que fue el encargado de dar lectura a las actas plenarias por las que se concedieron las distinciones.
El acto, sencillo en su organización pero largo en su recorrido, terminó al filo de las 22.00 horas cuando la masa coral entonó el himno de Ceuta y tras concluir los  discursos de los homanejados, muy emocionados los de los hermanos Olivencia, y con un marcado carácter reinvindicativo en el caso de la vicepresidenta del CERMI, así como del presidente de la Ciudad. En su exposición Vivas, que abordó desde la inmigración hasta el desafío independentista, tampoco quiso olvidarse de uno de los ausentes, el yerno de Manuel Olivencia, el senador y dirigente del Partido Populas y ex ministro Javier Arenas, ausente del acto en Ceuta, pero al que le dedicó una mención especial por ser un “servidor público ejemplar, un buen amigo de Ceuta y un patriota de cuerpo entero”.

Un 2 de septiembre que ha pasado desapercibido

Lo cierto es que el 2 de septiembre es una fecha que ha pasado de nuevo sin pena ni gloria en Ceuta. Ha pasado completamente desapercibida para una gran parte de los ceutíes, que apenas si puede responder si quiera por qué la fecha, en la que que el gobernador portugués Pedro de Meneses tomó el mando de Ceuta, fue elegida para conmemorar el hecho autonomómico. Salvo en las redes sociales de Facebook y Twitter, poco más. Allí en el ciberespacio se sucedían los memes en torno a la celebración del Día de la Autonomía, criticada por los internautas porque perdió su carácter festivo y porque no se celebra ni se involucra más a la sociedad. Unos a otros se felicitaban al tiempo que lamentaban que sea el único territorio en el que su día no es festivo para todos. Pero lo que si es cierto es que se palpa un cambio. Desde los grupos de la oposición se ha reclamado con insistencia un cambio en la manera de conmemorar una fecha que incluso ya está puesta en entredicho por Caballas.
La celebración del Día de Ceuta es ya meramente institucional porque en esta ocasión ni siquiera se ha elaborado un programa de actividades complementarias con motivo del 2 de septiembre.