Andoni Goikoetxea había citado a su equipo a las 10:30 horas para volver al trabajo después de varias días de vacaciones, con motivo de las fiestas navideñas Y con puntualidad se inició la sesión con la vista puesta en el primer encuentro del año, que le enfrentará al San Roque.
Antes de comenzar a entrenar, el técnico vasco tuvo una charla con sus jugadores de unos diez minutos donde les intentó hablar tras las vacaciones y corregir errores del anterior partido.
Tras esto, los jugadores tuvieron que ponerse el ‘mono de trabajo’ ya que la sesión iba a ser fuerte, tras unos días diez de descanso después de disputar el choque ante el Melilla.
El técnico dio primeramente un calentamiento libre de unos cinco o diez minutos, donde los jugadores comenzaron a estirar sus músculos y articulaciones. Para terminar se realizaron unos sprints de velocidad, con lo que prácticamente estaba terminando el calentamiento.
Una vez finalizado el mismo se procedió al posterior ejercicio. Los jugadores se repartieron en tres grupos donde formaron rondos con dos futbolistas en el medio que intentaban quitar la pelota. Lo más destacado de esto fue la intensidad con la que se vio a cada jugador, también motivada por el seguimiento contínuo del técnico Andoni Goikoetxea.
La sesión continuaba y ahora el entrenador preparó en mitad de campo ejercicios de muchos toques, donde un equipo intentaba robar la pelota mientras el resto la tocaban en corto y también en balones en largo. De nuevo, la intensidad se dejaba ver en cada balón suelto.
El técnico veía el cansancio deAndoni Goikoetxea había citado a su equipo a las 10:30 horas para volver al trabajo después de varias días de vacaciones, con motivo de las fiestas navideñas. Y con puntualidad se inició la sesión con la vista puesta en el primer encuentro del año, que le enfrentará al San Roque.
Antes de comenzar a entrenar, el técnico vasco tuvo una charla con sus jugadores de unos diez minutos donde les intentó hablar tras las vacaciones y corregir errores del anterior partido.
Tras esto, los jugadores tuvieron que ponerse el ‘mono de trabajo’ ya que la sesión iba a ser fuerte, tras unos días diez de descanso después de disputar el choque ante el Melilla.
El técnico dio primeramente un calentamiento libre de unos cinco o diez minutos, donde los jugadores comenzaron a estirar sus músculos y articulaciones. Para terminar se realizaron unos sprints de velocidad, con lo que prácticamente estaba terminando el calentamiento.
Una vez finalizado el mismo se procedió al posterior ejercicio. Los jugadores se repartieron en tres grupos donde formaron rondos con dos futbolistas en el medio que intentaban quitar la pelota. Lo más destacado de esto fue la intensidad con la que se vio a cada jugador, también motivada por el seguimiento contínuo del técnico Andoni Goikoetxea.
La sesión continuaba y ahora el entrenador preparó en mitad de campo ejercicios de muchos toques, donde un equipo intentaba robar la pelota mientras el resto la tocaban en corto y también en balones en largo. De nuevo, la intensidad se dejaba ver en cada balón suelto.
El técnico veía el cansancio deAndoni Goikoetxea había citado a su equipo a las 10:30 horas para volver al trabajo después de varias días de vacaciones, con motivo de las fiestas navideñas. Y con puntualidad se inició la sesión con la vista puesta en el primer encuentro del año, que le enfrentará al San Roque.
Antes de comenzar a entrenar, el técnico vasco tuvo una charla con sus jugadores de unos diez minutos donde les intentó hablar tras las vacaciones y corregir errores del anterior partido.
Tras esto, los jugadores tuvieron que ponerse el ‘mono de trabajo’ ya que la sesión iba a ser fuerte, tras unos días diez de descanso después de disputar el choque ante el Melilla.
El técnico dio primeramente un calentamiento libre de unos cinco o diez minutos, donde los jugadores comenzaron a estirar sus músculos y articulaciones. Para terminar se realizaron unos sprints de velocidad, con lo que prácticamente estaba terminando el calentamiento.
Una vez finalizado el mismo se procedió al posterior ejercicio. Los jugadores se repartieron en tres grupos donde formaron rondos con dos futbolistas en el medio que intentaban quitar la pelota. Lo más destacado de esto fue la intensidad con la que se vio a cada jugador, también motivada por el seguimiento contínuo del técnico Andoni Goikoetxea.
La sesión continuaba y ahora el entrenador preparó en mitad de campo ejercicios de muchos toques, donde un equipo intentaba robar la pelota mientras el resto la tocaban en corto y también en balones en largo. De nuevo, la intensidad se dejaba ver en cada balón suelto.
El técnico veía el cansancio de los jugadores y en cada finalización de ejercicio les daba tiempo para hidratarse.
Posteriormente, partió al bloque en defensa y en ataque donde se intentó mostrar la manera de mejorar el fuera de juego y en el otro lado, centros y remates con finalización. La sesión terminó con varios partidillos.