La
Junta de Personal Docente No Universitario de Ceuta que preside el ugetista Francisco Lobato y que integran UGT-SP, FECCOO, CSIF y ANPE esgrimirá hoy viernes las firmas que ha reunido en menos de un mes de más de mil docentes de la ciudad ante
la directora general de Planificación y Gestión Educativa del Ministerio de Educación, María del Ángel Muñoz, para advertir al
MEFP que la parte nuclear de sus reivindicaciones no debe ser objeto de negociación, sino de “exigencia”, y que para hacerlo los sindicatos tienen el respaldo de la inmensa mayoría de los maestros y profesores de la ciudad.
Se trata, según recuerda Lobato, de la reducción de la jornada lectiva semanal de los docentes a 23 y 18 horas para maestros y
profesores que se recomienda encarecidamente a todas las administraciones y muchas autonomías ya aplican, de disponer de los recursos humanos necesarios para atender al alumnado con necesidades especiales o de la construcción de nuevos centros, definitivamente encallada tras quedar desierto
el concurso para el proyecto del Brull.
“Hablamos de problemas conocidos y que ya están consolidados en la legislación que incumple el ministerio, tal y como expusimos en la última reunión del Grupo de Trabajo de Ceuta y
Melilla”, resume el presidente del órgano de representación.
Hay reivindicaciones sindicales que se exigen para ayer y otras a negociar
En un segundo escalón se encuentran puntos que sí precisan de conversaciones entre el MEFP y la parte social: actualización de retribuciones y pluses (por ejemplo se aspira a actualizar complementos específicos y elevar la cuantía de los sexenios), medidas para mejorar la calidad educativa, renovación de los reglamentos obsoletos...
“No es comprensible que para sustituir al personal laboral siga habiendo que esperar tres o cuatro meses y que para justificarlo se alegue que es responsabilidad del departamento de Función Pública, pues ambos forman parte del mismo gobierno”, ejemplifica Lobato, que también espera que Muñoz aclare si el Ministerio de Educación piensa recortar el cupo local prescindiendo de los más de cincuenta profesores incorporados con financiación europea.
Además, los sindicatos pondrán de nuevo sobre la mesa la necesidad de aprobar una RPT para la Dirección Provincial “en condiciones”. “No es admisible”, estima Lobato, “que los problemas se sigan salvando a costa del sobreesfuerzo de los trabajadores existentes y que no se hayan repetido conflictos con el pago de las nóminas por esa razón”.