El pasado sábado la playa de la Ribera, en Ceuta, acogió la XI edición de la ‘Vuelta al Hacho’. En esta prueba, puntuable para la Copa de España, participaron más de un centenar de nadadores.
Entre todos los participantes, había nombres bastante reconocidos en el mundo de la natación en aguas abiertas. Uno de ellos fue el nadador malagueño Javier Mérida.
Este nadador ha estado toda su vida relacionado con el deporte e incluso “sigo trabajando para el deporte”. Pero hace alrededor de quince años un accidente le cambio su vida por completo. Aún así “apoyándome en la familia, en los amigos y en el deporte convertí algo malo, como puede ser tener un accidente y perder la pierna, en algo bueno”. Desde ese momento para Javier fue una nueva forma de vida y “una forma de disfrutar el deporte”.
Cada año hasta Ceuta se desplazan deportistas desde diferentes puntos de la geografía española para realizar esta travesía. En el caso de Javier, fue su amistad con el Club Natación Caballa y con José Ismael Rodríguez, presidente de la Asociación de Natación en Aguas Abiertas, lo que impulsó al malagueño a acudir hasta Ceuta para realizar esta prueba, considerada como una de las más duras del calendario.
Para el nadador este fue “mi tercer año haciéndola” y sin duda “fue el más duro con diferencia. Fue increíble”.
Javier ya es todo un experimentado con esta prueba , pues dentro de las tres ocasiones que ha acudido a la ciudad ha realizado “dos veces las Vuelta al Hacho y una vez dimos la vuelta al Hacho y luego fuimos hasta la frontera en una travesía de 16 kilómetros”.
"De la travesía me gusta lo dura que es. Tiene algunos puntos en los que tienes que ser fuerte de cabeza"
Para él lo más destacable de esta travesía, y lo que le impulsa a realizarla es “lo dura que es. Tiene dos o tres puntos durísimos en los que más que fuerte físicamente, tienes que estar fuerte de cabeza. Son puntos que podrías pasar en dos minutos y a lo mejor te pegas 40 minutos pasándolos. Ves que estás nadando pero que no consigues avanzar ”.
A parte de su interés por realizar este tipo de travesías, que cada vez está ganando más nombre fuera de nuestra ciudad e incluso a nivel internacional, al nadador le gusta “venir cuando puedo. Ceuta es una ciudad que me encanta. Es muy acogedora. Todos los habitantes son encantadores. Es un sitio que me gusta visitar cuando tengo oportunidad”.
En esta undécima edición de la travesía la dificultad ha sido mayor. El recorrido volvió a ser el original. La salida se realizó en la playa de Fuentecaballos, atravesaron el Foso y salieron por la bocana, una vez ahí llegaron hasta los Isleros de Santa Catalina para volver por la sirena de Punta Almina, el Desnarigado y el Sarchal hasta llegar de nuevo a la playa de la Ribera.
El primer tramo del recorrido de 10 kilómetros fueron más sencillos para los participantes, pero fue a partir de los Isleros, y sobre todo en la zona del Desnarigado, donde las mareas y la corriente en contra dificultaron el paso de los nadadores e incluso donde algunos tuvieron que abandonar.
El nadador malagueño destacó sobre todo la zona de los Isleros, la cual caracteriza como “peligrosa”, pues en una zona donde solamente cabía un participante y en este caso “éramos entre 20 o 30 los que queríamos pasar a la vez. Nos dábamos entre nosotros y las olas nos pegaban contra la roca. Fue una aventura”.
Javier no se quiso olvidarse de todos aquellos que estuvieron presentes en la cita del pasado sábado y a los que quiso “dar la enhorabuena por haberlo intentado. Da igual si la han acabado o no. Solamente por tirarse al agua e intentar pasar por esas zonas, es para darles la enhorabuena”.
Desde el año 2012, Javier Mérida comenzó a nadar en aguas abiertas. Fue en ese mismo año cuando logró cruzar el Estrecho de Gibraltar en un tiempo de 4 horas y 40 minutos. Dos años después, en 2014, cruzó el Canal de La Mancha con un tiempo de 14 horas y 40 minutos. Además también ha rodeado la Isla de Mahanttan y el Canal de Santa Catalina, entre otras muchas.
Estas hazañas han sido las que les ha permitido al malagueño convertirse en “el primer amputado a nivel mundial en conseguir la Triple Corona”. La Triple Corona es el título que se le otorga a todo aquel que realizan las tres travesías más duras del mundo como: el Canal de La Mancha, el Canal de Santa Catalina y la vuelta a Manhattan. Ante esto, Javier se siente “muy orgulloso por lo logrado”.
En todas y cada unas de las travesías que realiza Javier “ tengo claro que mi objetivo es acabarla”. El nada en aguas abiertas supone nadar en el mar “algo muy grande que no puedes controlar. Es una fuerza muy grande y hay que tenerle respeto”. Es por ello que según Javier, “si quieres hacer tiempo, puede ser que no acabes. Hay que asegurar e intentar acabarla”.
Por ahora Javier no tiene ninguna fecha marcada en el calendario, pero lo que sí tiene claro es que “seguiremos entrenando” y que “el año que viene volveremos al Hacho”. Es un luchador nato y seguirá peleando por conseguir grandes méritos deportivos.
La selección nacional de Marruecos Sub-17 ha conseguido clasificarse para la fase final de la…
La Navidad en Ceuta ya ha arrancado por todo lo alto con el acto oficial…
El Camoens da la cara ante el filial del Melilla Torreblanca, pero no consigue puntuar…
La Unión África Ceutí no levanta cabeza y son cuatro derrotas consecutivas las que acumula…
Ceuta ha recibido con los brazos abiertos la Navidad. Este sábado se ha llevado a…
El Ceuta B encaraba la jornada 12 de la liga ante el líder Puente Genil…