Dos guardias civiles muertos, sus familias destrozadas. Ocho detenidos acusados de homicidio. Un ministro que promete que se va a actuar con contundencia cuando, como juez que ha sido, sabe perfectamente que los casos no se pueden diferenciar y el Código Penal recoge las penas que recoge. Ante los micrófonos puede decir lo que quiera, la realidad será siempre otra.
Y junto a todo esto tenemos a esas personas, no dos ni tres sino decenas, animando al narco, divirtiéndose, mirando cómo delincuentes en narcolanchas prohibidas intentaban burlarse de unos guardias civiles que iban en una zodiac a identificar un ‘bicho’ de 14 metros.
Al final no se burlaron, los mataron. No a uno, a dos. Y los que miraban y jaleaban aplaudieron lo que pasó y se fueron. Esos ‘animadores’ del crimen estaban ahí y no nos tienen que sorprender porque hay gente que aplaude a los que viven al margen de la ley, lo hacen en vivo y en directo o de forma aún más cobarde a través de redes sociales.
Es lo que tenemos, esta sociedad. Y va a peor. Tenemos a gente que aplaude al narco porque vive del narco, tenemos a gente que opina a favor del narco porque se mueve en ese ambiente, tenemos a gente que considera que embestir a unos guardias civiles, enfrentarse a quienes representan la ley es lo correcto.
Esto ha pasado en Barbate pero nos ha conmocionado a todos. Algo no se está haciendo bien ni policialmente ni socialmente para que unos agentes acudan a identificar a unos delincuentes en una zodiac y para que decenas de personas, como alimañas, den calor a unos criminales a los que hoy consideran héroes.
Lejos de cambiar, vamos a peor.
Algo está podrido en nuestra sociedad y si no se elimina acabará totalmente con ella ,somos gente de bien y civilizados ,como vamos a aplaudir a esos que traen la droga,la ruina y la muerte?