¿También le resbala esto señora consejera?

Sorprendente cuanto menos, por no decir otros adjetivos que puedan parecer insultantes y calificados fuera de todo contexto pero que no se escriben no por falta de ganas sino más bien por esa educación de la que siempre hacemos gala en una Asociación que lucha, por encima de todo, por el bien de los discapacitados psíquicos. Este escrito tiene su razón de ser: decir lo que pensamos, defender lo que creemos y luchar por ello; dejaremos atrás aquello de “deberíamos haber dicho y no nos atrevimos”. En la vida hay momentos en que se tiene la necesidad de dar a conocer la ignominia de quienes nos rodean y este es uno de esos momentos.
Sí, sorprendente pensamos y perplejos aún permanecemos desde que leímos un artículo en la prensa del pasado jueves 2 de noviembre en el que la Consejera de Asuntos Sociales de la Ciudad Autónoma de Ceuta, Rabea Mohamed, con toda intencionalidad, pretende dar forma a una institución que se haga cargo de las personas con discapacidad psíquica y todo a coste cero.
Tras leer esas declaraciones nuestra Asociación y, por ende, los padres y tutores de personas con discapacidad psíquica en esta ciudad y fuera de ella nos preguntamos ¿una institución? A que se está refiriendo la señora Rabea ¿a crear una Institución Pública con fondos públicos y gestionada por empleados públicos para atender a nuestros hijos en unas instalaciones públicas? No, claramente esta no es la intención de esas declaraciones, más bien se refiere a lo que los padres creemos y llevamos años tratando de evitar. Más bien creemos que se pretende destinar esa gestión a una ONG (nada de institución), evidentemente con nombres y apellidos bastante conocida tanto en Ceuta como en la Península, y asombrosamente no solo por cosas buenas. Se trata de dejar en manos de esta ONG, que no es querida por los miembros y asociados de FEAPS, a nuestros hijos porque así lo impone la señora Rabea. Vamos que no se corta ni un pelo en afirmar que ella, porque está investida de un alo de poder divino, va a decidir sobre nuestra familia. Y lo mejor de todo, es que además nos hemos tenido que enterar por la prensa de sus intenciones, ni siquiera nos ha hecho partícipes de sus propósitos, poniendo en marcha su “supuesto super proyecto” sin nuestro conocimiento, atribuyéndose la potestad de decidir sobre el futuro de nuestros hijos.
¿Pretenderá esta señora que nuestra asociación, tanto a nivel local como nacional, cierre la boca y no ponga objeciones a esta desfachatez? ¡Pues perdone señora consejera, está usted muy equivocada! FEAPS va a luchar como siempre ha hecho por los discapacitados psíquicos, y por encima de todo no va a dejar a nadie, sea consejera o sea “institución” mangonear a costa de nuestra familia. Acaba de toparse con el muro de unos padres que llevan años luchando contra viento y marea para que sus pequeños sean tratados como personas, padres curtidos en mil batallas ante la incomprensión de una sociedad tan egoísta, padres que hacen lo que tengan que hacer por sus hijos, y evidentemente usted, señora Rabea, no va a ser la excepción. Haremos lo que tengamos que hacer y esperamos que esta carta “no le resbale”.
¿Podría usted explicarnos eso del coste cero? ¿Carácter gratuito para quién? ¿Para la ONG, para el Ayuntamiento, para los usuarios? La verdad es que no la entendemos, más bien parecería, si no fuese porque lo juzgamos completamente irrazonable, que lo que usted pretende es bajar la calidad de los servicios que reciben los discapacitados. Le recordamos que está usted refiriéndose a ciudadanos de pleno derecho, discapacitados sí, pero que al igual que el resto de españoles tienen unos derechos constitucionales que los amparan, y como padres haremos todo lo que sea necesario para hacer valer los suyos como sus tutores que somos. ¿Cuál es el coste cero: no monitor, no fisioterapeuta, no profesor, no psicólogo, etc.? ¿Los dejamos sentados todo el día en una habitación mirando al techo para que nos salga gratis y como son discapacitados no protestarán? Cada vez que lo pensamos peor lo vemos, nos hierve la sangre y más nos indignamos. ¿Dónde se encuentra su humanidad? ¿Y si fueran sus hijos lo que tuvieran que vivir así siempre? Plantéeselo señora y descubrirá hasta donde puede llegar un padre.    
La decepción nos ha llegado inesperadamente cargada de ilusiones perdidas. Una decepción enfocada hacia una persona tras haber recibido multitud de promesas, que sólo han sido eso, promesas. Estamos hastiados de escuchar excusas inconexas y de tanta altanería. Después de idealizar como conseguir esos objetivos por los que tanto hemos luchado y que nos beneficiarían a todos, después de guerrear contra viento y marea durante tantos años, caemos en la trampa de depositar la confianza en una persona que a posteriori descubrimos que realmente no valía la pena perder el tiempo con ella. Lo miremos como lo miremos hay que sentirse fracasado, por supuesto, así nos sentimos en FEAPS fracasados por haber seguido un “adornado” camino equivocado. Pero no estamos vencidos y jamás permitiremos que la discapacidad se convierta en sinónimo de exclusión social o de reclusión.