Categorías: Opinión

¿Quedan socialistas en el PSOE?

La globalización es la unificación y transformación social, económica y política de las sociedades que disfrutan del capitalismo democrático. Una especie de todo en uno, donde el trabajador no encuentra su justa ubicación, mientras  multinacionales, banqueros y millonarios han aniquilado la teoría ‘Del Espíritu de las Leyes’ para que florezca el poder de los mercados y sus medios de comunicación. Los ciudadanos cansados de votar a partidos políticos que se someten a la tiranía de los mercados se han movilizado ante un nuevo lema. El de los indignados. Están indignados de ver como los políticos son incapaces de plantar cara a los mercados y están hartos de tanto político trincón.
La globalización de las ideas, del debate político, de la filosofía política ha provocado que los españoles no sepamos diferenciar a la derecha de la izquierda, y esta es la peor de las globalizaciones, porque corremos el riesgo de cargarnos la democracia. No hablamos del tan peligroso bipartidismo, hablamos de perder la riqueza de comparar programas que hagan soñar a los ciudadanos.
Los partidos políticos se han convertido en conventos donde el que piensa distinto no sale en la foto de las siguientes elecciones y, por lo tanto, el debate ideológico ha pasado a un segundo plano para convertirse en el debate de seguir manteniendo el escaño. El que se levante en un congreso del partido para discutir las ideas de la cúpula corre el riesgo de perder el escaño, algo así, como su puesto de trabajo.
El Grupo Socialista Español y el Partido Popular han pactado hacer la PPinza a los guardias civiles, pero será el Partido Socialista “el primer partido progresista” en restringir derechos fundamentales a los guardias civiles y, por lo tanto, a los ciudadanos españoles. Ambos partidos se dan la mano sin pudor para presentar por la puerta trasera del Senado una enmienda al Proyecto de Ley de contratos del Sector Público en los ámbitos de la Defensa y de la Seguridad que pretende derogar el apartado 1 del artículo 8 de la Ley Orgánica 11/2007, de 22 de octubre, reguladora de los derechos y deberes de los miembros de la Guardia Civil, o lo que es lo mismo, cargarse el derecho de manifestación y reunión de los guardias civiles.
El derecho de manifestación de los guardias civiles ha sido rubricado en varias sentencias por los Tribunales de Justicia cuando el Gobierno intentó prohibir las manifestaciones convocadas por AUGC. Ahora quieren cambiar las leyes para cercenar unos derechos reconocidos y refrendados en diferentes sentencias por los tribunales de justicia.
Hoy, en la presentación de la candidatura de Alfredo Rubalcaba, la AUGC ha repartido unas octavillas que decían: “El Partido Socialista Obrero Español, con más de 130 años de historia, es una organización política de la clase trabajadora y de los hombres y mujeres que luchan contra todo tipo de explotación, aspirando a transformar la sociedad para convertirla en una sociedad libre, igualitaria, solidaria y en paz que lucha por el progreso de los pueblos. Nuestra razón de ser es la de contribuir a alcanzar una sociedad mejor, detectando los problemas y aportando soluciones, sobre la base de los principios de libertad, igualdad, solidaridad y justicia social.” (Extraído de la página www.psoe.es).
1.- El Gobierno, traicionando los principios de su propio partido, quiere robar a los guardias civiles la democracia. Democracia a la que han contribuido a desarrollar con su propia sangre.
2.- Un auténtico “bunker” liderado por las altas jerarquías de la Guardia Civil disfraza con demagogia barata su pretensión kasyno de mantener unos privilegios impropios de nuestro siglo XXI. El Gobierno cede y se hace cómplice de aquellos que añoran tiempos pasados. Se equivoca gravemente.
3.- Una Guardia Civil moderna y eficaz no está reñida con el disfrute de los mismos derechos de aquellos que realizan idénticas funciones: las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad.
4.- Pretender frenar la transición hacia una Guardia Civil donde acaben los abusos y agravios respecto a otros Cuerpos de Seguridad solamente agravará la tensión interna que se vive en las unidades, lo que inevitablemente, sólo puede afectar de forma negativa a su eficacia.
5.- Los guardias civiles, a pesar de nuestra naturaleza militar, no somos soldados. Equipararnos con los miembros de las Fuerzas Armadas es un error garrafal de estratégica política y jurídica. Tensionar aún más a nuestro colectivo robándonos derechos multiplicará, de una u otra forma, nuestras acciones de protesta.
6.- Hemos crecido entre las mayores adversidades. Otros gobiernos socialistas encarcelaron a nuestros dirigentes intentando frenar nuestro movimiento. De nada ha servido sino es para crear mártires que armaron de mayores razones a nuestra causa.
7.- La mitad del colectivo de la Guardia Civil está afiliada a la AUGC. La estrategia del Gobierno intentando la involución del Cuerpo no servirá de nada si no es para, dañar, aún más, la ya deteriorada imagen del Gobierno y del PSOE.
La cúpula del PSOE debe reflexionar estas restricciones de derechos, pero son las bases del partido las que deben decidir qué rumbo quieren tomar los socialistas. El socialismo no puede plegarse ni resignarse a la eliminación de derechos fundamentales y sociales de ningún trabajador, sea guardia civil o no, y mucho menos imponer esas restricciones comparando a los guardias civiles con las Fuerzas Armadas, porque los guardias civiles no pertenecemos a las Fuerzas Armadas.
La asociación tiene intención de recurrir la ley ante los tribunales, una vez aprobada, y nos preguntamos “¿no querrán con todo esto volver a la Guardia Civil donde podían darse escándalos como el de Roldán o manipulaciones como las acaecidas con el frustrado golpe del 23-F?”. Sin embargo, ahí no quedará nuestra lucha, porque removeremos los obstáculos y convocaremos las manifestaciones que consideremos necesarias para que no cercenen nuestros derechos. AUGC siempre ha sabido resolver las dificultades y nuestras familias, amigos y colectivos sociales estarán encantados de apoyarnos en cuantas acciones creamos necesarias.
Sinceramente, si todavía quedan socialistas en el PSOE, este proyecto de ley será retirado por coherencia política y por hacer justicia a tantos años de sufrimientos de los guardias civiles y sus familias.
Si todavía quedan socialistas en el PSOE.

Entradas recientes

Comienza la restauración del Torreón de San Miguel en la Ribera

Andamios que rodean al Torreón de San Miguel para devolverle su esplendor. Son la cara…

06/10/2024

Crimen del cabo Dris Amar: primera calificación fiscal

Ya hay calificación del Ministerio Fiscal en uno de los 3 procedimientos distintos en los…

06/10/2024

La tragedia social en la Ceuta 2024

2024, el año de la Inteligencia Artificial, de los nómadas digitales, de los influencers millonarios…

06/10/2024

Ley Mordaza y devoluciones en caliente

Esta semana hemos conocido el acuerdo de modificación de la Ley de Protección de la…

06/10/2024

Capeando el temporal

Me llamó la atención el comentario de hace unas semanas de un habitual tertuliano político…

06/10/2024