Hace tan solo unos días que Turespaña anunciaba la adjudicación de obras en varios paradores que estaba anunciando desde el pasado mes de marzo. A la par, también se ha conocido que el Centro de Interpretación de las Murallas Reales está a un paso de convertirse en realidad al sacar la licitación de la obra, que promete una significativa remodelación del espacio.
Un espacio que ganan la ciudad y los ceutíes, pues parte de estaba estaba bajo titularidad de Paradores Nacionales y, con la creación del centro, se recuperará para dominio público, su uso y disfrute.
Hermanos Campano S.L., anunció Tourespaña, será la empresa encargada de acometer las obras que la entidad nacional licitó a principios de este año para el Parador de Ceuta y otros 8 más, por un importe total de aproximadamente 23 millones de euros en el marco del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia financiado por la Unión Europea y los fondos Next Generation.
Esta licitación ha contemplado 9 lotes (uno por cada establecimiento hotelero) y 14 meses como plazo de ejecución de las obras.
El presupuesto previsto para el caso de Ceuta fue de más de 2’5 millones de euros y en el proyecto de esta puesta en valor estaban contempladas actuaciones como la restauración del baluarte de la Coraza Alta, Torre Caballero e interior de la casamata, habilitación de nuevo acceso así como de un espacio para vistas en el mismo Parador de Ceuta. Dado el carácter patrimonial en el que se encuentra el parador nacional La Muralla, era condición que la empresa que se encargara de las obras tuviera una cualificación para el patrimonio arquitéctónico, como es el caso del Parador de Ceuta y las partes constructivas que comparte con el conjunto de las Murallas Reales.
En el caso de la empresa malagueña que realizará la obra es preciso destacar que La actividad de Hermanos Campano se desarrolla en el sector de la construcción y además, es una empresa de restauración de patrimonio histórico. En sus 20 años de experiencia en el sector, son múltiples las obras realizadas por la empresa en la comunidad andaluza aunque un gran número de proyectos se concentran en la ciudad de Málaga y provincia. Se da el caso de que Hermanos Campano solo se presentó al concurso por el lote 7, que es el relativo a las obras del Parador de Ceuta.
El inicio de esta obra aún no se conoce de forma concreta pero sí que se desarrollarán durante 14 meses.
Sin duda se trata de una apuesta por la recuperación por parte de la empresa estatal que gestiona este establecimiento hotelero. El Instituto de Turismo de España (Turespaña) adjudicó estas obras para la mejora, conservación, restauración y puesta en valor de los Paradores de varios paradores más dentro del Plan de Recupeación, Tranformación y Resiliencia, financiado por la Unión Europea-Next Generation con una inersión que ronda los 23 millones de euros.
Durante este tiempo la obra se realizará on el propósito de facilitar el acceso a la cubierta y al caballero del Baluarte de la Coraza Alta de las Murallas Reales, así como rehabilitar su interior, que será musealizado. Eso sí, 2 habitaciones, la 401 y 402, desaparecerán para ganar una entrada a la fortificación desde la venida Martínez Catena y que actualmente no se utilizan por humedades.
Esta obra se realizará de forma paralela, aunque se desconoce si al mismo tiempo, con las ya licitadas de área de Patrimonio Cultural de la Ciudad Autónoma, que son las relativas a la adaptación del acceso al Baluarte de la Bandera de las Murallas Reales y no menos importante, las bóvedas anejas
El objetivo no es otro que apoyar esta puesta en valor del complejo de las Murallas Reales, del que, de una u otra forma, el Parador de Ceuta forma parte.
Con la obra propuesta por Patrimonio se quiere cerrar el círculo entorno a la construcción del Centro de Interpretación de las Murallas Reales, generando de esta manera un nuevo espacio público. Se trata de un proyecto que está concluido desde hace tiempo y que con la puesta en marcha de las licitaciones que conlleva la obra a realizar, para estar más cerca de convertirse en una realidad que afectará positivamente a la ciudad, a los ceutíes y a todo el turismo que visite Ceuta.
En el caso del proyecto de la Ciudad, la superficie total de la intervención es de 725 metros cuadrados y el importe previsto de esta actuación será de 335.000 euros. Las empresas interesadas en este contrato, podrán presentarse a esta licitación hasta el próximo 23 de agosto
La obra se realizará conforme al proyecto de la UTE Ayllón Paradela de Andrés Proyectos de Arquitectura, el mismo equipo redactor que ganó el concurso de ideas convocado por el Ministerio de Fomento para la rehabilitación del espacio interior del Baluarte de la Bandera.
El objetivo del proyecto planteaba la necesidad de una obra de adecuación del acceso al Baluarte de la Bandera que permitiera establecer sinergias entre el entorno del acceso a éste y la propia visión del mismo de acuerdo a su adecuación, calidad arquitectónica, visibilidad técnica, económica y constructiva.
La intervención propuesta por los arquitectos nace como complemento a la intervención de este Baluarte y las bóvedas anejas para su uso como Centro de interpretación, liberando este patio y abriendo al entorno de la ciudad a través de la calle Edrissis, devolviendo así a la ciudad ese frente.
El proyecto se articula en tres etapas diferenciadas y sucesivas. En primer lugar, la restauración, que se centra en recuperar el volumen y la forma primitiva de las bóvedas, de igual forma se quiere sacar a la luz y restaurar la materialidad original de cuanto sea posible, sin olvidar los estratos históricos, que consolidan las ruinas y restos arqueológicos que pueden ser relevantes para integrarlos como parte del recorrido museográfico del Centro de Interpretación de las Murallas Reales.
En una segunda fase, se contempla la rehabilitación, pues el proyecto reniega de reconstruir las grandes pérdidas de material, tratando de imitar la pátinas del tiempo y una técnica constructiva de otros época. La funcionalidad del Centro de Interpretación se complementa con materiales y paramentos neutros y abstractos que evitan singularizar la propuesta. En una tercera fase, reconfigurar. Así, el uso museográfico del volumen interior se desliga de lo original, buscando configurar un nuevo espacio. El proyecto opta por una intervención mínima que realce el vacío primitivo de las bóvedas.
La finalidad es la adaptación del acceso al baluarte y sus bóvedas para generar este nuevo espacio público expositivo dentro de un edificio histórico y catalogado.
Para ello, se retirará el cierre de separación del espacio demanial entre el Baluarte de la Bandera y la Ciudad; el traslado y/o retirada de la vegetación existente; el levantamiento de los parterres laterales, pavimento existente y mobiliario urbano; la materialización y acondicionamiento de los accesos al Complejo de las Murallas Reales de la Puerta Califal, así como la separación de Parador de Turismo; la reordenación urbana del lateral colindante con la Comandancia general y con el Parador y la plantación de la gran sala exterior.
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