Interior no tiene quién le haga una serie de obras urgentes en la frontera

Aunque el Gobierno de Pedro Sánchez ha dicho por activa y por pasiva que Ceuta necesita de un nuevo espacio fronterizo y que no servía para nada el anteproyecto que tenía preparado el PP porque no respondía a las necesidades actuales, lo cierto es que llevamos casi y un año y cuatro meses desde la llegada de los socialistas al poder y todavía se desconoce cuando se podrá realizar una remodelación integral de la frontera.

Mientras tanto, por parte del Ministerio del Interior se encargó a una empresa la realización de un estudio sobre las necesidades urgentes en la misma aduana del Tarajal. Unas actuaciones que se consideraban urgentes y valoradas aproximadamente en unos seiscientos mil euros. Unos trabajo que no podían esperar porque el tiempo ha ido pasando y tampoco se ha llegado a realizar un trabajo adecuado de mantenimiento.

Departamento

Por esta razón, la Subdirección General de Gestión Económica y Patrimonial del Ministerio del Interior llegó a licitar esta serie de obras y cuando todo debía hacer quedado finiquitado en el mes de julio resulta que han tenido que ampliar el plazo de presentación de ofertas hasta los primeros días del mes de octubre porque no se ha presentado ninguna empresa. El Ministerio del Interior no encuentra a quien le trabaje en Ceuta.

Y es que existe un estado de deterioro importante provocado por desprendimientos y caídas de elementos instalados en alturas sobre los carriles de peatones. Una situación que puede llevar algún día a que se pueda provocar un accidente. Son obras que se consideran de la máxima urgencia y nos encontramos con que ya han pasado dos meses desde que se tenían que haber adjudicado y luego otro mes más si se presenta alguna oferta en octubre más cuatro meses que es el período previsto de ejecución de las obras.

Informes

Los informes de la empresa que ha realizado este proyecto ya establece que no se puede esperar a dos o tres años en que se establezca y comiencen las obras de esa remodelación integral de la frontera. Además advierten que de seguir así se podían producir importantes daños.

A lo largo de los últimos años se han realizado una serie de reformas en la frontera. La primera en 2003 que consistió en la construcción de las nuevas marquesinas y luego otra posterior en 2006 con la reforma de todas las zonas interiores como las oficinas y los calabozos, además de los espacios comunes utilizados por los distintos Cuerpos y Fuerzas de Seguridad que están instalados en el paso fronterizo del Tarajal.

Como muchos políticos han reconocido han sido muchos años de dejación en el tema de esta infraestructura.

El porteo en coche sigue parado a pesar del retraso en la obra de la frontera

El Ministerio del Interior ha vuelto a publicar la licitación de la Obra de rehabilitación de las instalaciones de la aduana en el Tarajal, en la frontera entre Ceuta y Marruecos, debido a que ninguna empresa presentó ofertas al anterior concurso.

El comienzo de las actuaciones, por tanto, se retrasa varios meses ya que el plazo de presentación de ofertas termina el próximo 8 de octubre, un tiempo al que habrá que sumar la duración de los trámites de adjudicación y el plazo de ejecución del proyecto, que es de cuatro meses. El parcheo de la frontera Tarajal estará para principios de 2020 en el mejor de los casos, porque podría ocurrir que el concurso volviese a quedar desierto.

Al tanto de esta nueva demora, y consultada sobre la posibilidad de que se reinicie el porteo en vehículo por este motivo, la Delegación del Gobierno ha señalado que el tránsito de los coches-patera “por el momento no se ha reanudado”. Además, ha reiterado que son los técnicos quienes determinarán “la conveniencia o no de esa forma de porteo”.

No obstante, desde esta representación de la Administración General del Estado en Ceuta reconocen que están a la espera de recibir “confirmación de plazos”.

La reanudación del porteo, después de una pausa de más de un mes, trajo novedades: el final, hasta nuevo aviso, de los coches-patera. La razón: el comienzo de esas obras de extrema urgencia en la frontera del Tarajal, que afectará a los viales de la carretera por donde circulan los vehículos dedicados al transporte de mercancías.

“El inicio de estos trabajos va a influir en la actual configuración de la frontera y más concretamente al sistema de porteo en vehículos. El tránsito de estos turismos no va a ser viable durante el tiempo de ejecución de esta obra, habida cuenta de que estos trabajos afectará a los viales de la carretera”, informó la Delegación del Gobierno en un comunicado remitido a finales de agosto para avisar de que el porteo en coche se suspendía y toda la actividad se canalizaría por el paso oficial ‘Tarajal II’.

Cerca de un mes más tarde, en otra nota de prensa publicada el pasado viernes, la Delegación del Gobierno difundió la reunión que mantuvo con la Confederación de Empresarios de Ceuta (CECE) en la que la patronal planteó la “posibilidad del porteo” por la frontera del Tarajal.

“Esta medida podría ser ‘viable’ hasta el inicio de las obras de remodelación del paso fronterizo”, indicó la institución de la Plaza de los Reyes en ese comunicado. En cualquier caso, los técnicos de la obra determinarán si “es o no factible” este tránsito una vez se inicien los trabajos.

Los portavoces de los comercios de la zona del puerto, el centro y los polígonos del Tarajal también se reunieron con la delegada del Gobierno, Salvadora Mateos, para trasladarle su preocupación ante las pérdidas económicas derivadas de las limitaciones del tráfico de vehículos en el paso fronterizo del Tarajal.

Según los asistentes al encuentro, la Delegación pidió “comprensión” por la obras del paso del Tarajal que estimó se extiendan entre 3 o 4 meses. “La delegada nos ha dicho que va a estudiar con los técnicos la posibilidad de compaginar las obras con la habilitación de un paso para vehículos”, contó a El Faro la portavoz de la plataforma de empleados damnificados por la Frontera, Ana Morón. Con este retraso, se plantea un nuevo escenario con unas obras que no comenzarán hasta el año que viene.