Comparecencia con anuncio. Y es que el ministro de Interior, Jorge Fernández Díaz, aprovechó ayer para anunciar que el Ministerio que dirige ha aprobado una partida de 250.000 euros para blindar la que ahora es la línea más permeable de Ceuta: el espigón del Tarajal, precisamente la vía usada por los inmigrantes para intentar entrar en la madrugada de la tragedia. El mayor número de entradas masivas que se ha producido en los últimos años ha tenido lugar por este punto. Algo sobre lo que ya había advertido la Guardia Civil y que incluso había llevado al propio delegado del Gobierno, Francisco Antonio González, a considerar la necesaria obra de reforma en la zona. Esto había quedado aparcado hasta que ayer el propio ministro confirmó que se buscará esa partida para blindar lo máximo posible este espigón, haciendo más complicado el acceso.
La obra tendrá lugar este año y se ejecutará de forma urgente. No se hará lo mismo con el espigón de Benzú, cuyo acceso es más complicado. El ministro indicó que con los efectos de los áridos, la función de control de este espigón ha quedado muy mermada, habiendo pasado de los 30 metros de ocupación de la línea de mar a no más de tres. Con marea baja puede transitarse a pie de uno a otro lado, algo que ha sido aprovechado por los inmigrantes para, solo con bordearlo, llegar a la playa del Tarajal. Ahora el Ministerio ha ordenado que se ejecuten las obras de blindaje para evitar las carreras hacia la playa que realizan los inmigrantes y que ni siquiera puede parar Marruecos.
Entradas, obras e historia reciente
El ministro lamentó que en anteriores épocas, existiendo la misma presión sobre el espigón del Tarajal y habiendo mejor disponibilidad económica, no se hubiera liberado una partida para blindar el espigón. Hizo estas alusiones en una clara carga hacia el PSOE, al que le recomendó que antes de hablar pensara e hiciera un ejercicio de reflexión sobre las inversiones realizadas en frontera que, recordó, fueron nulas.