Los agentes destinados en la frontera marroquí interceptaron ayer un autobús de Francia en el que había más de 700.000 euros ocultos entre el equipaje. Su recorrido planteaba cruzar el paso del Tarajal para posteriormente embarcar con destino a Amsterdam.
En el operativo se detuvo al conductor del autobús (de nacionalidad española), al que se le acusa de intentar pasar de contrabando esta cantidad de moneda, además de a otras dos personas (su ayudante y un marroquí). El servicio se llevó a cabo a primera hora de la mañana, durante una inspección sobre los vehículos que cruzaban en dirección a Ceuta, con el que se terminó frustrando la entrada de ese dinero de origen que no se ha podido justificar.
Según una fuente de la aduana, el dinero estaba distribuido en distintas monedas: nueve millones de dirhams, euros y coronas danesas. Se ha denunciado que el objetivo perseguido no era otro que el de pasar el dinero sin ser objeto de procedimientos judiciales en curso y sin previo permiso de las instituciones financieras competentes.
Los tres detenidos han sido entregados a las autoridades judiciales además de que se ha abierto la oportuna investigación por los hechos, en lo que se presenta como un delito de evasión de divisas.
No es la primera vez que el paso fronterizo es escenario de este tipo de actuaciones que se han saldado con decomisos de importantes cantidades de dinero. Éste es introducido por el paso fronterizo sin pasar control alguno y sin ser declarado, por lo que no se puede controlar cuál es su origen. Las fuerzas aduaneras marroquíes se han hecho con importantes cantidades de dinero aplicando controles específicos sobre los vehículos que les resultan sospechosos.
De igual manera, en el lado español o en el mismo puerto, las fuerzas de seguridad españolas, tanto CNP como Instituto Armado, han decomisado importantes sumas de dinero que intentaban ser trasladadas sin el obligado control del Fisco.