Malas noticias desde García Aldave.
Se han retomado las labores de extinción del incendio que asoló Ceuta este sábado. La pesadilla ha vuelto a García Aldave. Y en concreto a los vecinos de Cabrerizas Altas y Serrallo. Ni horas han permanecido tranquilos. Ni horas han podido recuperar cierta tranquilidad. Las llamas han vuelto a hacerse fuertes en el monte, provocando el desalojo de los vecinos, que, además han tenido que ser atendidos por Cruz Roja. Es un desastre. El mayor desastre medioambiental que se ha vivido en Ceuta con más de 60 hectáreas calcinadas. El panorama es desolador. Todos los Bomberos, de nuevo, están entregados en atajar las llamas. No pueden más, desbordados y apoyados por toda la Policía Local y por unidades de la Policía Nacional y Benemérita. El monte vuelve a ser pasto de las llamas y a todos nos surge la misma pregunta: ¿por qué? "Que vengan los Bomberos, que vengan los Bomberos", gritaban los vecinos en declaraciones a FaroTV. Siguen viviendo con mucho miedo, y están viviendo una pesadilla que parecen no tener fin.
Les han desalojado por segunda vez de sus casas, de su hogar. Temen perder sus casas, perder sus pertenencias, reclaman que vengan los medios aéreos ya, antes de que las llamas devoren su hogar.
Todos los protocolos se han activado ante lo que es un auténtico desastre para un monte que está sufriendo demasiado la acción del fuego. El daño ecológico es incalculable como la muerte de animales y especies diversas que aún se desconoce.
Bomberos dicen que no pueden más, que no dan abasto
Efectivos del SEIS dicen que no pueden más. Las llamas avanzan con rapidez. La Ciudad ha pedido medios aéreos. El helicóptero desplazado ha realizado varias batidas sobre el lugar. La UME abandonó Ceuta esta misma mañana, habiendo relevado a los Bomberos por la noche para que descansaran. Sobre el terreno muchos se preguntan si no podían haberse quedado más tiempo.
Cruz Roja vuelve a activar el dispositivo contra incendio forestales y atiende a una mujer afectada
Las imágenes ofrecen una conclusión: los medios se desbordan ante la crecida de un fuego que cobra fuerza por el viento. Mientras todos los que trabajan, de las fuerzas que sean, lo dan todo por terminar con esta pesadilla, los vecinos del lugar han sido atendidos por Cruz Roja, desalojados de sus viviendas. Son las auténticas víctimas directas de esta situación. Tienen miedo, reclaman ayuda, están nerviosos. Por otro lado han subido también varias bombas de agua para luchas contra las llamas que acechan sobre las casas de los vecinos de Cabrerizas Altas y el Serrallo.