El incendio que se declaró el pasado sábado en Chauen, al norte de Marruecos, sigue sin llegar a ser controlado tras haber afectado a más de 200 hectáreas de terreno forestal. El fuego ha afectado principalmente a zona compuesta por pinos y alcornoques y la situación este domingo volvió a ser muy difícil. El incendio se originó a las afueras de la ciudad de Chauen, en un bosque conocido como 'Sakana'. El incendio se declaró al mediodía de este sábado, 14 de agosto, en plena ola de altas temperaturas. Lo que comenzó como un pequeño incendio que en principio podía extinguirse rápido acabó complicándose debido al viento, con una fuerza y velocidad que ayudaron a propagar unas llamas muy peligrosas. El director regional de Agua, Bosques y Lucha contra la Desertificación en la provincia de Chauen, Rachid El Anzi, comentó que las "estimaciones preliminares indican que el incendio dañó unas 200 hectáreas de cubierta forestal compuesta principalmente por pino y alcornoque", recoge la Agencia MAP. Las condiciones climáticas que se han dado estos días no ayudaron a la extinción del incendio, que seguía este domingo vivo: altas temperaturas, fuerza del viento, que con cambios de dirección hacía más difícil las labores de extinción... todo se ha unido en contra de un
incendio que además se ha producido en una zona geográfica difícil para el acceso de trabajadores, vehículos y elementos de extinción. La provincia de Chauen ha marcado temperaturas entre los 39 y 45 grados estos últimos días de fin de semana -y también este lunes-, una situación que fue avisada por la Dirección General de Meteorología de Marruecos. Además, Rachid El Anzi ha indicado que el proceso de control del fuego se lleva a cabo con la intervención de bomberos, responsables de los montes (lo que serían guardas forestales en la denominación española) y Protección Civil. No son los únicos, ya que sobre el terreno están autoridades locales o las Fuerzas Armadas Reales de
Marruecos, que han apoyado los trabajos de extinción con cuatro aeronaves especializadas en la extinción de incendios. No hay daños humanos, destacó el director regional de Agua, Bosques y Lucha contra la Desertificación en la provincia de Chauen, y añadió que aún no se saben las causas por las que se originó el incendio. En las últimas horas ha habido un esfuerzo mayor, el de proteger los núcleos de población cercanos a la zona donde está el incendio.