Este fin de semana se vuelve a reanudar el concurso de imagen submarina que lleva el nombre de nuestro amigo y gran buceador ceutí Francis Valero, siempre recordado por todos los que nos dedicamos a las actividades de buceo. Para nuestra asociación es una satisfacción que se celebren este tipo de certámenes que atienden, a través de la faceta artística de las instantáneas y los vídeos, la belleza de nuestro medio marino y sus aclamados fondos. Por todo ello, aplaudimos esta buena iniciativa del Club Náutico Cas de Ceuta y agradecemos a Julio Sillero todo el esfuerzo que pone en estos eventos. La propia Fundación Museo del Mar de Ceuta, entidad muy cercana por diversos motivos a nuestra asociación, participa en el mentado concurso con dos de los jóvenes científicos que a su vez formarán parejas con buceadores del Club Burbujitas de Ceuta.
Es bien sabido que nuestra asociación está vinculada a las labores de conservación del medio marino con la FMMC y que apoyamos los proyectos que ellos impulsan en beneficio del conocimiento y la conservación del litoral de Ceuta y de otras zonas geográficas. Este evento y otros muchos más se han presentado hace unos días a la prensa dentro del ámbito de la Semana Náutica Virgen del Pilar 2023.
Sin analizar todas las iniciativas que se han incluido en el programa presentado, hay dos que nos llaman también poderosamente la atención. Una de ellas es la Jornada Histórica de Arqueología Subacuática con talleres educativos para niños. Siendo el CAS una institución con mucha historia en la exploración y rescate de restos arqueológicos submarinos, y teniendo en cuenta las importantes contribuciones a este mundo que se han producido en torno a buceadores, y estudiosos de la talla de Juan Bravo, nos parece muy interesante que se ponga de relieve esta trayectoria. Siempre bien orientada a los trabajos culturales y educativos dirigidos por arqueólogos competentes y la debida participación de los expertos ceutíes.
Muy interesante ha sido también la iniciativa del CAS de promover la exploración en el medio mesofótico y Circalitoral en base al buceo técnico profundo hasta los 100 metros. De hecho, el director científico de la FMMC se puso en contacto con Julio Sillero para felicitar la iniciativa y recordarle que la mencionada institución lleva una considerable trayectoria de cinco años de estudios desarrollados en relación a la exploración científica de este tipo de fondos marinos en Ceuta, el mar de Alborán y las islas Canarias; si bien en las islas Canarias es donde se está profundizando actualmente a cotas entre 60 y 100 metros. Todo ello con resultados científicos inéditos y útiles para el conocimiento de las especies, los hábitats y la conservación de estos fondos marinos menos conocidos. Por ello, vamos a participar en las Jornadas de Buceo técnico y las colaboraciones con buceadores técnicos de diferentes lugares incluidos de Ceuta, orientando hacia los lugares con interés de exploración científica y ecológica.
En nuestra ciudad llevamos colaborando activamente en estas cuestiones con el club Burbujitas o los propios GEAS con muy buenos resultados. De las cuestiones más interesantes que se pueden desarrollar con estos buceos técnicos profundos, además de la promoción turística original de Ceuta en FITUR, podría ser justamente la proyección social de los hallazgos científicos y la motivación a la participación con nuestras investigaciones y exploraciones a todos aquellos buceadores técnicos que tienen interés en la conservación del ecosistema marino ceutí y de Alborán en general.
Hoy la “ciencia ciudadana” está siendo un revulsivo para la participación activa de personas realmente concienciadas con la protección del patrimonio natural submarino. Nosotros podemos indicar que gracias al club burbujitas o al club buceo Calahonda hemos podido incrementar nuestros conocimientos de este tipo de fondos marinos y nos han llegado datos muy interesantes que constituyen nuevos hallazgos científicos desconocidos hasta el momento tanto para el litoral de Ceuta como para las zonas de Málaga, Granada o las islas Chafarinas. Esto ya se ha puesto de manifiesto en varios artículos científicos de reciente publicación y en una guía de ciencia divulgativa publicada dedicada al proyecto MesoAlborán que tendremos la oportunidad de ofrecer a los participantes. Ya se está elaborando una guía interpretativa de carácter técnico-científico para el medio mesofótico y circalitoral de Canarias que tendrá que estar terminada a lo largo del año 2024. Este último proyecto financiado por el Gobierno de Canarias es a su vez deudor de tres proyectos previos de exploración e instalación de Estaciones Centinelas en hábitats ciralitorales de Canarias también financiados con fondos públicos de Canarias y la UE.
El incremento de la exploración biológica del medio marino durante los últimos veinte años ha posibilitado un gran volumen de información sobre especies y hábitats que no ha sido fácil de manejar ni interpretar correctamente. Toda esta ingente cantidad de datos no ha estado acompasada de una formación de naturalistas eficientes en las tareas de reconocimiento e interpretación de los hábitats y mucho menos en la identificación correcta de las especies marinas. De hecho, se puede decir que hoy en día la identificación científica de las especies marinas es una de las líneas de investigación prioritarias si se desea conocer rigurosamente y descubrir novedades entre los organismos que se están recogiendo en el medio marino.
En demasiadas ocasiones se están realizando exploraciones que, aunque siempre son útiles con datos relevantes, van seguidas de identificaciones faunísticas que hoy en día se revelan insuficientes para llegar a conocer la diversidad escondida o Cripto-diversidad. De la misma forma que ocurre con la diversidad de especies y su confusión y desconocimiento, tampoco existen estudios de descripción de hábitats con un reconocimiento fuanístico y florístico de sus componentes principales ni estudios del paisaje sumergido, su interpretación histórica, impactos antrópicos y sus hábitats y especies características bien catalogadas.
Y toda esta falta de estudios detallados hace que un buen número de los hábitats enunciados en la lista patrón de hábitats marinos españoles, parezcan similares entre sí y no se reconozcan las diferencias entre ellos y su mayor o menor valor ecológico o científico. Con el desarrollo del concepto de Cripto-diversidad (y se aplica tanto a las especies como a los hábitats), estos trabajos exploratorios cobran un gran sentido, en tanto en cuanto que pueden aportar información decisiva para la protección efectiva de ambientes y paisajes submarinos originales y únicos en el contexto español.
Llevamos una década de exploraciones científicas en el medio de penumbra o mesofótico (40-100 metros de profundidad) en distintos sectores de la Macaronesia (Azores, Madeira, Canarias y Cabo Verde), el Mediterráeo occidental (en la cuenca de Alborán especialmente) y por su puesto en Ceuta. Si bien todavía, en nuestra tierra no hemos sobrepasado la cota de los 70 metros de profundidad con buceo autónomo y tampoco en otras zonas de Alborán. Como hemos indicado, solo en Canarias se hemos tenido la oportunidad de bajar hasta los 100 metros.
Por todo lo expuesto, estas jornadas de buceo técnico prospectivas, son una excelente oportunidad para realizar inmersiones en aquellos sectores de mayor interés en base a nuestros trabajos exploratorios previos y que han sido realizados durante varios años en Ceuta. Es importante también porque entendemos que al ser una actividad de alto riesgo (son buceos de gran peligrosidad), sería bueno aprovechar todo el material que se pueda obtener y sacar el rendimiento debido a los fondos públicos con los que se van a sufragar.
Es una actividad de alto coste económico debido los sofisticados equipos de buceo pero también al elevado precio de Helio o del Oxígeno en el mercado, ambos disparados desde la guerra de Ucrania. Para nosotros, desde el punto de vista científico, supone una oportunidad de tener la experiencia directa en algunas zonas donde no hemos bajado todavía y sabemos que se concentran hábitats y especies de relevancia que ya conocemos a través de vehículos de control remoto; en especial aquellas zonas marinas que se han propuesto para su protección en el ámbito del proyecto INTEMARES. Esto siempre nos ayudaría a formular proyectos científicos más concretos y a solicitar subvenciones a las instituciones públicas para estos cometidos y fines.
Si existe una iniciativa política para desarrollar este sector del buceo en Ceuta, o simplemente ayudar a expandir el nombre de la ciudad a través de la ventana de FITUR, la participación científica puede sacar mayor rendimiento a la propuesta y aumentar los contenidos interesantes de forma inmediata y de cara al futuro, toda vez que se genere el nuevo edificio del Museo del Mar para divulgarlos en exposiciones temáticas. Otro de los objetivos interesantes, como comentábamos al principio sería generar una red de exploradores de estos fondos que nos ayuden a aumentar el conocimiento científico, sumándonos a un proyecto novedoso de Ciencia Ciudadana de exploración, gestión y conservación de este tipo de ambientes tan maravillosos como desconocidos.