‘HURGE’ nace como un proyecto para formar y capacitar a los profesionales de Urgencias y Emergencias para adquirir habilidades y herramientas para humanizar su asistencia
Identificar las emociones, empatizar con estas y lograr humanizar al máximo los servicios de emergencias y urgencias. Esa es la misión del proyecto ‘HURGE’. La médico Carolina Pérez y el enfermero Victor Ríos, ambos del 061, son la cara visible del proyecto HURGE en Ceuta. Recién llegados del I Congreso Internacional de Humanización en Urgencias, Emergencias y Catástrofes, en su cabeza sólo rondan ideas y acciones para ofrecer un servicio más humano con el paciente, empatizar con los sentimientos de estos cuando los atienden, así como gestionar las emociones con la idea de optimizar el trabajo de los profesionales sanitarios.
Justo sobre este tema, el del control emocional en el personal sanitario, se centró el taller impartido por los sanitarios del 061 de Ceuta. “No hay nada más contagioso que una emoción”, explica Carolina Pérez que habla sobre el temor que muchos profesionales tienen de cruzar la línea emocional con los pacientes. No obstante, asegura que se puede y se debe empatizar con ciertos límites, logrando con esa acción, incluso, una optimización del trabajo.
En su taller explicaron las diferentes empatías que se pueden alcanzar con un paciente. La primera es la cognitiva, en la cual el sanitario reconoce los sentimientos a simple vista, identificándolos y sosteniéndose en estos para lograr llegar al paciente.
El siguiente paso es la empatía emocional, cuando esas emociones “contagian” al profesional sanitario, punto al que recomiendan no llegar y mucho menos al tercer nivel, que sería la simpatía.
Carolina Pérez aboga por el primer punto, esa empatía cognitiva necesaria para ponerse en la piel de la persona sin mayores implicaciones emocionales, sólo las justas para poder abordar su padecimiento y lograr una intervención más eficaz y a la vez que humana. “Esto que pasa por mi cabeza, saber canalizarlo”.
Ambos profesionales confiesan que muchas veces ese trato no se da por miedo. Miedo a perder el control de esas emociones y bloquearse. Pero ahí radica la importancia de estos congresos es buscar esa forma de empatizar y lograr esa conexión con los pacientes.
Durante este congreso coincidieron con muchos profesionales ávidos de intentar humanizar los servicios de Urgencias y Emergencias, contando experiencias de vida, tanto profesionales como personales. Relatan que lo importante ha sido la colaboración entre todas las personas implicadas: personal sanitario, pacientes y familiares, pues cada uno ve desde un punto de vista diferente una misma situación.
En apenas nueve meses HURGE se está haciendo un hueco, como ya en su día lo hizo HUCI, el proyecto para humanizar la Unidad de Cuidados Intensivos, una de las áreas que llega a ser más traumática para pacientes y familiares.
A principios de año también nació HONCOR, para la humanización del la Oncohematología y radioterapia. Siempre con la H por delante, la idea es seguir buscando la forma de mejorar el trato sanitario-paciente. Será cuestión de tiempo el ver esta evolución que se está haciendo y traer a Ceuta todos estos movimientos con la idea de ir mejorando la calidad del servicio que se da en estas difíciles situaciones.