Huérfanos de tu Paz en San Antonio

Este año nos hemos visto privados esa fresca mañana de mayo alegre como un jilguero del transitar de su bendita y preciosa imagen por los senderos que rodean la ermita del santo de Padua. No ha podido bendecir la vegetación, la maleza, las florecillas, los acantilados y las olas que rompen frente a ese rincón sagrado y emblemático de nuestra querida tierra, que esta claro que no les duele a todos por igual a pesar de la distancia. Ella fue la luz de amanecida que junto al astro Rey iluminaba nuestra ciudad llegando a mayo los últimos años. En una ocasión no lejana en el tiempo y dentro de un mismo año presidio tres rosarios de la aurora con bastante afluencia de feligreses, a pesar de la hora tempranera y de lo distante del lugar en el que se realizaban los mismos, pero cosas de la vida, este año no pudo ser.
Dicen algunos eruditos que quizás ya no cumpla los requisitos, que si cumplía hace no tanto tiempo, de ser una imagen bendecida de culto particular cedida cordialmente y sin interés alguno para tal efecto por una familia piadosa afincada en Ceuta desde hace muchos años y comprometida con su parroquia en todo momento. ¡ Y hay que ver que chiquitita solo tres letras la llaman, hay que ver con que poquito bautizaron su mirada¡. LA REINA DE LA PAZ.
La que aglutinó fieles devotos junto a Ella, la que fue alabada con rezos, cantos y oraciones rodeada de flores en su mes, ya no es digna de tal veneración. ¿ Será que no interesa en este momento que una imagen de la Madre de Dios salga a las calles para que podamos dar protestación pública de fe?,  ¿Será que no son validas las imágenes como se promulgó en el Concilio de Trento y se rubricó con letras de oro su valor catequetico?. No lo se, ¿Será cosa de desprestigiar el uso de las imágenes para tal fin?. No lo sé.
A veces escribo artículos sin respuesta, a veces me pregunto si los recuerdos tienen respuestas a las sorpresas que te encuentras por detrás. Vengo de una tierra donde la gente vibra cuando ve pasar una Virgen en agosto o abril  por sus calles. Siempre tuve un ángel que guiaba mi destino y ese me dijo un buen día que si las cosas que te ocurren duelen en lo mas profundo de las entrañas es que van por buen camino. En este mundo en que vivimos queridos hermanos en Cristo el arte no se hace, se tiene o no se tiene, se nace o no se nace.
Y ese arte hay que saber reconocerlo y darle el valor material y espiritual que tiene, hay que valorar las imágenes por lo que son y por lo que representan. ¿ Será que no se entiende de lo que se habla, o peor aún,  no se quiere entender?, ¿ Será que vuelven los nuevos iconoclastas?, ¿ Y esos quienes son? ...
Creo que hay dos tipos de iconoclastas. Los ateos, que no creen en nada todo les irrita y quieren destruirlos, y los católicos estupidos.
Entre los primeros, generalmente zafiedad de zafiedades. Véase por ejemplo todos aquellos que destruyeron obras de arte sacro en 1936, hay algunos, escasos, que respetan la belleza y creen que debe conservarse la Venus de Milo o el busto de Nefertiti.
Entre los católicos, o que se dicen tales, responden también a dos tipos. Los metafísicos y los sociales. No podría decir quienes me parecen más equivocados. Los primeros van de sabios por la vida y es difícil encontrar a alguien más memo. Se les cae de la boca aquello de que a Dios hay que adorarlo en espíritu y en verdad. Nada de imágenes. Todas son falsas. Todo en pura superstición. Como el becerro de oro.
No niego que alguien sea capaz de adorar a Dios desde la pura idea. Pero los humanos, en nuestra inmensa mayoría, necesitamos meditaciones. Y una de  ellas son las imágenes de nuestros Cristos y nuestras Vírgenes. ¿Que hay excesos? Son excesos de amor. En ellas vemos a Cristo, Maria y a sus Santos. Los tocamos, nos llegan al alma. Nos acompañan siempre.
¡Cuantos hermanos en la fe tienen en su casa una imágen o un cuadro, o llevan una estampa en un pliegue de la cartera¡. El hijo de un amigo mío, hombre que no frecuentaba la iglesia, tuvo un gravísimo accidente, todos pensábamos que se moría. Pase a su casa a interesarme por el  y me dijo que tenia encima de su cama un cuadro de Medinaceli. Si sale de esta, lo primero que haremos será ir a darle gracias y lo acompañaremos cada año el sábado de pasión en su traslado a la casa de hermandad. Y fueron. Para irle a esa gente con metafísicas y sin imágenes. No entenderían nada. Ni se acordarían de Dios. Tal vez es eso lo que se pretende.Cuanto menos bulto mas claridad.  Quien lea entienda.
El Roció, la Maredeureta, el Pilar, Montserrat, el Cristo de Urda, El Cristo de la Victoria de Vigo, la Santina, Santiago… Son asideros de nuestra fe. Esperanza de la misma. Amores entrañables mamados desde el nacimiento. Tal vez altos profesores de teología, tal vez herejes, no comparten esas “vulgaridades”. Pues yo, absolutamente vulgar. Con mis Cristos y con mis Vírgenes. Y a quien le moleste que mire para otro lado y no sea como el perro del hortelano.
Los sociales son todavía perores. A los primeros les guía una inteligencia desencarnada y utópica pero inteligencia al fin. Estos son bobos de solemnidad y de una cortedad notable. Y además con un alma seca porque desconoce el amor.
No tengo ni idea de lo que puede valer la corona de la Virgen de África. Si la vendemos tal vez podamos comprar dos pisos o tal vez cuatro, para unas familias necesitadas, que al día siguiente ya no tendrían para comer. Mientras que el amor a la Virgen, que es la más guapa por dentro y por fuera, permite mucho mas auxilio a los necesitados.
La Virgen del mayor dolor sin palio, sin manto, sin procesión el viernes santo, sin nada, seria una imagen más en una iglesia más y sin nada más. Seguramente eso es lo que se busca. Pero aprovechemos el amor de la gente a sus Vírgenes y a sus Cristos para hacerlos mas vinculados a  la Iglesia, más piadosos, más caritativos. Pero no matemos ese amor a cambio de nada.
Quienes piensas que son un trozo de madera, alguien lo ha dicho, “peponas vestidas con mantos”, no me preocupan nada. Se reconcomen con su propia frustración. Odian a la Iglesia y a todo lo de la Iglesia. Que se les indigeste el odio. Los que me duelen son los tontos que se creen católicos y abominan de la Iglesia.
Celebremos las misas en chozas, suprimamos las imágenes y mientras tanto los que propician todo esto dando conferencias y charlas alojándose en hoteles de cinco estrellas, o viviendo del cuento sin dar ni un palo al agua con la que esta cayendo.
Pues a mi me encanta la Virgen de África con su joyas y su fajin. Me da igual de quien fuera. Alguien que mandaba mucho se lo ofreció pensando que Ella mandaba mucho más.
Supongo que todo esto es producto de la religiosidad popular entendida por la masa necesitada de vehículos para llegar a Dios, ésta es una búsqueda de relaciones con la divino que sean más sencillas, más directas y más rentables. Hay que tener en cuenta que la fe y, por consiguiente, la Iglesia se siembran y crecen en la religiosidad culturalmente diversificada de los pueblos. Por lo tanto, la religiosidad popular  es una forma activa con la cual el pueblo se evangeliza continuamente a si mismo.
Ejemplo de popularidad es en si el propio ejercicio del Santo Rosario, en los usos monásticos medievales, los monjes laicos no podían seguir el oficio coral, por ignorar el latín. Entonces se le sustituyan los salmos del día por cincuenta Padrenuestros, pronto la devoción mariana absorbió esta practica difundiéndola entre el pueblo y haciéndola mas acorde con el oficio canónico.  Entonces el Padrenuestro es sustituido por el Avemaría y se antepone como antífona cada Padrenuestro y diez Avemarías al anuncio de un misterio de Cristo o de la Virgen. Las 150 Avemarías resultantes (de las tres partes del rosario completo) fueron comparadas con los 150 salmos del breviario. Así es frecuente denominar al rosario “Salterio Mariano” un salterio del pueblo que ocupaba el lugar del salterio del clero.
Benedicto XVI acaba de proponer el rezo del rosario para acompañar la evangelización del mundo y llevar a los bautizados a redescubrir y profundizar la fe. Y es que el rezo del rosario el la llave maestra que Dios nos ha dado para abrir la Puerta del Cielo. Y sin ir más lejos, en su homilía de la fiesta de Pentecostés, la segunda más importante del año litúrgico dijo que el serpentear de la desconfianza, la sospecha y el temor recíproco entre los hombres llega a ser tan desafiante hasta el punto de convertirse en peligrosos el uno para el otro. Por todos lados, miremos donde miremos nos vemos rodeados de violencia de  todo tipo, la violencia engendra violencia, en nosotros mismos los cristianos, incluso en sus almas más puras y en los lugares más insospechados, el Príncipe de la tierra, gana la partida al bien por no tener actitud y ganas de estar en gracia de Dios con lo fácil que es leer su palabra a diario y hacer comunión espiritual o mejor aún recibir su cuerpo frecuentemente, bálsamo que cura las heridas del cuerpo y del alma. Su Santidad nos exhortó el pasado día 27 de mayo a encender las velas del Espíritu Santo como llamaradas de fuego vivificador que nos cubra las cabezas y purifique nuestras almas, y  yo le pido a María Santísima, la Reina de la PAZ que nos cubra con su manto en este trance para poder vencer al maligno.
Como decíamos ayer la lucha por la verdad sigue siendo una larga paciencia, queremos saber, ¿Cual es la verdad?, cual es el fin ultimo, la causa fundamental  que nos dejo huérfanos de su presencia en las calles el pasado mes de mayo. Ella, la que atrajo tantas devociones, en la que fueron puestos tantos ojos, y por la que a través de su bendita imagen algunos redescubrieron la fe olvidada o incluso la descubrieron por primera vez.
¿Qué mal hace una bellísima imagen privada de Maria abriendo el cortejo de un rosario de la aurora en su honor por los campos de nuestra tierra?, ¿Que malo tiene que este año fuera su bendita imagen la que sirviera de guía a los desterrados hijos de Eva, cuando antaño fue el faro que guió sus pasos para poder deambular con firmeza por el difícil sendero de la vida?
Parece ser que sin ninguna mala intención y por un cúmulo de despropósitos, mi querida hermandad de San Antonio este año ha obviado su rosario perdiendo una tradición que se estaba afianzando en los años anteriores por la buena acogida que había tenido por la feligresía y el respaldo de la Iglesia en todo momento, tanto desde el derecho canónico como desde la sensatez.
No me explico como una hermandad pierde esta oportunidad tan bonita, hermosa, piadosa y cristiana de rezar el santo rosario públicamente por los aledaños de su ermita, espero que se replantee este olvido para años venideros y se retomen las buenas costumbres de religiosidad popular de las que tan faltos estamos en los últimos tiempos y tan mal mirados incluso por la propia iglesia en algunos sectores, y así nos va, ya que como dije antes, para los vulgares como yo, los pobres cristianos poco formados como yo que no hemos tenido el privilegio de estudiara teología, es muy importante el mástil de una talla sacra para llegar a Dios, ya que la metafísica, la espiritualidad, la contemplación y la vía unitiva nos vienen un poco grande, ya que somos hombres de barro con alma pero al fin hombres que necesitamos de lo material para trascender a lo espiritual.
¡Como envidio a esos elegidos que conectan directamente con el móvil de Dios sin pasar por una centralita¡ Que les aproveche y aprovechen, valga la redundancia, ese privilegio para pedir al Señor por nosotros, los vulgares, los desheredados, los incultos, los que necesitamos de “muñecas” para ver a la Madre de Dios y poder verla en nuestras almas con forma humana, y que no se olviden que tanto Maria Santísima como a su Hijo, Jesús de Nazaret fueron humanos por la gracia de Dios Padre uno y trino. Así que no entiendo y sigo sin comprender por qué la Reina de la Paz se quedó en su casa sin salir en Rosario de la Aurora en el rosario que hasta el pasado año organizaba la hermandad de San Antonio, de todos modos pienso que la verdad no hay que gritarla con susurrarla basta para que la oiga el que está a la vera y el que está lejos.