Las calles de Ceuta empiezan a vaciarse, el toque de queda se aproxima y los ciudadanos deben regresar a sus domicilios. Mientras la ciudadanía descansa en sus hogares, hay muchos que quieren seguir siendo los ‘protagonistas’ de la noche y no hacen caso a unas medidas que pueden salvar vidas. La noche en Ceuta parecía tranquila… pero todo puede cambiar en apenas segundos. La Policía Nacional vigila las 24 horas del día cada rincón de la ciudad, sin apenas pestañear, porque todo puede dar un giro en cualquier momento.
Ya ha comenzado el toque de queda y un aviso de una posible fiesta en un domicilio de La Marina hace saltar todas las alarmas. La Policía Nacional comprueba qué está ocurriendo en la zona. Tras pedir la documentación a las personas que se encontraban en la vivienda y al no poder certificar que estaba ocurriendo una fiesta, los agentes amonestaron solo verbalmente a los ocupantes. “La intervención es una amonestación verbal por tener la música bastante alta. Pero hemos comprobado que eran 4 trabajadores y simplemente tenían la música alta”, expresó uno de los agentes de la Seguridad Ciudadana de noche de la Policía Nacional, de patrulla junto a FaroTV que ha convivido 24 horas con el CNP para conocer más de cerca su trabajo en unos tiempo complicados, afectados duramente por la pandemia.
El coronavirus no ha hecho más que duplicar la labor de los agentes. No es solo trabajar, hay unas medidas covid que son imprescindibles de cumplir para evitar contagios. Hace unas semanas nombraron a Rubén García, policía nacional, como responsable covid de la Jefatura Superior para que se cumplan todos los protocolos establecidos y se produzcan los menos contagios posibles entre sus efectivos. Para evitar esa posibilidad, la Jefatura Superior cumple con los requisitos marcados por las autoridades sanitarias. “Las medidas que hemos adoptado es bajar el personal en los despachos, hemos colocado mamparas, la obligatoriedad de las mascarillas tanto para los funcionarios como para las personas que vienen a realizar cualquier trámite, intentar mantener las distancias de seguridad en todo momento, geles hidroalcohólicos, los guantes y también hemos reforzado la limpieza”, expresó García.
Algunos siguen haciendo caso omiso a las distintas medidas impuestas por las autoridades sanitarias. Lo que lleva a que los agentes tengan que intervenir para hacer cumplir la ley. En plena ronda nocturna comprueban la presencia de un individuo en la barriada de Claudio Vázquez fuera del horario permitido, además no portaba la mascarilla que es de uso obligatorio. “Al joven se le va a proponer para una sanción por no portar la mascarilla y por llevar entre sus efectos personales sustancias estupefacientes. Tenía una importante cantidad de dinero, pero él reclamaba que lo había sacado del cajero. Ha retornado ya a su domicilio que se encontraba a pocos metros de aquí”, informa uno de los agentes actuantes.
Pero la labor de la Jefatura Superior va más allá, en esta pandemia ha sacado su lado más solidario. Este virus dejará una huella imborrable en nuestros corazones y, por supuesto, marcará un antes y un después en nuestras vidas. “Actualmente estamos realizando una labor solidaria, concretamente: ‘La lucha contra el covid, todos estamos en el mismo equipo’. Hemos hecho esta iniciativa para hacer un poco más ameno la estancia de los enfermos de covid aquí en el Hospital Universitario. Tenemos un gabinete de Prensa que actualmente está recibiendo dibujos y cartas solidarias. Todos los viernes nos dirigimos y se la traemos a nuestros particulares ‘pequeños ángeles de la guarda’ aquí en el hospital que se la trasladan a los enfermos del virus. Ellos están muy contentos porque se sienten muy arropados por la ciudad de Ceuta”, afirmó, Gema Martín, perteneciente al gabinete técnico del jefe Superior y al gabinete de Prensa.
Además, Martín añadió que la iniciativa surgió de la Jefatura Superior porque hay “muchos enfermos y entre ellos compañeros que lo están padeciendo y se encuentran ingresados”. “A nuestro querido compañero Paco Peña, que está luchando contra el covid y hasta hace unos días estaba ingresado en UCI, le mandamos un beso muy especial. También parte la iniciativa porque yo tengo la tercera fallecida por covid en Ceuta, Carmen Raya. Tengo una sensibilidad especial por su fallecimiento y porque para mí era como una madre”.
Aunque la covid haya acaparado toda nuestra atención, los agentes siguen tramitando las diferentes actas que llegan a la Jefatura. El virus no ha hecho que los policías dejen de ejercer su día a día como antes de la pandemia. “Nuestro trabajo diario es tramitar las diferentes actas que nos llegan de drogas, las relacionadas con el coronavirus, falta de respeto, armas... Con el estado de alarma seguimos trabajando igual, lo único que se ha incrementado el trabajo porque se han sumado todas las que provienen del tema del coronavirus. Nosotros proponemos para sanción y ya es Delegación del Gobierno la que decide y pone la cuantía de la multa”, comentó el funcionario de la Policía Nacional destinado en la comisaría de San Juan de Dios. Esto pasa en los despachos, ¿pero y en la calle?
Hay que cumplir con el toque de queda, y por eso los agentes montan diferentes controles para detectar a los que no respetan dichas medidas. Pasada la hora del toque de queda, los agentes comprueban la presencia de un vehículo marca BMW, en el que va un individuo. Tras preguntarle si su movimiento estaba bajo causa justificada, el ocupante del vehículo da evasivas y los agentes no dudan en pedirle la distinta documentación pertinente y hacerlo bajar del vehículo. “En el control estático hemos parado este vehículo y hemos decidido sancionarle por no cumplir el toque de queda impuesto por la Ciudad. Además a un motorista se le ha propuesto para la misma sanción y por no portar la mascarilla cuando es de obligatoriedad su uso. Como podéis observar todavía hay ciudadanos que no entienden, o no quieren aceptar las restricciones establecidas”.
Los agentes han visto un poco truncada la labor que desempeñaban en las distintas residencias de Mayores o en los centros educativos de la ciudad por la aparición del covid. Eso no evita que sigan sacando su lado más humano y esa ayuda que ofrecen al ciudadano. “Nuestra labor consiste en distintos planes: comercio seguro, turismo seguro, el plan director que recorremos por todos los centros educativos de Ceuta y en plan mayor. Nos encontramos en la residencia Nuestra Señora de África, y nos encanta nuestro trabajo, pero se ha complicada por la circunstancias. Siempre colaboramos con ellos, les damos consejos de seguridad y cualquier percance que tengan estamos al corriente con el plan de contingencia de cada residencia. Es una labor muy agradecida y valorada porque siempre obtenemos resultados positivos”, afirmó Alejandra Salmerón, perteneciente al grupo de Participación Ciudadana, en una de las visitas al centro. En la calle sigue otro tipo de actividad. La Policía Nacional no cesa en su trabajo.
Es hora punta y los controles empiezan a aparecer. Cerca de la estación marítima siguen las restricciones de movilidad, en la jornada del viernes siempre se incrementan. “Nos dedicamos a realizar controles de seguridad ciudadana las 24 horas del día, los 365 días del año. El control que estamos realizando en la avenida Cañonero Dato es uno de los que hacemos para controlar personas, vehículos o todo lo que sea susceptible de controlar”, expresó, Arturo, subinspector de la Unidad de Prevención y Reacción de la Jefatura Superior de Ceuta.
Es hora punta. Las 14:00 horas del viernes. Aunque Ceuta cerró perimetralmente con Andalucía por la situación del coronavirus en nuestra ciudad, es el día con más tránsito. “Nos encontramos en la puerta de embarque, con la nueva situación covid. Toda persona que quiera embarcar rumbo a la Península debe traer un justificante de su viaje como así lo marca el real Decreto” indicó, Pablo Gómez, inspector jefe de los puestos fronterizos de Ceuta.
Gómez expresó que el viernes es uno de los días con más afluencia de pasajeros, pero que se “nota” las nuevas medidas restrictivas impuestas por la Ciudad, ya que “muchos” de los días los barcos no viajan con “más de 20 personas”.
“Estamos ahora en los filtros de vehículos, por aquí es donde se realiza el control de los ciudadanos que van acceder a los barcos. Igualmente se le solicita la documentación tanto al conductor como a sus acompañantes. Además, es importante el registro de los vehículos ya que es una zona con mucho tránsito de camiones y vehículos industriales donde suelen esconderse la inmigración irregular” para intentar cruzar el Estrecho.
Empieza a caer la luz del sol, los coches siguen circulando por las distintas calles de Ceuta. Los agentes se disponen a realizar diferentes controles en varios puntos. Tener todo asegurado es su única función. “Estamos montando diferentes puntos, que normalmente realizamos durante las 24 horas del día y en diferentes puntos de la ciudad. Normalmente cambiamos el lugar en el que realizamos los puntos de control para intentar sorprender a las personas que quieran realizar algún acto ilícito. Son muy parecidos a los que hacíamos antes de la pandemia, lo único que hemos añadido es que el ciudadano debe también cumplir las medidas covid y para eso estamos muy atentos de, cuando van en vehículo, pedir la documentación para saber si son convivientes o no” afirmó, Medina, perteneciente al grupo de Atención al Ciudadano.
Una labor policial que recobra mucha más importancia desde la aparición del coronavirus, ya que siempre están ejerciendo una labor para intentar que los ciudadanos cumplan y poder así salir de una pandemia que tanto daño está haciendo en Ceuta, en donde los casos activos se encuentran en el medio millar, una cifra nunca antes pensada.
Los agentes se disponían a realizar una punto de verificación en las cercanías del cuartel de Caballería. En la marcha encontraron a un individuo que no portaba la mascarilla y además estaba en la vía pública fuera del horario permitido. Tras pedirle la documentación y cachearle llevaba encima sustancia estupefaciente para consumo.
Los agentes patrullaban por la zona de la plaza Azcárate, un poco más de las 23:00 horas, cuando apreciaron que un bar conocido de la zona se encontraba con las luces encendidas. Tras ir a comprobarlo, los trabajadores ya se encontraban limpiando el establecimiento y al requerirle la documentación contaban con todo en regla.
Un ejemplo de que, la mayoría de los ceutíes, hacen caso a las normas impuestas por la Ciudad para intentar salir lo antes posible de esta pandemia.
Un aviso desde la Jefatura Superior de la Policía Nacional hizo saltar todas las alarmas. En una vivienda de La Marina sonaba la música demasiada alta para pasar las 23:00 horas. Tras la llamada de los vecinos, los agentes acudieron al lugar para comprobar si estaba ocurriendo una fiesta encubierta. Al llegar al domicilio solo se apreció a 4 trabajadores que residían en ese domicilio a los que la música se les fue de las manos. Los policías comprobaron su documentación y les amonestaron verbalmente.
Los ancianos de las residencias de Mayores estaban acostumbrados a la presencia de la Policía, pero el covid ha hecho que se imposibilite esa acción. Está dentro de un programa de ayuda al ciudadano.
Dentro del programa: ‘La lucha contra el covid, todos estamos en el mismo equipo’, los niños y niñas realizan dibujos durante la semana y los viernes son entregados en el Hospital Universitario para sentir el cariño de Ceuta. Los agentes realizan esta labor para que comprueban que “no están solos” en la lucha.
Noche muy intensa la que tuvieron que vivir los agentes de la Policía Nacional en Piniers. Por una parte, los agentes tuvieron que desplegarse en la zona por el aviso de que un menor había agredido a un vigilante de seguridad. Al llegar a la zona, se encontraba muy agresivo e incluso se había autolesionado por lo que los agentes lo tuvieron que reducir y llamaron al 061 para que una ambulancia lo trasladara al Hospital Universitario y le curaran las heridas. La tensión crece por minutos. Un aviso de que unas menores se encuentran a las espaldas de Piniers hacen que se activen todas las alarmas. Los agentes salen en su busca y uno de los zeta consigue encontrarlas en la oscuridad de la noche, pero no se muestran muy receptivas tras comprobar la presencia de los policías. Estos tienen que reducirlas y detenerlas, en ese forcejeo uno de los agentes sufre una herida de gran envergadura en su mano, además le mordieron. Los policías la tienen que conducir hasta los vehículos y llevársela detenidas hasta la Jefatura Superior de la Policía Nacional.
Durante “las 24 horas del día y los 365 días del año” como reconocen los propios agentes a FaroTV realizan diferentes puntos de control por distintas partes de Ceuta. Estos controles se siguen manteniendo, a pesar de la aparición del coronavirus. Como los propios agentes explicaron, el covid solo ha hecho incrementar su labor, porque ellos tienen que seguir con su trabajo diario que es, sobre todo, intentar controlar todo lo que ocurre en la ciudad y evitar que se realice cualquier acto que altere el orden.
Las restricciones de movilidad ha duplicado el trabajo de los agentes que tienen que pedir que justifiquen su viaje antes de poder embarcar en el ferri, tanto si se trata de los pasajeros a pie, como los que quieren cruzar con sus vehículos. En la zona de los coches, los agentes, además de identificar a los ciudadanos, están controlando los bajos de los camiones para evitar que se colaran inmigrantes.
El coronavirus ha copado todas las portadas. Siempre está presente en cualquier tipo de conversación, pero eso no ha llevado que desde la Policía Nacional se hayan dejado otras labores que son de obligado cumplimiento para no atascar los diferentes trámites que realizan.
Entre ellos el realizar las diferentes actas que llegan de las labores que realizan los agentes en las calles.
El trabajo es proponer a la persona en cuestión a un multa y enviar los documentos a la Delegación de Gobierno que es la encargada de tramitar la denuncia y hacer llegar al infractor su multa.
Durante la pandemia se han visto incrementada las denuncias con las denominadas ‘denuncias covid’ aunque se sigue trabajando a destajo con otras labores que se daban con habitualidad antes de que apareciera el virus.
Las actas de consumo de estupefaciente en la vía pública sigue siendo una de las denuncias ‘estrella’.
La sede del Paseo del Colón ha elaborado una lista de medidas de obligado cumplimiento para evitar que, tanto los agentes que trabajan en ella como los ciudadanos que van a realizar sus trámites, se contagien. Entre las medidas destacan la reducción de aforo en los despachos, la colocación de mamparas y la obligatoriedad del uso de la mascarilla en todo el recinto.
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